Cómo parte de la Jornada Nacional de Oración el obispo González Hernández ofició una misa en el la Plaza Cívica Primer Congreso de Anáhuac para pedir paz en Guerrero y México.
Texto: José Miguel Sánchez
Fotografía: Óscar Guerrero
Chilpancingo
Después del ataque a balazos que sufrió el sacerdote Felipe Vélez Jiménez en Chilapa, y de las amenazas contra el director y sacerdote del Centro de las Víctimas Minerva Bello, Filiberto Velázquez Florencio, el obispo de la Diócesis Chilpancingo – Chilapa, José de Jesús González Hernández, recomendó a los sacerdotes de la diócesis a tomar medidas de seguridad y cuando viajen en carretera siempre porten con ellos una identificación.
«Siempre es mejor prevenir, yo recomendaré que siempre que salgan (los sacerdotes) usen los levanta cuellos, la cruz en el pecho o algún elemento religioso, incluso un auto rotulado», comentó González Hernández.
Esta recomendación que dio este sábado en la tarde el prelado es después de que el pasado jueves Vélez Jiménez, sacerdote de Iguala, fue atacado a balazos cuando circulaba en su automóvil por las calles de Chilapa.
“Si nos confunden que nos confundan, porque ya la traen pero que no nos vayan a confundir por equivocación”.
De acuerdo con González Hernández el estado de salud de Vélez Jiménez es estable, pero tuvo que ser trasladado al estado de Morelos.
Al ser cuestionado sobre los avances de la Fiscalía General del Estado (FGE) en el caso, González Hernández dijo que no les han informado algún avance y que desconocen el motivo del ataque a Vélez Jiménez.
Sobre el tema de la violencia comentó que en todo México es difícil la situación, pero como iglesia católica trabajan siempre a favor de la paz, por lo que hizo un llamado al diálogo y aseguró que para resolver el tema de necesita de todos los actores sociales.
«Si el gobierno quiere resolver todo solo es complicado, la iglesia tampoco puede sola y mucho menos la sociedad, por eso tenemos que trabajar en equipo», comentó.
Sobre el tema de dialogar con los grupos del crimen organizado, dijo que el acercamiento y el diálogo es una posibilidad para lograr la pacificación del estado.
Cómo parte de la Jornada Nacional de Oración González Hernández ofició una misa en el la Plaza Cívica Primer Congreso de Anáhuac, en medio de la votación de consejeros de Morena, para pedir paz en Guerrero y México.
Minutos antes un aproximado de 100 feligreses católicos marcharon de la Alameda Granados Maldonado a la Plaza Cívica, durante su recorrido los manifestantes iban rezando, vestidos de blanco y con carteles donde pedían paz y un alto a la violencia.
Durante la marcha se vio a personas que portaban gallardetes en la que iba la imagen de un familiar desaparecido o asesinado en Guerrero.
Este domingo en Acapulco, el sacerdote Salvador Cisneros dijo que las autoridades que no tienen empatía con los familiares de los asesinados y desaparecidos no deben ser servidores públicos.
Cisneros ofició una misa en Acapulco por el cierre de la Jornada Nacional por la Paz que convocaron las autoridades eclesiásticas hace una semana.
En la homilía que se realizó en la iglesia Cristo Rey, ubicada en la avenida Universidad en Acapulco, estuvieron integrantes del Colectivo en Busca de sus Desaparecidos.