El agua en Guerrero es vasta, la carencia está en los servicios básicos, revela estudio

Entonces, si la población en ciudades como Chilpancingo tiene menor acceso al agua, es por la falta de infraestructura


Texto y fotografía: José Miguel Sánchez

Chilpancingo

 

A nivel nacional el problema del agua en Guerrero no es considerado un tema prioritario, diversos estudios afirman que en el estado hay agua suficiente y pocas veces en su historia presentó problemas de sequía.

Pero el desabasto de agua en los hogares de los guerrerenses es un problema con el que lidian todos los días, de manera principal en Chilpancingo, donde el agua es suministrada en algunas colonias del centro de la ciudad cada 15 días y en las más alejadas la espera puede durar hasta tres meses o cuatro meses.

Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) mencionan que el 62 por ciento del territorio guerrerense cuenta con agua disponible.

Para dimensionar el caso, los estados del norte como Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Chihuahua, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas apenas tienen 9 por ciento del agua disponible para su territorio.

Guerrero está dentro de los siete estados donde más de la mitad de su agua es renovable, es decir, que proviene de la temporada de lluvias y no presentan afectaciones por sequía.

Los otros estados en esta condición son Chiapas, Oaxaca, Campeche, Quintana Roo, Yucatán, Veracruz y Tabasco, de acuerdo con el último Censo sobre acceso al agua potable y drenaje publicado en 2020.

El mismo estudio reconoce que en estos estados del sur es donde sus habitantes tienen menos acceso al agua.

Ahí concluyen que el problema de disponibilidad de agua en el país se debe a la falta de servicios básicos, como las tuberías y el drenaje.

“Estos estados tienen menor acceso al vital líquido, pues, no cuentan con los servicios básicos, como es agua entubada dentro de la vivienda”, se lee en el censo.

Las cifras de agua entubada y drenaje es donde se observan las principales diferentes y probablemente el origen del problema.

En Guerrero, como ya se mencionó, 62 por ciento de su territorio cuenta con agua, pero es el penúltimo estado en el que sus habitantes cuentan con servicio de agua entubada, seguido de Oaxaca.

“A nivel nacional, en 1990, el 62 por ciento de las viviendas contaban con servicio de agua entubada, el porcentaje se elevó a 75 por ciento en el año 2000, para 2005 fue de 85 por ciento y en 2010 se ubicó en 89 por ciento. Las entidades con el menor porcentaje de viviendas que cuentan con este servicio son Guerrero y Oaxaca con 72 y 70 por ciento respectivamente”, se lee en el documento del censo.

Caso contrario ocurre en los estados del norte, donde la sequía y falta de agua es un problema recurrente.

En Nuevo León, Tamaulipas, Baja California y Baja California Sur el servicio de agua entubada está garantizado para 98 por ciento de su población, de acuerdo con la información del censo.

Aun cuando en sus estados el agua el insuficiente, el suministro en los hogares de ciudades como Monterrey, Tijuana y Mexicali es diario. “En tanto, las capitales de los estados donde hay agua, los suministros no están garantizados para la población”.

Los datos del INEGI concluyen que el crecimiento demográfico también es un factor determinante para el suministro de agua.

“Debido al crecimiento de la población, la disponibilidad de agua ha disminuido de manera considerable: en 1910 era de 31,000 metros cúbicos por habitante al año; para 2019 disminuyó a 3,586 metros cúbicos anuales por cada mexicano”, exponen en el estudio.

En la edición del día de ayer, la activista por el medio ambiente, Angela Memije Alarcón, atribuyó la falta de agua a un desinterés gubernamental en tres rubros: infraestructura, presupuesto y educación ambiental.


Existe agua suficiente para Chilpancingo, lo que faltan son acciones institucionales

Texto: José Miguel Sánchez

Fotografía: Amílcar Juárez / Archivo

Chilpancingo

Guerrero comenzó el año con 7 por ciento de su territorio seco y 93 por ciento sin sequía, de acuerdo con el último reporte del Monitor de Sequía en México publicado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Aun cuando el panorama parece alentador, la realidad es que los habitantes de Chilpancingo continúan con desabasto de agua en sus hogares.

Los municipios que presentan una sequía moderada son José Azueta, La Unión y Coahuayutla en la Costa Grande; Tlacoachistlahuaca, Xochistlahuaca en la Costa Chica; Zirándaro, Cutzamala de Pinzón y Coyuca de Catalán en la Tierra Caliente.

La sequía moderada es el mínimo nivel de sequía que maneja dicho estudio, por lo que en Guerrero la falta de agua no es catalogada como un problema, caso contrario de los estados de Tamaulipas, Nuevo León y Querétaro que presentan una “sequía excepcional”.

El caso de Chilpancingo está catalogado como anormalmente seco, lo que significa que no hay sequía o falta de agua de manera preocupante.

La estadísticas difundidas por Conagua mencionan que 90 por ciento, casi la tercera parte de la entidad, está “anormalmente seca” o “DO”, que es como se catalogan los tipos de afectaciones.

Aun cuando en Guerrero, de acuerdo con los datos de Conagua, no existe un problema sobre el agua, el desabasto de agua en ciudades como Chilpancingo y Acapulco cada día crece sin que alguna autoridad pueda resolverlo.

