Consumir local para disminuir el impacto ambiental, recomienda especialista

Texto: Marlén Castro

Fotografía: Angie García y José Luis de la Cruz

23 de marzo 2021

Chilpancingo 

Héctor Segura Pacheco, doctor en ecología y desarrollo sustentable, advierte que el transporte de mercancías para satisfacer la demanda de la población causa un daño ambiental enorme, el cual puede disminuir con el consumo de lo que se produce en la localidad.

Las tiendas de autoservicio venden piñas que llegaron de Brasil, por ejemplo, o de Hawái, traídas en barco o en avión. El traslado de estas mercancías por aire, barco o vía terrestre es la principal causa de la emisión de gases de efecto invernadero, los que producen una capa en la atmosfera que impiden la salida del calor y causan que la superficie de la tierra se caliente.

El inicio del 2021, los habitantes se mostraron felices de ver en las costas lobos marinos y ballenas nadando en aguas poco profundas. En las costas de Guerrero también ocurrió, se reportaron avistamientos en Acapulco y en Zihuatanejo, municipio de la Costa Grande, y en Marquelia, perteneciente a la Costa Chica.

Ricardo Pérez Carmona, presidente del Colegio de Biólogos de Guerrero, contó a la reportera Beatriz García de Amapola. Periodismo transgresor que tales avistamientos no debían ser motivo de felicidad ya que obedece a la modificación de las corrientes marinas por el cambio de temperatura en los océanos a consecuencia del calentamiento global.

El avistamiento del lobo marino en Las Peñitas, una playa de Marquelia, cuando debería andar en una playa al norte, está relacionado con los hábitos de consumo.

Segura Pacheco, el catedrático de la Universidad Autónoma de Guerrero que imparte clases en dos maestrías adscritas al padrón de excelencia académica del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), indica que además de reducir el impacto ambiental consumir local fortalece la soberanía alimentaria y la economía.

A 20 minutos de la capital guerrerense, los productores de Tixtla continúan produciendo hortalizas para el mercado local.

Un buen gobierno debería ver cuáles son los productos de consumo generalizado y fomentar su producción, es el consejo que lanza en estos momentos de campañas políticas para ganar el gobierno de Guerrero.

“Es una utopía pensar que se puede producir todo lo que se consume pero se puede ir reduciendo esa dependencia”, dice Segura Pacheco.

El primer paso es fomentar la producción de los productos básicos, como el maíz, frijol y arroz de forma agroecológica, y la producción de cárnicos, como el pollo y el cerdo.

Se debería impulsar, de acuerdo con su recomendación, las granjas de aves que produzcan la carne de pollo y grajas acuícolas para producir especies como camarón y Tilapia.

Las granjas avícolas y acuícolas deberían impulsarse en municipios de la Montaña y Costa Chica para disminuir los altos índices de marginación y pobreza.

“Hay que luchar por reducir la dependencia alimentaria sino damos el primer paso no vamos a poder dar el segundo”.

Segura Pacheco visitó Atoyac, región de la Costa Grande, y se sorprendió de forma negativa porque en los restaurantes sólo ofrecían un café industrializado de capital suizo.

Atoyac es el principal productor de café de la región de la Costa Grande y su producto tiene fama nacional.

Aunque Segura Pacheco conoce porque los negocios locales no ofrecen productos locales el hecho significó una contrariedad notable.

Como especialista, lo ocurrido en Atoyac lo tiene en la perspectiva pero no dejó de sorprenderlo.

Sabe que los productores locales cuentan con apoyos disminuidos para comercializar sus productos, que un negocio como un restaurante va por una ganancia mayor para subsistir y por eso ofrece el café industrializado en lugar del producto local.

Para romper estas inercias y ayudar a los productores locales y nuestro propio bienestar, Segura Pacheco recomienda a las familias hacer una lista de lo que se produce en la región, adquirirlos y consumirlos.

Disminuir el consumo en las tiendas departamentales a las que se va por comodidad, aunque los productos sean más caros, además de provenir de lugares lejanos.

Comenzar a cultivar algunos de los productos que consumimos y que son fáciles, como chile, jitomate y lechugas, lo que abona a la salud de los integrantes de la familia.