Equinox Gold, la empresa que extrae oro desde el 2019 anunció que cierra este 31 de marzo por los altos costos de producción y de la renta de tierras
Texto: Marlén Castro
Foto: Margena de la O
Carrizalillo / Municipio de Eduardo Neri
Martes 11 de marzo del 2025
No fueron necesarios 50 años para que la peor pesadilla de un pueblo minero salte a la vista en Carrizalillo, una comunidad de la región Centro de Guerrero.
El ejido podría ser en los siguientes años un pueblo fantasma y los habitantes iniciar un proceso de desplazamiento forzado, sin dinero, sin tierras y enfermos.
Equinox Gold, la tercera trasnacional en extraer oro en los 20 años de minería en Carrizalillo, anunció el cierre de su operación y ya dio los primeros pasos para concretarlo.
Notificó de forma individual a los habitantes que ya no ocupará más sus parcelas individuales ni tampoco las de uso común.
La medida es una forma de presión, a decir de la mesa ejidal de Carrizalillo, para que le firmen un nuevo convenio de ocupación que representa 65 por ciento menos en renta y la anulación de beneficios sociales, entre ellos, la cantidad que aporta para los medicamentos de la población enferma.
Sí Carrizalillo acepta, la mina se queda. Sino el cierre será un hecho.
Enfermedades, la consecuencia minera en el cuerpo
Mutaciones genéticas, cáncer, abortos espontáneos, embarazos pretérmino, hernias discales, tos crónica, dermatitis y conjuntivitis, entre muchas otras enfermedades padece la gente en Carrizalillo.
Cada habitante tiene alguno de estos males, por los que cada mes gasta en medicamentos costosos que deberá usar de por vida.
Un porcentaje importante de lo que reciben por la renta de sus parcelas individuales y las de uso común lo invierten en sus tratamientos, explicaron en la casa de salud comunitaria, que abrieron las propias empresas mineras.
Este mes de febrero se registraron dos decesos por cáncer, uno de útero y otro de pulmón.
El personal médico estableció que ambos casos de cáncer tienen relación con la contaminación del aire y otros factores vinculados a la minería.
Entre la población hay varios hombres operadores de maquinaria pesada con hernias discales.
«Lo que hace la mina es despedirlos, en lugar de reubicarlos», explicaron en la casa de salud.
Las niñas, niños y adolescentes padecen de dermatitis atópica, quienes necesitan hidratación cada dos horas con cremas especiales.
«De cada 20 pacientes, 15 son por enfermedades respiratorias y los cinco por enfermedades de los ojos», dijeron.
Así como con la piel, las personas enfermas de los ojos deben usar de por vida ungüentos oftálmicos para lubricarse porque los polvos causan resequedad.
La gente tiene tos crónica.
Lo más grave son las enfermedades por mutaciones genéticas, como niñas y niños con microtia, nacen sin una parte de la oreja y el oído interno no les funciona.
La Equinox Gold quiere que desaparezcan del convenio de ocupación, las cláusulas de los beneficios sociales, entre ellos, su aportación para la compra de medicinas.
“Actualmente, el ejido absorbe el 70 por ciento del medicamento que se compra y la empresa solo el 30, la persona enferma no recibe sin costo ese medicamento, lo adquiere a la mitad; porque son muy caros y no podrían pagarlos”, explicaron en la casa de salud.
Devastación, la consecuencia de la explotación en el entorno
En el pueblo se nota la ausencia de agua. Antes de 2005 tenían varios manantiales, ahora de las tuberías solo sale aire, mientras la mina riega permanentemente su patio de lixiviados con una solución cianurada que requiere millones de litros de agua. Desde el centro del pueblo se ven las capas húmedas de tierra del patio de lixiviados, las que se riegan las 24 horas. En Carrizalillo hay un polvo suelto, reseco.
Los Filos-El Bermejal es un proyecto minero compuesto por cinco minas, tres a cielo abierto y dos subterráneas: El Bermejal, Guadalupe, El Bermejal subterráneo, Los Filos y Los Filos Subterráneo.
De acuerdo con Geogle Earth, 84 por ciento del complejo minero está dentro del ejido de Carrizalillo y 16 por ciento en los bienes comunales de Mezcala y Xochipala, otras dos comunidades del municipio de Eduardo Neri.
El ejido de Carrizalillo, que pertenece de manera particular al municipio de Eduardo Neri, renta a Equinox Gold 1,400 hectáreas, Mezcala 1,300, aunque la minera solo utiliza unas 700 y Xochipala 50 hectáreas.
Los Filos-El Bermejal eran los cerros más altos de Carrizalillo, de donde han salido las barras de oro.
Los cerros cambiaron de lugar y ya no son cerros, ahora esa tierra y rocas están almacenados en el patio de lixiviados.
Los Filos pasaron de ser cerros de más de mil metros de altura a hoyos de entre 200 y 300 metros de profundidad.
Carrizalillo dejó de tener manantiales. El más importante, conocido como El Triángulo, del que se surtía 80 por ciento de la población, quedó en medio de los lixiviados.