En colonias del norte de Chilpancingo como la Azteca, Villas Laurel, PPS desde hace mes y medio la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (CAPACH) no garantiza el abasto de agua, de acuerdo con denuncias de algunos vecinos.

De acuerdo con la activista por el medio ambiente y coordinadora del Comité de Cuenca del Río Huacapa-Río Azul, Ángela Memije Alarcón, el caso de la falta de agua se debe a tres factores principales que impide a los ciudadanos de Chilpancingo el acceso al agua.

El primero es que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) tenga una tarifa especial para los organismos operadores de agua. En el caso de CAPACH, de acuerdo con la última información que han hecho pública desde el organismo, debe a CFE 68 millones de pesos.

El otro caso es la voluntad política y financiera para que operen las seis plantas tratadoras que hay en la cuenca del río Huacapa; sólo opera la de Chilpancingo y no en un 100 por ciento, denunció Memije Alarcón en entrevista telefónica.

“En Chilpancingo tenemos mucha agua, pero hacen falta acciones de todos los niveles de gobierno para que podamos juntos resolver el tema”.

Otro de los problemas que genera el desabasto de agua o que en los centros de captación no haya suficiente agua, según la activista es la falta de estrategias de reforestación.

“No hay campañas verdades de reforestación, se tiene que reforestar Omiltemi que es la cabeza de la cuenca y el tema está olvidado por las autoridades y nosotros como sociedad hemos asumido el papel, pero no es suficiente”.

Actualmente habitantes de la comunidad de Acahuizotla desde el pasado viernes mantienen tomado el sistema de bombeo que está en su comunidad y que abastece de agua a una parte importante de la capital.

El pasado viernes, los pobladores de Acahuizotla tomaron las instalaciones de la planta de bombeo y suspendieron con ello el suministro de agua a la capital, porque la alcaldesa Norma Otilia Hernández Martínez incumplió compromisos que hizo para realizar obras de beneficio social.

Agua suficiente para Chilpancingo hay, de acuerdo con los estudios y análisis de la Conagua, lo que falta son otros esfuerzos institucionales.


Amenazan con cortar suministro de agua a Chilpancingo sino hay solución a trabajadores de Capach

Texto: José Miguel Sánchez

Fotografía: Oscar Guerrero / Archivo

Chilpancingo

 

Trabajadores de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach) que llevan ocho días en paro de labores, amenazaron con suspender el suministro de agua a la ciudad si la alcaldesa, Norma Otilia Hernández Martínez, no soluciona sus demandas.

Los trabajadores de Capach, agremiados a la Sección XXXII del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), están en paro desde el martes de la semana pasada y exigen el pago de quincenas atrasadas y prima vacacional.

«Si no hay respuesta resolutiva o no se comprometen tenemos que tomar acciones y radicalizarlas si es necesario, si tenemos que suspender los servicios de bombeo de agua a la ciudad, pues lo tenemos que hacer», mencionó el secretario general de la Sección XXXII, Gaudencio Atrisco Campos.

La exigencia de los trabajadores, además de las quincenas atrasadas y la prima vacacional, es el pago retroactivo desde el mes de enero, bono del servidor público, apoyo por defunción, despensas y seguro de vida.

Atrisco Campos explicó que son concientes de la situación económica de Capach por lo que solo piden, en un primer momento y para levantar el paro de labores, el pago total de las quincenas atrasadas y la prima vacacional de este año.

«Para lo demás estamos dispuestos a negociarlo con más tiempo, pero de momento si pedimos una solución real», mencionó Atrisco Campos.

La deuda de Capach a los trabajadores asciende a 10 millones de pesos, pero lo que se necesita para que levanten la huelga son tres millones.

De acuerdo con Atrisco Campos la unica solución que ofrece el Ayuntamiento capitalino es un pago semanal de 300,000 pesos para pagarle a un trabajador al día.

«Somo 194, se van a llevar un año en acabar de pagarnos, y eso no es un planteamiento resolutivo», dijo.

Los trabajadores esperan en las próximas horas una reunión con autoridades municipales para llegar a acuerdos.

El paro de labores se realiza en las oficinas de Capach. El inmueble no está tomado, por lo que si hay labores de personal de confianza.

Deudas a Capach

Otro de los problemas de Capach es que usuarios adeudan más de 165 millones en recibos de agua desde hace más de 25 años, informó el director de la dependencia, Enrique Carbajal Neri.

De acuerdo con Carbajal Neri, desde la semana pasada, el problema de la falta de pagos y prestaciones a los trabajadores aumentó ante la falta de solvencia económica de la paramunicipal.

En suma, son 165 millones 500 mil 711 pesos lo que se acumula en deudas.

Precisó que 20,932 usuarios deben 104 millones 412 mil 697 pesos.

En segundo lugar de esa lista aparecen 453 usuarios que se dedican a la renta de inmuebles, quienes adeudan 11 millones 173 mil 260 pesos.

Entre los deudores también hay oficinas del gobierno estatal, que suman 14 millones 798 mil 265 pesos.

