Regresan a San Jerónimo Palantla 140 desplazados tras los enfrentamientos de la pasada semana

El retorno se da luego de que la policía comunitaria de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias Pueblos Fundadores se retira de la comunidad


Texto: Jesús Guerrero

Foto: Interacción noticias 

Martes 28 de mayo de 2024

Chilpancingo

 

Unas 140 personas desplazadas por la violencia regresaron a San Jerónimo Palantla, municipio de Chilapa, luego de que la policía comunitaria de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias Pueblos Fundadores (CRAC-PF) se retiró de la población.

La Guardia Nacional, el Ejército Nacional y la Policía Estatal custodiaron el retorno de los desplazados.

El Consejo Indígena y Popular de Guerrero Emiliano Zapata (Cipoeg-EZ) informó este martes 28 que su policía comunitaria se retiraba de San Jerónimo Palantla para permitir que los gobiernos federal brinden seguridad en esta localidad.

El miércoles 22 y el jueves 23, la autodefensa de la CRAC-PF se enfrentó a balazos con pobladores de San Jerónimo Palantla, dejando un saldo de un muerto y un herido de bala, así como la comisaría, dos viviendas y tres camionetas incendiadas.

La tarde del jueves 23, cien pobladores de San Jerónimo Palantla custodiados por policías estatales se desplazaron a Chilapa, para refugiarse en la Casa del Campesino.

El subsecretario de Desarrollo Político y Social, de la Secretaría General de Gobierno, Francisco Rodríguez Cisneros dialogó, con los pobladores desplazados y este martes 28 se acordó su regreso.

Regresan los desplazados de San Jerónimo Palantla a su comunidad resguardados por la Secretaría de Seguridad Pública, la Guardia Nacional y la Sedena, este 28 de mayo. Foto: Interacción noticias

Clemencia Guevara Tejedor, dirigente del Comité de Defensa Popular (CDP) y asesora de los pobladores de San Jerónimo Palantla, confirmó que la gente aceptó regresar a su comunidad bajo el compromiso de que el gobierno va a garantizar su seguridad.

Acusó que lo ocurrido la semana pasada en San Jerónimo Palantla no fue un enfrentamiento, sino una agresión de la policía comunitaria de la CRAC-PF que dirige Jesús Plácido.

A partir de este martes 28, las fuerzas federales y estatales estarán en forma permanente en San Jerónimo Palantla para evitar nuevos enfrentamientos.

En un comunicado, el Cipoeg-EZ establece que en los hechos del miércoles 22 y jueves 23 de mayo, acudió en apoyo a los habitantes de la comunidad de Nuevo Amanecer que eran atacados a balazos por pobladores de San Jerónimo Palantla.

Asegura que en el enfrentamiento a balazos fue asesinado el campesino de Nuevo Amanecer Pedro Vázquez Matías.

Después de mantener seis días sitiado San Jerónimo Palantla, las autodefensas de la CRAC se retiraron de esta comunidad alrededor de las 12 del día de este martes 28.

En el comunicado, el Cipoeg-EZ asegura que los líderes del CDP, Clementina Guevara, Efraín Torres y Rodolfo Colorado, así como el excomisario de San Jerónimo Palantla Constantino Calvario, tienen nexos con el grupo criminal Los Ardillos.

«Vamos a dejar en manos de la gobernadora Evelyn Salgado y el gobierno federal la seguridad en la zona y esperamos que nos hagan justicia para esclarecer los asesinatos y desapariciones de nuestros compañeros», advierte el comunicado.

Un muerto, saldo de enfrentamiento a balazos entre dos comunidades indígenas de Chilapa

En San Jerónimo Palantla fueron incendiados la comisaría, tres casas y tres vehículos


Texto: Amapola Periodismo 

Foto: Cortesía del Consejo Indígena y Popular Emiliano Zapata

Jueves 23 de mayo de 2024

Chilpancingo 

 

Un muerto, además de tres casas, una comisaría y tres autos incendiados dejó el enfrentamiento a balazos de grupos armados de San Jerónimo Palantla y Nuevo Amanecer, ambas comunidades del municipio de Chilapa.

De acuerdo con la versión del líder del Consejo Indígena y Popular Emiliano Zapata (Cipog-EZ), Jesús Plácido Valerio, la confrontación armada de policías comunitarios de su organización contra 50 hombres armados de la comunidad de San Jerónimo Palantla, empezó este miércoles 22 a las 10 de la noche y terminó este jueves 23 de mayo alrededor de las dos de la tarde.

