Texto: Itzel Urieta
Fotografía: José Luis de la Cruz (Archivo)
8 de julio del 2023
Chilpancingo
A seis meses de que se dieran a conocer diversas irregularidades en la administración del Zoológico Zoochilpan, que van desde no comprobar ingresos, desconocer el destino final de varios animales y cocinarlos para la cena de navidad, las autoridades aún no terminan las investigaciones, ni han fincado responsabilidades.
A inicios de enero, la muerte de un venado, que fue rescatado luego de ser atacado por una jauría de perros ferales y trasladado al Zoochilpan para su atención médica, inició una investigación que derivaron en el cese de su entonces director, José Rubén Nava Noriega.
A Nava Noriega lo señalaron de negligencia médica y de tráfico ilegal de especies por intercambiar una cebra y cuatro watusis; aún su paradero es desconocido.
Además de ordenar cocinar cuatro cabras pigmeas para la cena de navidad.
Por los hecho, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Guerrero (Semaren) inició una investigación que después fue turnada a la Secretaría de Contraloría Interna y Transparencia gubernamental por un tema de desvío de recursos.
Entrevistada sobre el avance de las investigaciones, la jefa de área de Bienestar Animal de la Semaren, Greta Fuentes de María, mencionó que ya hay avances.
«Sólo nos dijeron que ya estaban las resoluciones de Contraloría y que estaban dándole seguimiento», dijo Fuentes de María.
Contraloría está en el proceso de notificarle al responsable del Zoochilpan toda la información. Depende de los resultados, deslindarán o fincarán sanciones para Nava Noriega.
El entonces secretario de Contraloría, Eduardo Loría Casanova, informó al inicio de las investigaciones que debían fincar responsabilidades en el caso del desvío de recursos por la compra de unas pacas de avena que no llegaron al zoológico.
Además de algunas facturas y supuesto material que Nava Noriega intercambió.
Asociaciones protectoras de animales informaron que continúan con «la presión» para que den a conocer los resultados de la investigación.
«Se presentó un informe y dijeron que efectivamente hay animales que faltaron, hay animales con los que todavía no dan, sobretodo con los reptiles. En 45 días nos quedaron de informar el resultado del dictamen», dijo Ángeles López Sotelo, presidenta de la Fundación de Apoyo a Comunidades Vulnerables y sin Voz (Fundacom).
De acuerdo con los protocolos de una auditoría, una vez concluida la investigación, tienen que dar parte a la dependencia auditada para que corrobore los resultados y confirme las faltas, en este caso de animales y recurso económico.
Después el o los funcionario que cometieron las irregularidades tendrán 45 días para defenderse, de acuerdo con lo establecido por el Reglamento de Contraloría del gobierno del estado.
Concluido este proceso, el caso se turnara al Tribunal de Justicia Administrativa, instancia que determinará las sanciones para los infractores.
Por cocinar a las cuatro cabras, el caso trascendió a nivel nacional y fue que las autoridades decidieron comenzar las investigaciones, aun cuando catalogaron el caso como urgente, a seis meses aún no hay resultados.
El secretario de Contraloría que comenzó la investigación, Eduardo Loría Casanova, renunció al cargo un mes después de iniciar la auditoría al zoológico y en su lugar quedó Víctor Édgar Arenas, quien en varias entrevistas mencionó que recién llegaba al cargo y desconocía del caso Zoochilpan, pero que pronto habría resultados.
Seis meses después aún no hay resultados y las autoridades como Semaren y Contraloría se niegan a informar de algún avance.