En el listado se encuentran accesorias, pozolerías, cocinas económicas, restaurantes, tortillerías, bancos, escuelas y hospitales.

 

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Familias siguen con las protestas por falta de agua en Chilpancingo y alcaldesa dice que no hay

Texto: José Miguel Sánchez

Fotografía: Oscar Guerrero / Archivo

12 de abril de 2022

Chilpancingo

Mientras que la alcaldesa morenista de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández, dijo que hay graves problemas de abasto de agua para las colonias y barrios, grupos de vecinos de esta ciudad nuevamente protestaron en las calles para exigir el suministro en sus tomas domiciliarias.

La presidenta municipal y el director de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach), Luis Enrique Carbajal Neri, ofrecieron una conferencia de prensa para salir al paso a las críticas que ha hecho la población por la falta de este servicio.

Hernández admitió que debido a la baja captación de agua de los tres principales sistemas de abastecimiento (Omiltemi, Acahuizotla y Mochitlán) será difícil darle el agua a las familias de las 700 colonias de Chilpancingo.

Carbajal Neri informó que el caso más grave es el del sistema de Omiltemi, donde están captando 50 litros por segundo de agua cuando lo normal es de 150 litros. Dijo que la Capach tiene un adeudo histórico con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) por 68 millones de pesos, y por esa situación hay cortes de luz por un par de horas de manera constante, lo que a su vez impide un bombeo continuo de agua en la ciudad.

Dijo que la paramunicipal adeudaba 78 millones de pesos a la CFE, pero que en lo que va de esta administración le abonaron 10 millones de pesos y aun así siguen cortándoles el suministro de luz eléctrica a los sistemas de agua de Mochitlán y Acahuizotla.

Otro problema que se enfrenta y que contaron los funcionarios municipales es el taponamiento de las tuberías de la red, porque el agua que se trae de los sistemas de captación de Mochitlán y Acahuizotla tiene muchos minerales. «El sarro que se acumula en las tuberías es lo que provoca que estas se tapen e impidan que corra el agua generándose fugas», dijo Carbajal Neri.

También mencionó que de las 44,000 tomas de servicio de agua, 30 por ciento no paga el recibo de agua a la Capach, lo que le genera un déficit financiero a este organismo paramunicipal.

En la misma conferencia de prensa en el ayuntamiento, el director de Obras Públicas del ayuntamiento, Carlos Alberto Leyva Vázquez, informó que en este 2022 se están invirtiendo 69 millones de pesos para restaurar las tuberías de la red de agua y drenaje de esta ciudad, y otros 16 millones para reparar los sistemas de captación de agua de Mochitlán y Acahuizotla.

En tanto, vecinos de la colonia del PRI protestaron en las oficinas de Capach para exigir que el gobierno que encabeza la alcaldesa Norma Otilia Hernández cumpla con el suministro de agua como  les prometieron las autoridades el pasado 2 de abril, cuando cerraron un puente peatonal y vehicular que está frente a una tienda departamental, al sur de esta ciudad.

De acuerdo con Arturo Brito Castillo, vecino de la colonia del PRI, Capach incumplió el acuerdo de enviar el agua a más tardar el 6 de abril, por lo que decidieron manifestarse en las instalaciones de la paramunicipal.

Funcionarios de Capach que se percataron de la protesta salieron a dialogar con los colonos.

Después de la reunión, uno de los colonos comentó que les prometieron que este martes les caería el agua a sus tomas domiciliarias.

Desde la semana pasada en varios puntos de Chilpancingo han incrementado las protestas de la gente para exigir el suministro del agua. Las autoridades municipales para desactivar las protestas han enviado pipas de agua a colonias y barrios de esta ciudad. Los inconformes se han quejado porque solamente les dan para llenar un tinaco de 500 litros o, a veces, sólo seis u ocho cubetas.

Desde la semana pasada, familias de los barrios de San Mateo, San Antonio, las colonias Alianza Popular, Emiliano Zapata, CNOP, Sección B, San Lucas, Guerrero, Obrera, Vista Hermosa y El Bordo de San Mateo han bloqueado calles en reclamo de agua.

La alcaldesa ha minimizado estas protestas acusando a  funcionarios de la anterior municipal de participar en estas movilizaciones contra su gobierno.

Familias de Chilpancingo gastan en agua seis salarios mínimos al mes

Aumentan las protestas en reclamo de agua; hoy cinco bloqueos simultáneos en la ciudad


Texto: José Miguel Sánchez 

Fotografía: Oscar Guerrero 

7 de abril de 2022

Chilpancingo

 

Como cada temporada de estiaje la captación de agua en los sistemas para municipales se reduce y las familias deben comprarla en pipas, lo que afecta la economía familiar. Sonia Fernández y su familia, habitantes de la colonia Alianza Popular de Chilpancingo, quienes llevan tres meses sin recibir agua potable en sus casas, gastan en promedio 1,000 pesos mensuales en pipas, lo que representa un 35 por ciento del salario mínimo.

“Ya tenemos bien calculada el agua, cada 20 días sin falta llamamos a la pipa de 10,000 litros, que nos cobra 750 pesos”, comentó Sonia. Con esta cantidad se calculó el gasto mensual de agua de esta familia de cinco integrantes.