Tienen llaves de agua en sus casas, porque la empresa les ofreció un sistema de agua entubada a cambio de El Triángulo, pero nunca ha salido una gota, limpia o sucia, contaminada o apta para el consumo.
Gastan una gran cantidad del pago de la renta de sus tierras en garrafones de agua.
Para separar el oro de la tierra y la roca, la empresa usa cianuro en el patio de lixiviados, en el que las 24 horas, los siete días de la semana se arroja una solución cianurada, para lo que se usan millones de litros de agua por segundo.
En 2010, de acuerdo con la mesa ejidal, hubo un derrame de solución cianurada al subsuelo. Esa falla, la empresa hasta la fecha la controla, pero es la causa de que el ganado que tienen los ejidatarios se muera. Se les mueren, al menos, unos 30 animales al año, entre vacas, toros, chivos y burros.
En las 1,300 hectáreas rentadas para la minería, si es que la empresa se fuera, los ejidatarios no pueden dedicarse a la ganadería, no habría pastizales aptos para el consumo, ni siquiera saben si crecerían.
De acuerdo con el proyecto de impacto ambiental, el cierre de operaciones debería llevarse seis años, pero la empresa ya da por terminado los convenios de ocupación.
En Carrizalillo por la contaminación ya no llegan aves migratorias, las que antes de la minería les servían para completar sus alimentos.
Las parcelas porque fueron removidas serán inestables para la siembra y tampoco saben si algo se dará.
Proceso de recuperación del oro y costos de acarreo por maquinaría vieja, el problema: ejidatarios
Equinox Gold dice que se va porque Los Filos-El Bermejal ya no es negocio.
La mesa ejidal explicó que el problema en la recuperación es el tipo de procedimiento que usan para la separación de los minerales.
De acuerdo con sus propios datos, Equinox Gold solo recupera 30 por ciento del oro depositado en el patio de lixiviados.
Eso se debe a que un 40 por ciento del mineral contiene cobre y el cianuro atrapa primero el cobre y en segundo lugar el oro.
Explicaron que estos cuerpos de sulfuro de cobre comenzaron a salir en 2013.
Por la alta concentración de cobre el proceso de beneficio es más lento y requiere más cianuro y más agua, lo que eleva los costos.
A este problema, se suma el de la maquinaría vieja, que eleva los costos de extracción y acarreo.
Aún así, el ejido estima que el costo de producción de la onza de oro es de 2,150 dólares y la rentabilidad es de 2,600, eso quiere decir que obtienen 450 dólares de ganancia libres.
Durante 2024, de acuerdo con el reporte de la misma empresa, Equinox extrajo 170,000 onzas, de oro, eso quiere decir que obtuvieron 76 millones de dólares.
“No es una pérdida, es rentable para la empresa”.
Equinox planteó a los ejidatarios que tiene que hacer una inversión millonaria para cambiar a una planta CIL (Carbón in Leach) un procedimiento de recuperación diferente al que utilizan ahora llamado planta de lixiviados.
“Nos ha hablado de muchas cantidades, primero de 300, después 500, lo más reciente nos dijo que invertiría 800 millones de dólares”.
El ejido se basa en un informe de la empresa a sus socios, en donde planteó una inversión de 500 millones de dólares.
Con sus estimaciones, considera, que cambiando el proceso podrían recuperar 80 por ciento de 400 mil onzas depositadas en el patio de lixiviados, lo que da para 15 años más de producción y obtener 500 millones de dólares anuales por una producción de 320,000 onzas en el mismo tiempo.
“O sea, negocio sí hay”.
Para hacer eso posible, dijeron, que el ejido propuso bajar la renta anual de 6.9 onzas a 4.0 onzas por hectárea e ir incrementando gradualmente hasta 2040, pero la empresa propone 2.5 onzas y sin incrementos y además pagar la renta mes con mes.
“Sí así se queda a mí me pagarían unos 60,000 pesos anuales por hectárea y nadie vive con esa cantidad”, refirió un ejidatario.
Por la propuesta, un ejidatario con una hectárea rentada recibiría 5,000 pesos mensuales.
Sin trato preferente, solo por el tamaño del daño
Las comunidades de Mezcala y Xochipala consintieron en recibir 2.5 onzas por hectárea, por lo que el ejido de Carrizalillo se volvió a quedar solo en su demanda frente a la tercera empresa trasnacional en sus tierras.
La mesa ejidal explica que eso obedece al valor de la tierra y a la factura social que Carrizalillo ha tenido que pagar.
Primero, Carrizalillo renta 95 por ciento de su superficie, la que ya está toda contaminada y esas tierras eran sus parcelas de cultivo, mientras Mezcala y Xochipala tenían esas tierras ociosas.
Segundo, Carrizalillo tiene el patio de lixiviados a 450 metros en línea recta, sin ninguna barrera física; Xochipala a ocho kilómetros y Mezcala a diez, con cerros de por medio.
Desde hace un par de meses, Horacio Montiel vive a tan solo 200 metros del patio de lixiviados, ahí construyó su casa porque ahí está su parcela.
Los costos para Carrizalillo en devastación y enfermedades en sus habitantes han sido muy altos.
“Por eso nosotros no podemos aceptar la renta que nos ofrecen”.