Protestan en diversos puntos del estado en el marco del Día Internacional de Víctimas de Desaparición Forzada.
El representante en México del Alto Comisionado de la ONU para Derechos Humanos encabeza acto en Atoyac al lado de Tita Radilla.
Texto y foto: Jesús Guerrero
Viernes 30 de agosto de 2024
Chilpancingo
Familiares de desaparecidos en Guerrero protestaron en diversos puntos de la entidad, para reprochar la falta de voluntad del Congreso local para aprobar la Ley de Desaparición Forzada.
Las movilizaciones de al menos siete colectivos de víctimas de la violencia se realizaron en el marco del Día Internacional de Víctimas de Desaparición Forzada, para denunciar la inacción de los tres niveles de gobierno para localizar los miles de desaparecidos en Guerrero.
En Chilpancingo, el colectivo Lupita Rodríguez y varios padres y madres de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala marcharon de la estatua de Nicolás Bravo al monumento de Las Banderas, donde culminaron con un mitin.
En el recorrido de más de tres kilómetros, mujeres y hombres mostraron fotografías de sus desaparecidos y lanzaron la consigna «vivos se los llevaron, vivos los queremos».
Durante el mitin en el punto conocido como Las Banderas, donde también se encuentra el antimonumento de los 43, David Molina Rodríguez, presidente del colectivo Lupita Rodríguez, reprochó que es injustificable la disculpa pública de la diputada local Nora Yaney Velázquez Rodríguez, del Morena, por no haberse aprobado la Ley de la Desaparición Forzada, que se quedó en comisiones legislativas de la legislatura local que concluye este sábado 31 de agosto.
«La ley no caminó en el Congreso porque los diputados de Morena no quisieron, debido a que significaba destinar presupuesto; y eso está supeditado por el titular del Ejecutivo», denunció David Molina.
En una de las últimas sesiones de la legislatura saliente, la legisladora Nora Velázquez pidió perdón a los colectivos de los desaparecidos por no haberse aprobado la ley en cuestión.
David Molina recordó que fueron los colectivos de los desaparecidos en Guerrero los que propusieron dicha ley, la cual, a diferencia de la que proponían algunos diputados, se propone un centro de identificación humana que forme parte del organigrama de la Comisión Estatal de Búsqueda (CEB).
Denunció que el Centro de Resguardo Forense(CRF) ya está llegando a su límite de resguardo de cadáveres, ya que en este momento hay 960 restos humanos en las gavetas.
El CRF está ubicado en la colonia Santo Domingo, al poniente de Chilpancingo.
Integrantes de cuatro colectivos de Iguala y Chilpancingo realizaron un acto de protesta en el memorial de desaparecidos de la alameda Granados Maldonado en el centro de Chilpancingo.
El memorial lo construyó este año el gobierno municipal de la capital que encabeza la morenista Norma Otilia Hernández Martínez.
«Mucha gente piensa que las desapariciones es un fenómeno trivial, pero es un problema que sigue lacerando a la sociedad. Y lo más grave es que el gobierno no hace nada para hacer justicia y tampoco para frenarlas», criticó el párroco Feliberto Velázquez Florencio durante una misa que ofició después del mediodía de este viernes.
(Las desapariciones) es una herida abierta que causa mucho dolor; y se va a cerrar hasta que haya justicia, sanación y reconciliación», remarcó el sacerdote.
En la protesta estuvieron los colectivos de Chilpancingo: María Herrera, Raúl Trujillo Herrera, Guerrero, no más Desaparecidos y Colectivo Independiente, además del colectivo Madres Igualtecas de Iguala.
En Atoyac de Álvarez se realizó un acto encabezado por el representante en México del Alto Comisionado de la ONU para Derechos Humanos, Alan García, y la vicepresidenta de la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Víctimas de Derechos Humanos (Afadem), Tita Radilla.
«Pedimos al Estado mexicano adoptar y tomar una agenda que parta del reconocimiento y escuche la voz de las familias, que las proteja, que asuma la búsqueda con una responsabilidad propia y que investigue de manera efectiva», demandó Alan García ante familias de los municipios de Atoyac y Acapulco que tienen desaparecidos, principalmente, durante la llamada guerra sucia.