Por los tres meses transcurridos sin agua potable lleva 3,000 pesos gastados. “Nosotros ya ni marcamos a la pipa, al contrario, ellos ya saben y a los 20 días nos marcan preguntando si ya nos traen el agua”, contó Sonia.

Si tomamos como base el salario mínimo, que es 172 pesos diarios, una persona con esa percepción necesita trabajar cinco días, destinando todo su ingreso, para adquirir una pipa de agua de 10,000 litros.

La familia de Sonia compró una pipa cada 20 días, entonces, su gasto para tener agua fue similar a un 35 por ciento del salario mínimo, aun cuando la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach) cobra a la población por el servicio.

La realidad es que el organismo no cuenta con los recursos para abastecer completamente de agua a la ciudad. A Chilpancingo no entra el agua suficiente para abastecer a las 700 colonias que existen.

Se requieren de 600 a 700 litros de agua por segundo para que el tandeo de agua sea una vez a la semana; sólo ingresan en temporadas buenas, no como en esta de estiaje, 250 litros.

Además de la falta de agua para abastecer a la ciudad, la Capach tiene una deuda de 73 millones de pesos con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), lo que genera un bombeo de agua insuficiente.

El monitor de sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) indica que este año se observaron lluvias por arriba del promedio en Tabasco, Chiapas y la Península de Yucatán, pero no son suficientes para contrarrestar la sequedad del suelo en 15 de 32 estados de la República que “en estos momentos sufren de sequía extremadamente alta”, se lee en el informe de Conagua.

Aun cuando Guerrero no figura en los estados con sequía extrema, la realidad es que la falta de agua obliga a los colonos de Chilpancingo a manifestarse para exigir agua.

El día de hoy ocurrieron cinco bloqueos en distintos puntos de la ciudad para exigir a la Capach el suministro eficiente de agua: dos en el antiguo Libramiento a Tixtla, a la altura del cuartel de la Policía Municipal; dos en el barrio de San Mateo, calle s Corregidora y Humberto Osorio Regino, y otro en la colonia Emilia Zapata, donde es la tercera que protestan.

En el barrio de San Mateo, los vecinos denunciaron que llevan seis meses sin agua potable; por es razón de bloquearon las calles.

A ese punto de la ciudad llegó Arturo Carranza Martinez, del área de atención a usuarios de Capach, y se comprometió a darles dos pipas de agua para minimizar la escasez de agua en el barrio.

Dos horas después de que inició el bloqueo llegaron al barrios las pipas gestionadas por Capach, y fue que los vecinos se retiraron.

De manera simultánea en el Libramiento a Tixtla, vecinos de la colonia CNOP, Paraíso, Atlitenco de Altamira, y Ahuiyuco bloquearon la circulación, y una cuadra más adelante, en la esquina de la calle Heroico Colegio Milita, estaban los vecinos de la Alianza Popular.

En ambos bloqueos, los vecinos pedían lo mismo, el suministro de agua.

Moises Olivares Peña, vecino de la colonia Atlitenco de Altamira, dijo que llevan de tres a seis meses sin agua, por lo que decidieron manifestarse.

Aun con los bloqueos constantes, el ayuntamiento municipal no ha presentado una estrategia o proyecto para dar solución a la problemática del agua.

 

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Día Mundial del Agua. No funcionan cinco plantas tratadoras en Río Huacapa, dice ambientalista

Se necesitan de 500 a 600 litros por segundo para que el tandeo de agua sea por lo menos una vez a la semana, pero las fuentes de captación en buenas temporadas solo logran recolectar 350


Texto: José Miguel Sánchez 

Fotografía: Amílcar Juárez

22 de marzo de 2022 

Chilpancingo  

La activista por el medio ambiente, Ángela Memije Alarcón, denunció que cinco de las seis plantas tratadoras de aguas residuales que se ubican en la micro cuenca del Río Huacapa – Río Azul siguen sin funcionar, y la de Chilpancingo, que es la única en activo, no está operando al cien por ciento.

Explicó que esta micro cuenca comienza en la comunidad Omiltemi, en la Sierra de Chilpancingo, y termina en Quechultenango, donde el Río Azul se convierte en Río Omitlán para juntarse con en el Papagayo y finalmente desembocar en las aguas del Océano Pacífico, en Acapulco.

Para sanear el recorrido que hace el agua existen seis plantas tratadoras para la micro cuenca, las cuales se ubican en Jaleaca, Amojileca, Chilpancingo, Tepechicotlán, Cozcamila y Quechultenango, de las cuales la única que funciona es la de Chilpancingo, dijo Memije Alarcón.

Agregó que el proyecto de las seis plantas tratadoras era sanear toda el agua de la cuenca desde río arriba con el objetivo de llegar al río Omitlán lo menos contaminada y que en el proceso el agua tratada fuera de ayuda para los agricultores de la zona.

“Tenemos seis plantas de tratamiento, ya existe la infraestructua, lo que le pedimos a las autoridades es que se rehabiliten para lograr sanear el agua”, comentó.