En entrevista telefónica, el dirigente informó que durante el enfrentamiento murió Pedro Vázquez Matías, habitante de Nuevo Amanecer.

«La agresión armada por parte de un grupo de pobladores de San Jerónimo Palantla, que tienen vínculos con el grupo criminal de Los Ardillos, empezó este miércoles contra los habitantes de Nuevo Amanecer, y nuestra policía comunitaria tuvo que ir en el auxilio de los compañeros de Nuevo Amanecer», comentó Jesús Plácido.

«De nuestro lado, participaron 300 policías comunitarios y de parte de ellos 50, pero que estaban armados con armas de grueso calibre», aseguró.

La Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero informó que personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Guardia Nacional llegó a la localidad de San Jerónimo Palantla, para atender la situación.

«Los elementos de seguridad localizaron en el lugar, tres vehículos, tres viviendas y una comisaría incendiada. En estos hechos no hay personas lesionadas ni fallecidas», establece el comunicado de la SSP.

Asegura que las autoridades de seguridad permanecen en el lugar y realizan recorridos en las colindancias del área en conflicto para evitar que se genere una nueva agresión.

Jesús Plácido Valerio dijo que tras una serie de confrontaciones armadas que se han dado entre pobladores de San Jerónimo Palantla y Nuevo Amanecer, el 30 de abril de este año, se firmó una minuta de acuerdos con las autoridades estatales para evitar que escale más el conflicto.

Uno de los puntos que se acordó es que habría presencia permanente de una Base de Operaciones Mixtas (BOM) en la zona, pero no se cumplió.

Según Jesús Plácido, en la zona donde tiene su base la Cipog-EZ, que abarca 60 comunidades de los municipios de Chilapa y José Joaquín Herrera, han sido asesinados 60 y hay 20 desaparecidos.

Jesús Plácido acusó a los líderes del Frente de Defensa Popular (FDP) y asesores de los habitantes de San Jerónimo Palantla, Juan Colorado, Clementina Guevara y Efraín Torres Fierro, de ser los promotores de la violencia en esa zona, porque, según él, tienen nexos con Los Ardillos.

Refirió que las familias de Nuevo Amanecer fundaron esta comunidad luego de que fueron expulsados con violencia por autoridades y habitantes de San Jerónimo Palantla.

A su vez, Juan Colorado, Clementina Guevara y Efraín Torres señalan a los líderes del Cipog-EZ, de tener nexos con un grupo criminal y de ser los generadores de la violencia contra los habitantes de San Jerónimo Palantla.

Después del enfrentamiento entre los dos grupos armados, hay un clima de tensión en esta zona indígena, pese a la presencia de la Guardia Nacional y la policía estatal.

El diputado Bernardo Ortega, quien tiene el control político en Montaña baja y sus hermanos, el terror, se deslinda de ellos

Texto: Amapola Periodismo 

Fotografía: Oscar Guerrero 

23 de octubre del 2022

Chilpancingo 

 

Después de que integrantes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Pueblos Fundadores (CRAC-PF) denunciaron al diputado local Bernardo Ortega Jiménez y al grupo criminal de Los Ardillos como responsables de la violencia en la zona denominada Montaña Baja, el legislador salió a deslindarse de esas acusaciones y de sus hermanos, quienes, según datos oficiales, lideran al grupo criminal.

Esto porque el pasado viernes, durante la gira del presidente Andrés Manuel López Obrador en la región Montaña, los dirigentes de la CRAC-PF, que pertenecen al Consejo Indígena Popular de Guerrero-Emiliano Zapata (CIPOG-EZ), interceptaron la caravana en la que viajaba el mandatario y denunciaron que los líderes del grupo criminal Los Ardillos son Celso Ortega Jiménez y el diputado local Bernardo Ortega Jiménez.

“Muchos de nuestros compañeros bajan a Chilapa a vender sus productos y ya no vuelven y siguen desapareciendo, y nosotros hacemos responsables a Los Ardillos, a Celso Ortega y al diputado Bernardo Ortega”, le dijo uno de los líderes de la CRAC-PF a López Obrador.

De acuerdo con la demanda de la CRAC, Los Ardillos asesinaron en los últimos meses a 40 personas en la zona, por lo que pidieron la intervención del presidente para detenerlos, incluido a sus líderes.

