La invasión humana a su hábitat es otro de los grandes problemas
Texto: Beatriz García
Fotografías tomadas de las redes sociales.
24 de febrero del 2021
Chilpancingo
La caza de felinos en Guerrero es por falta de cultura sobre su comportamiento, por la invasión del humano en sus áreas naturales y por el poco interés de las autoridades en el tema, evaluó el representante del Proyecto Guerrero Jaguar, Fernando Ruiz Gutiérrez.
Una publicación de la Revista Mexicana de la Biodiversidad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) da cuenta que en Guerrero hay seis especies de felinos de las existentes en México, de los cuales se tienen muy pocos registros en la literatura como representación de la entidad. Se trata del jaguar, jaguarundi, tigrillo, ocelote, lince y puma.
Durante febrero circularon tres eventos de depredación y matanza de felinos. Sobrevivió uno y está en resguardo en el zoológico Zoochilpan de Chilpancingo con apoyo del Proyecto Guerrero Jaguar, encargado de la investigación y preservación de la flora y la fauna. Es una cachorra tigrilla rescatada en Río Santiago, Atoyac.
El segundo hallazgo circuló el 16 de febrero, se trataba de un chachorro jaguarundi en cautiverio en Atoyac, pero se supo que murió. El 21 de febrero circuló la denuncia de la matanza de un puma; en las redes sociales circuló una foto del cadáver del ejemplar encima de un burro.
Sobre estos hechos constantes de depredación de felinos Amapola. Periodismo transgresor habló con el biólogo representante de Guerrero Jaguar. “Hay muchos eventos de animales cazados, sacrificados porque creen que son peligrosos para el ganado, para los animales domésticos. En algunas ocasiones, porque se los encuentran en el campo y (piensan que) van agredir a las personas, lo que hacen es disparar; es un problema cultural muy serio”, explicó Ruiz Gutiérrez.
Se suma el hecho que los felinos llegan a los campos de cultivo donde está el ganado y hay eventos de depredación. Los dueños proceden a cazar a los felinos para resolver lo que para ellos es un problema. El biólogo explicó que en el país no hay un instrumento de protección de éstas y otras especies de fauna silvestre.
–¿Este fenómeno tienen también que ver la invasión de tierras por parte del humano donde es zona de estos animales?, –se le preguntó.
–Definitivamente. Uno de los problemas más graves para la conservación de los felinos y otras especies es que están perdiendo el hábitat, está siendo transformado para zonas sobre todo pecuarias, agropecuarias, pero sobre todo por el crecimiento desmedido, desorganizado, sin tecnificación del ganado vacuno, caprino en algunos casos, que eleva esta problemática.
En Guerrero no son los únicos ejemplares sacrificados. En años anteriores se supo de jaguares.
Para hacer una denuncia pública sobre la caza y matanza de un felino también es complicado. Ruiz Gutiérrez dijo que hay un problema nacional porque los ministerios públicos no saben qué hacer ante este tipo de eventos, no están preparados para actuar ante una denuncia relacionada con la vida silvestre.
En las leyes de protección ambiental no se contempla al puma en peligro de extinción, por ejemplo.
El jaguar, jaguarudi, tigrillo, ocelote y lince son los únicos que están en la norma 059 de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que tiene por objeto identificar las especies o poblaciones de flora y fauna silvestres en riesgo, de acuerdo con lo publicado en la página oficial de la dependencia.
Podría juzgarse, dijo el biólogo, que por sacrificar fauna silvestre no habrá una sanción más allá de una amonestación.
Fernando Ruiz expresó que ni a los diputados les interesa este problema.
El año pasado, Amapola. Periodismo transgresor verificó que en Guerrero, del presupuesto que se designa cada año, se eliminó el de biodiversidad.
“Va a salir Astudillo de la gubernatura y no va a poner ni un solo peso, ha sido la constante, ha prometido, ha dicho y no ha cumplido nada en tema de medio ambiente”, denunció Ruiz Gutiérrez.
–¿Cuál es el compromiso que tiene Guerrero Jaguar ante este panorama?
–Estamos muy limitados como para hacernos cargo de la problemática, somos una asociación civil relativamente nueva, pero nosotros igual ya tenemos muchos años trabajando (pero) no contamos con una infraestructura necesaria y recursos, si tuviéramos los recursos, los espacios, los materiales sólo les avisaríamos a las dependencias para que coadyuvaran.