A pesar que la planta tratadora de Chilpancingo es la única en funcionamiento, no está trabajando el cien por ciento debido a la descompostura de algunos equipos necesarios para sanear el agua.

Memije Alarcón explicó que eso es una problemática que se debe abordar con todos los niveles de gobierno e hizo un llamado a las autoridades municipales, estatales y federales para, en conjunto, resolver la problemática del agua.

“Se deben gestionar tarifas especiales para que los organismos operadores de agua como Capach no paguen tanto por el servicio de luz, los costos elevados hacen que se bombee menos agua y que las plantas tratadoras no funcionen”, dijo.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) aseguran que en México hay 44 millones de personas que no tienen acceso diario al agua, y ocho millones no cuentan con tuberías que les provean este servicio a sus hogares.

Chilpancingo vive estrés hídrico  

De acuerdo con datos de Capach a Chilpancingo ingresan 250 litros de agua por segundo, lo que es insuficiente para abastecer a toda la ciudad.

Se necesitan de 500 a 600 litros por segundo para que el tandeo de agua sea por lo menos una vez a la semana, pero las fuentes de captación en buenas temporadas solo logran recolectar 350.

La falta de agua en Chilpancingo genera un fenómeno llamado estrés hídrico, y de acuerdo con Memije Alarcón eso es el causante de las protestas y bloqueos de los colonos de Chilpancingo porque la demanda de agua es más alta que la cantidad disponible.

“Nos dan agua cada 20 días o tres meses y tenemos que bañarnos, lavarnos las manos, lavar nuestra ropa, pero ¿cómo vamos hacer todo eso si no hay agua? eso al ama de casa, al estudiante, al padre de familia le causa estrés, porque no sabe cómo le va hacer”, dijo.

Datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) indican que para el año 2025, mil 900 millones de personas vivirán en países o regiones que enfrentan una escasez absoluta de agua, y dos tercios de la población mundial en una situación de estrés hídrico.

La ambientalista que este martes participò en un acto oficial por el Día Mundial del Agua y que se desarrolló en la plaza central de Chilpancingo, planteó que para solucionar el tema del agua es necesario realizar acciones conjuntas entre la autoridades y sociedad.

Es decir, detalló, que haya propuestas que sean apoyadas económicamente desde los tres niveles de gobierno.

 

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Desabasto de agua en Chilpancingo: Emma y la historia de los lavaderos públicos

Texto y fotografía: José Miguel Sánchez

1 de marzo de 2022

Chilpancingo

A las 8 de la mañana Emma Ávila espera que abran los lavaderos públicos de la barranca Pezuapa. A los cinco minutos llega el encargado de los lavaderos, Fabián Ramírez Rodríguez y abre la puerta.

Emma es la única persona que la mañana de hoy fue a lavar cuatro kilos de ropa aproximadamente, la transporta en una bolsa negra y una cubeta de pintura algo envejecida.

Los lavaderos públicos en la capital son alternativas para las personas que sufren el desabasto de agua en la ciudad, como una medida para cuidar su agua, prefieran pagan 15 pesos por lavar en estos espacios públicos, que gastar agua que en muchos casos fue comprada a pipas debido a la falta de agua en la ciudad.

Para Emma, que vive en la colonia los sauces a poco metros de estos lavaderos no se le complica mucho el traslado, y lo hace como una medida para ahorrar agua.

Hay personas que se trasladan de colonias muy alejadas de Chilpancingo para lavar ropa y tienen que pagar traslado en taxi por lo pesado de la ropa.

“Aquí luego llegan señoras que de la Plan de Ayala, de la 1 de Mayo, de la CNOP a lavar su ropa, y muchas de ellas lavan ropa ajena”, cuenta Ramírez Rodríguez.

Ramírez Rodríguez no solo es el encargado de los lavaderos, lo es de todo el andador Pezuapa que conecta la colonia Margarita Viguri con el barrio de Tequicorral.

Y cuenta que los lavaderos de la barranca Pezuapa son de los más económicos de la ciudad, cobran 15 pesos por el tiempo que necesiten, mientras que otros lavaderos las cobran por hora.

Aun así la mañana de hoy solo Emma está lavando su ropa.

“Yo me vengo una vez a la semana y aprovecho para lavar la ropa de toda mi familia, de mi esposo y de mis tres hijos, y si me llevo como unas tres horas para acabar, llegó a las 8 y me voy como a las 12 del día”, cuenta Emma.

Emma lo hace para no gastar el agua que compró, ya que dice que en su colonia no cae agua desde hace un mes.

Este lavadero tiene una capacidad para que 20 personas estén lavando ropa simultáneamente aunque Ramírez Rodríguez acepta que por la pandemia del Covid-19 la afluencia de personas en los lavaderos bajo demasiado, como el día de hoy que solo Emma está lavando su ropa.

“Antes eran espacios para saludarnos entre vecinos, platicar, aquí nos juntábamos todos, pero hoy ya es muy poca la gente que viene”, comenta Ramírez Rodríguez.

Uno de los problemas que genera la falta de gente es que no se junte el dinero para el mantenimiento o para comprar las pipas de agua para llenar los tanques, Ramírez Rodríguez admite que el agua entubada que le debe surtir la Comisión de Agua y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach) es muy escasa y no abastase como se merece un servicio de este tipo.

