Texto: Itzel Urieta
Fotografía: Cortesía
Chilpancingo
Integrantes de la Banda de Música del gobierno del estado iniciaron ayer una protesta ante la falta de apoyo gubernamental para tener nuevos instrumentos musicales, mobiliario y equipo de audio.
La banda que se presenta los martes, jueves y domingos en el quiosco de Chilpancingo anunciaron el inicio de su protesta para exigir instrumentos en buen estado.
La tarde de ayer, los músicos llegaron como de costumbre al quiosco, pero esta vez no tocaron ninguna canción; en su lugar colocaron dos lonas para informar a la ciudadanía de su protesta.
«Sra. Gobernadora Evelyn Cecia Salgado Pineda no nos olvide, somos la Banda de Música con más de 100 años de tradición y cultura en la capital», se lee en una de las lonas.
De acuerdo con los músicos, los instrumentos que tienen son desde hace 10 años y están en malas condiciones por su constante uso.
«Los integrantes de la Banda de Música de la Secretaría de Cultura del Gobierno del Estado de Guerrero hacemos de su conocimiento el abandono total en que nos mantienen nuestras autoridades, ante una gran indiferencia hacia nuestras necesidades como son instrumentos nuevos, ya que con los que contamos, adquiridos hace más de 10 años, están en malas condiciones; accesorios que son indispensables para el buen desempeño musical, mobiliario, equipo de audio, entre otros, para poder ofrecer al pueblo de Guerrero audiciones de mayor calidad música», se lee en la lona principal que colocaron los músicos en el quiosco.
«¡Guardaremos silencio para ser escuchados!», escribieron en la lona sobre su protesta.
En lugar de tocar canciones, los integrantes de la banda de música sólo se sentaron en sus sillas y permanecieron ahí durante las dos horas en las que normalmente tocarían.
Desde marzo pasado, los músicos denunciaron la falta de atención de las autoridades hacía ellos.
Aquella ocasión, los músicos denunciaron que el gobierno estatal no les entregaba sus uniformes, que consta de una guayabera blanca, pantalón y zapatos negros; además de un uniforme de gala: traje negro, camisa blanca y corbata.
Durante dos meses, los 29 integrantes de la banda acudieron a tocar al zócalo sin uniforme, hasta que a inicios de abril se los otorgaron.
Esta vez la protesta es para los instrumentos y hasta el momento no han tenido acercamiento con autoridades estatales.