La denuncia contra el diputado perredista Bernardo Ortega Jiménez, quien no es la primera vez que tiene este cargo –es la cuarta ocasión– y otros, como el de presidente municipal de Quechultenago, sede del grupo criminal, de acuerdo con los reportes oficiales, es reiterada, sobre todo porque esa relación le ha permitido tener su poder político en la zona.

El distrito del que es diputado, el 24, comprende los municipios de Mártir de Cuilapan, Quechultenango, Mochitlán y Tixtla, los cuales tienen conexión con la Montaña baja, y lo vuelven en solo un corredor, en el cual tiene presencia el grupo criminal.

El diputado, como lo ha hecho antes, otra vez se deslindó de la relación o vinculación que hacen los integrantes de la CRAC-PF. Lo hizo a través de un comunicado publicado en las redes sociales, en el que escribió que no responde por terceras personas y que “no es delito compartir apellido”.

“Jamás seré responsable de lo que hagan con su vida terceras personas, así sean familiares o amigos. Lamento que por falta de información o por la razón que sea, se use mi nombre en acusaciones sin sustento”.

En la imagen, el diputado local perredista Bernardo Ortega Jiménez junto a la gobenadora Evelyn Salgado Pineda. Foto: Redes

“Como decía yo soy responsable de mis actos y decisiones, no de las otras personas. Y a las pruebas me remito. En México, no es delito compartir un apellido. Cada quien construye el camino de su vida y la mía está dedicada a mi familia, a representar a la gente que más necesita, así ha sido y así seguirá”, son párrafos de su comunicado.

El diputado mencionó que tiene una carrera política de 26 años.

De acuerdo con datos de la Fiscalía General de la República (FGR), Los Ardillos son un grupo derivado de los Beltrán Leyva, el cual se fracturó con la caída de los hermanos, y generó el surgimiento grupos en regiones.

Los Ardillos, según esta información oficial, tiene presencia en la zona Centro y Montaña de Guerrero, en municipios como Chilapa, Mártir de Cuilapan, Zitlala, Tixtla, Quechultenango, Mochitlán y José Joaquín de Herrera.

La mayoría de estos municipios conforman lo que se conoce como Montaña baja, donde varios sectores sociales han denunciado a Los Ardillos como responsables de la violencia en este lugar que, a la vez, determina la situación política y económica.

El coordinador del Colectivo Siempre Vivos, José Díaz Navarro, señala de manera directa a los hermanos Ortega Jiménez de la desaparición de sus hermanos. Este colectivo está integrado por familiares de desaparecidos, creado justo después de la irrupción armada a la cabecera municipal de Chilapa de personas asociadas a Los Ardillos en mayo de 2015.

La información oficial establece que el fundador de este grupo criminal es Celso Ortega Rosas, a quien le apodaban El Ardilla, de ahí el origen del nombre. Él es el padre de Celso e Iván Ortega Jimenez, los líderes actuales del grupo, quienes tienen órdenes de aprehensión.

Celso, Iván y Bernardo Ortega Jiménez son hermanos, pero este último niega vínculos con sus hermanos. En distintas entrevista ha dicho que él no tiene nada que ver con las actividades laborales y delictivas de sus hermanos.

Los Ardillos tienen un historial de acusaciones de asesinatos y delitos, pero las autoridades nunca han actuado contra ellos. Nunca han anunciado alguna operación policiaca especial para capturarlos, como lo han hecho antes con otros grupos. El ex fiscal de Guerrero, Xavier Olea Peláez, anunció en radio a nivel nacional que tenían acorralado al líder Los Rojos en Chilapa, pero nunca ocurrió, porque escapó.

Como parte del contexto de lo que ha ocurrido en Montaña baja, en enero del 2020, un grupo de 20 trabajadores de un grupo musical que se trasladaba a Alcozacán, fueron interceptados e incinerados, de acuerdo con la Fiscalía General del Estado (FGE), por Los Ardillos.

En hechos más recientes, a este grupo criminal les fueron decomisados dos tigres de bengala en el municipio de Quechultenango, pero después del decomiso las fuerzas de seguridad fueron sacadas por la población y no se supo más de los decomisos.

Por su parte, el diputado Ortega Jiménez en tribuna se burla de los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa y de muchos discursos de los diputados morenistas.

En la imagen, líderes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Pueblos Fundadores (CRAC-PF) dialogan con el presidente Andrés Manuel López Obrador para exigir que detenga a al grupo criminal Los Ardillos, que lideran los hermanos Ortega Jiménez. Foto: Oscar Guerrero

 

 

Salir de la versión móvil