Ramírez Rodríguez aprovechó para contar la historia de estos lavaderos, que en un principio fue administrado por su madre, Ofelia Rodríguez Jiménez, quien para ganar dinero lavaba ropa ajena de sus vecinos.

Por esa razón los lavaderos de la barranca Pazuepa fue su centro de trabajo, día con día iba a lavar ropa.

Fue durante la administración del gobernador Alejandro Cervantes Delgado que se creó el parque conocido como Los Tuneles y se remodelaron los lavaderos.

Los vecinos del lugar, sabiendo que Ofelia estaba a diario en los lavaderos la propusieron como encargada del lugar.

Cervantes Delgado aceptó la propuestas y por 35 años Ofelia fue encargada de los lavaderos, falleció a la edad de 93 años en 2015, a partir de ahí, su hijo es el encargado.

Ramírez Rodríguez contó que hay desatención gubernamental a estos espacios, ya que con los 15 pesos que él cobra por lavar le tiene que dar mantenimiento no solo a los lavaderos, sino a todo el parque Pezuapa, conocido popularmente como Los Tuneles.

“De repente se roban los tinacos de los baños públicos y hay que comprarlos, hacemos la gestión y con trabajos nos lo reponen, piensan que yo me quedo con el dinero”, comentó.

 

Indiferencia municipal ante el crítico desabasto de agua en Chilpancingo

Los tres puntos de producción de agua son los mismos que los de hace 60 años y la ciudad ha crecido. Hasta en la década de los ochentas eran 60 colonias y cuatro barrios, ahora son más de 700


Texto: José Miguel Sánchez

Fotografía: Amílcar Juárez

28 de febrero del 2022

Chilpancingo

Han pasado tres meses sin que haya agua potable en la casa de Teresa Molina Valle, vecina de la colonia Ampliación Primero de Mayo, ubicada al poniente de la ciudad.

Teresa es parte de la familia Solache Molina, que comparte su hogar con otras tres familias más. Todos juntos suman 15 personas en una vivienda que lleva 60 días sin el servicio de agua por parte de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach). En esa colonia, todas las familias están igual: a la espera de que les llegue el agua.

En Chilpancingo el abastecimiento de agua es un problema que ninguna administración municipal ha resuelto pese a que cuando empiezan su mandato, las nuevas autoridades informan de obras de millonarias en infraestructura hídrica.

Incluso es una promesa recurrente de campaña. Al menos fue para la actual acaldesa, Norma Otilia Hernández Martínez.

Vivir en esa incertidumbre es difícil, porque, además de no tener el abastecimiento de agua, la economía de las familias se complica porque tienen que comprar pipas.

Teresa Molina Valle contó que entre todos los inquilinos que habitan su vivienda se cooperan para la compra de pipas.

“Yo pago el agua por año el servicio a Capach pero nunca nos llega a nuestras tuberías». «Aquí vivimos 15 personas y tenemos que comprar una pipa grande que vale 900 pesos”, comparte.

Una de las alternativas que esta familia busca es reciclar el agua.

“El agua que utilizamos para lavar la ropa o trastes la ocupamos para el baño y para regar las plantas”, dice Teresa.

Tan grave es la situación de la escasez de agua en sus tomas de agua que, muchas de las familias de esta colonia Primero de Mayo tienen que acudir a algunos lavaderos públicos ubicados en distintos puntos de Chilpancingo.

Por ejemplo, narra Teresa Molina, en su caso va a lavar su ropa al lavadero de la colonia Vicente Lombardo Toledano que está ubicada al sureste de esta capital.

Trasladarse a ese punto es para ellos una verdadera travesía: se levantan a las cinco de la mañana para llegar puntuales al lavaderoy así alcanzar por un espacio de 3 horas que utilizan para lavar sus kilos de ropa.

Por el agua y los lavaderos que utilizan, les cobran diez pesos, cuenta Teresa.

¿De dónde se abastece de agua a Chilpancingo?

De acuerdo a la Capach, son tres las principales fuentes de abastecimiento de agua para las familias de esta capital: Omiltemi, Acahuizotla y Mochitlán.

Omiltemi surte a las colonias del norte, noreste y poniente de la ciudad, mientras que Acahuizotla y Mochitlán a la zona sur y sureste.

Desde hace años, familias de varias colonias del poniente de esta ciudad participaron en la construcción de dos fuentes de abasto: Iglesia Vieja y Peña Rajada.

Ayer domingo, familias de las colonias Plan de Ayala, La Pradera, Independencia, Las Palmas, Eduardo Neri y Lomas del Poniente, dieron una conferencia de prensa para presentar a sus integrantes de la Asociación del Sistema de Agua Peña Rajada.

Exigieron a las autoridades la rehabilitación de cuatro kilómetros de tubería de este sistema que opera desde hace 30 años y que beneficia a 30 mil habitantes de estas seis colonias de Chilpancingo.

En entrevista, el director de atención integral de Capach, Arturo Martínez Carranza, en estos momentos de estiaje, los tres principales sistemas de agua Mochitlán, Omiltemi y Acahuizotla, producen 250 litros de agua por segundo que es insuficiente para abastecer a las familias de esta capital.

Dijoa que es en época de lluvias cuando se logra captar entre 300 y 400 litros por segundo de agua pero también no alcanza para cubrir todas las necesidades de abasto a los más de 300 mil habitantes de Chilpancingo.

Los tiempos para que Capach otorgue este servicio a determinada colonia dependen de la cantidad o temporada de captación de agua en cualquiera de los tres principales sistemas.
“Capach tarda mucho en surtir agua en las colonias porque no tenemos de donde sacar más, debido a que los tres sistemas principales en época de estiaje no captan lo suficiente”, explicó Martínez Carranza.

Otro problema para garantizar el abastecimiento es que los tres puntos de producción de agua son los mismos que los de hace 60 años pero además a través de los años las colonias en Chilpancingo han venido en aumento.

Hasta en la década de los ochentas eran 60 colonias y cuatro barrios, ahora son más de 700, señala un informe de la dirección de Barrios y Colonias del ayuntamiento municipal de Chilpancingo.

Para Capach, dijo Martínez Carranza, son dos los principales problemas que enfrentan como institución, lo que impide garantizar a la población el suministro de agua.

El primero es la poca captación de agua que se da en los sistemas, y el segundo es un déficit financiero, según ellos, generado por los usuarios morosos.

De las 42 mil tomas de los usuarios que tienen registradas, solo 12 mil tienen sus pagos al corriente.

Datos extraoficiales de Capach indican que este organismo paramunicipal enfrenta una deuda de 45 millones de pesos con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) por concepto de suministro de energía eléctrica en los bombeos que se realizan en los sistemas de Acahuizotla, y Mochitlán y otros cárcamos de captación de agua ubicados en diferentes puntos de Chilpancingo.

En las tres últimas administraciones municipales la CFE ha realizado cortes de luz debido a que las autoridades no pagan con puntualidad este servicio.

Aumentan protestas por abasto

Desde el inicio de este año, familias de colonias y barrios de Chilpancingo han salido a las calles en protesta por el desabasto de agua.

Han realizado bloqueos en las calles y protestas afuera de las oficinas de Capach.

Es precisamente en los cuatro primeros meses del año cuando se registran estas movilizaciones por ser la época de mayor estiaje.

La nueva administración municipal, dirigida por la morenista Norma Otilia Hernández Martínez, intentó tener una calendarización por día de las colonias que serían abastecidas de agua.
Como una medida de contención para los bloqueos y para informar a los colonos el día de abastecimiento, esa fue la decisión.

Dicha calendarización no funcionó y a los pocos meses dejaron de publicarlo en las redes sociales del ayuntamiento y de la Capach.

Arturo Martínez Carranza dijo que la Capach dejó de publicar esa calendarización porque es complicado cumplirlo, ya que la cantidad de agua que se capta en los tres principales sistemas varía todos los días.

No hay recursos para obras de captación de agua

En los últimos diez años se han presentado varios proyectos para realizar obras de captación en otros lugares pero para ello se requiere de miles de millones de pesos para realizar la obra. Las opciones para traer agua es de los ríos Papagayo o Mezcala.

Uno de los proyectos que en caso de que se lleve a cabo es el de Mezcala que tendría una inversión de tres mil millones de pesos y que solucionaría el abasto de agua a Chilpancingo en los próximos 40 años.

Para que se realice esta obra se necesitarían ocupar el presupuesto de los tres mil millones de pesos que ejercerá el ayuntamiento de Chilpancingo en los próximos tres años.

El 13 de abril del 2012, el entonces candidato del PRI a la presidencia, Enrique Peña Nieto, firmó un compromiso ante un notario público de realizar una obra para abastecer de agua a la ciudadanía de Chilpancingo.

La obra prometía remodelar y actualizar la red de tuberías, los tanques de abastecimiento y aumentar la captación de agua, de 230 litros a 500 y aunque Peña Nieto entregó la obra, estas nunca dieron resultado.

A 10 años de que se buscó una solución con apoyo del gobierno federal, el agua sigue siendo uno de los principales problemas que sufren día a día los habitantes de la capital.

 

Chilpancingo sin agua, con obra incumplida para su abastecimiento desde Peña Nieto

El 22 de mayo del 2017, cuatro años después de la firma del convenio de coordinación entre el gobierno federal y el estatal que tenía como objetivo cumplir con el compromiso de incrementar el abasto de agua potable y asegurar que la gente de esta capital tuviera agua suficiente para los próximos 15 años, pero no ha sido así


Texto: Jesús Guerrero

Fotografía: José Luis de la Cruz / Archivo

22 de febrero del 2022

Chilpancingo

 

Una obra de abasto de agua potable para Chilpancingo en la que oficialmente se invirtieron 489.5 millones de pesos y que fue puesta en marcha por ex presidente Enrique Peña Nieto y el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero, no ha funcionado.

Actualmente el desabasto de agua ha generado que desde hace tres meses mujeres y hombres que viven en distintas colonias de esta capital con cubeta en mano cierran calles para exigir el servicio.

El 13 de abril del 2012, el entonces candidato del PRI a la presidencia Enrique Peña Nieto firmó un compromiso ante un notario público de realizar una obra para abastecer de agua a la ciudadanía de Chilpancingo.

El 19 de abril del 2013, un año después de haber hecho ese compromiso público, el gobierno federal a través del director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) David Korenfeld, el ex gobernador Ángel Aguirre y el entonces alcalde de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos dan a conocer el inicio esta obra.

En dicho convenio se planteaba la realización de nuevas redes de tuberías de conducción, tanques de almacenamiento y rehabilitación de acueductos.

En uno de los puntos de dicho acuerdo se contempla la necesidad de construir una nueva fuente de abastecimiento y esta obra se realizará en cuanto se dispongan de los resultados de estudios y proyecto y en forma preliminar se propone estudiar los arroyos ubicados en las comunidades de La

Esperanza y Azinyahualco, del municipio de Chilpancingo.

Así como el acuífero de la localidad de Mochitlán, Río Azul, y el Río Mezcala, los dos últimos ubicados en los municipios de Quechultenango y Zumpango de Neri, respectivamente.

Sin embargo, dichos estudios para determinar una nueva fuente de abastecimiento nunca se realizaron.

El mismo proyecto firmado por Conagua, Ángel Aguirre y Mario Moreno, menciona varias pequeñas obras que se construyeron pero no operan como es la línea de interconexión Acahuizotla, planta de bombeo Las Torres-Tanque Texcalco en 8 pulgadas de diámetro con un cárcamo y subestación eléctrica.

También no funciona el tanque de almacenamiento del Tomatal-Colinas del Sur.

Son 14 acciones, entre obras y estudios, que este proyecto contempla en este convenio para la obra de abasto de agua para las familias de Chilpancingo que se realizaron pero que no han funcionado.

El 22 de mayo del 2017, cuatro años después de la firma del convenio de coordinación entre el gobierno federal y el estatal que tenía como objetivo cumplir con el compromiso de incrementar el abasto de agua potable para la ciudadanía de Chilpancingo, Peña Nieto, entrega la obra y asegura que la gente de esta capital tendrá agua suficiente para los próximos 15 años.

Según las autoridades federales y estatales, la obra contemplaba la oferta de 230 a 500 litros por segundo de agua.

Según trabajadores del organismo de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach) cuando el caudal en las fuentes de abastecimiento de Mochitlán, Omiltemi y Acahuizotla, es alto llega hasta los 325 litros por segundo de agua.

El secretario General de la Sección 15 del Sindicato Independiente de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach) Asunción Rodríguez Flores, pidió que la Secretaría de la

Función Pública (SFP) realice una auditoría a este organismo para que se sepa de los funcionarios responsables de su quiebra financiera.

Recordó que cuando el priísta, Mario Moreno Arcos (que busca la dirigencia estatal del PRI) era alcalde de Chilpancingo -en el período 2012-2015- fue cuando supuestamente se realizaron obras para que la gente tuviera suficiente de agua.

«La verdad no sabemos la cantidad de millones de pesos que se gastaron en esa obra pero que no ha funcionado y la prueba está de que la gente tiene varios meses protestando en las calles exigiendo el servicio», externó.

El dirigente sindical dijo que la quiebra financiera que enfrenta Capach también a ellos como trabajadores les ha pegado en sus salarios y prestaciones sociales.

Cuenta que a los 400 trabajadores les adeudan parte de su aguinaldo del 2020 además de que las quincenas se las pagan con retraso.

«Nos deben dos millones de pesos de adeudos por diversos beneficios sociales», aseveró.

Según Asunción Rodríguez, Capach, enfrenta un déficit de 85 millones de pesos por adeudos a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) a diversos proveedores y a los trabajadores.

Durante el 2013, autoridades y pobladores de la comunidad de Aziyahualco, rechazaron la propuesta que les planteó Moreno Arcos de que su río El Alquitrán abasteciera de agua a las familias de Chilpancingo.

«La ciudadanía y el comisario le dijeron a Mario Moreno que no iban a dar agua a Chilpancingo porque la que tienen la utilizan para sembrar sus tierras», contó un ciudadano de esa comunidad que pertenece al municipio de Chilpancingo.

El convenio que firmó con la Federación el propio Mario Moreno Arcos en el 2013 proponía que el río Alquitrán de la comunidad de Azinyahualco, fuera uno de los candidatos como una nueva fuente de abastecimiento de agua para la capital.

En las tres campañas políticas que ha realizado el priísta Mario Moreno (dos veces para alcalde y en el 2021 a gobernador de Guerrero) ha utilizado como bandera garantizar el abasto de agua a las familias de esta capital.

Ahora en este 2022 y como gobernadora Evelyn Salgado y alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández, ambas de Morena, no han planteado como resolver este problema del desabasto de agua.

Durante su campaña política, Norma Otilia, al igual que sus antecesores del PRI, tuvo como su principal bandera de campaña darle solución a este problema.

Pero hoy en día, y en plena temporada de estiaje, la gente se manifiesta en las calles para exigir aunque sea una sola cubeta de agua.

 

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