En abril asesinaron a 59 personas, cinco son mujeres, tres de ellas murieron por torniquete

Texto: Marlén Castro

Foto: Archivo/Amapola Periodismo

Lunes 6 de mayo del 2024
Chilpancingo

Tres de las cinco mujeres asesinadas en abril, de 59 homicidios en total, murieron por un torniquete, una técnica que se usa para salvar la vida o para anularla.

Las noticias sobre violencia así sean muertes crueles, después de casi dos décadas, se quedan en el dato frío.

La mayoría de los medios de comunicación lo informan tal cual “Asesinan a mujer con torniquete”. No hay lugar a pensar en el sufrimiento de la persona que tuvo un final así.

El torniquete es un dispositivo médico que se utiliza en caso de una hemorragia grave. La técnica también funciona al revés: para cortar el flujo de sangre al cerebro.

La mayoría de las mujeres asesinadas y cuyas muertes podrían tener relación con el crimen organizado tienen evidencias de este tipo de muerte.

Un asesino serial famoso de la desquiciada sociedad estadounidense, Anthony Allen Shore, quien fue ejecutado en 2018, reveló que prefería esta forma para evitar lidiar con la sangre.

Allen Shore fue llamado El Asesino del torniquete debido al uso de una ligadura con un cepillo de dientes o una vara de bambú, un instrumento similar a un freno de nariz usado por los agricultores para el control de caballos. Se trata de un dispositivo sencillo con resultados efectivos.

Las tres víctimas de abril eliminadas con esta técnica por las huellas tuvieron muertes dolorosas. Había huellas de tortura por todo su cuerpo. El torniquete fue el último castigo. No sólo hubo mujeres muertas con esta técnica. También dos hombres.

De acuerdo con el registro de homicidios del mes de abril de Amapola, periodismo transgresor, las mujeres asesinadas con esta técnica fueron amordazadas y amarradas de pies y manos.


La primera de las víctimas de esta forma de muerte, hasta la fecha está sin identificar, fue asesinada el 13 de abril, en Acapulco, en la colonia Carabalí. Se cree que la víctima podría haber tenido 30 años. Llevaba huaraches cafés, pantalón corto de mezclilla color negro y blusa amarilla.

Esa es otra circunstancia de la mayoría de las víctimas de la violencia. De la mayoría nunca se conoce su nombre. De las cinco mujeres asesinadas este mes de abril, sólo se supo el nombre de Nora Yaneri Oyarzabal Díaz, de 49 años, de la colonia Sedue, de Chilpancingo. De las otras cuatro víctimas, los medios de comunicación que cubren principalmente los hechos de violencia, no dan seguimiento para conocer los nombres de las víctimas, de su historia y las personas a las que dejan huérfanas.

De las 59 víctimas en total, cinco de ellas mujeres, sólo de nueve se conocen sus nombres. El resto son víctimas anónimas de las que los medios no dan cuenta de nada sobre su vida.

El otro asesinato de una mujer con la técnica de torniquete ocurrió el 16 de abril, también en Acapulco, sobre la calle Cuatro, esquina con la Nueve, de la colonia La Postal. En este caso nunca se supo de la edad, del nombre, mucho menos su historia y las personas que lloraron su pérdida.

El tercer hecho de este tipo también ocurrió en Acapulco. En esta ocasión, las víctimas de esta técnica fueron un hombre y una mujer. Los hechos ocurrieron el 25 de abril, en la colonia Aguas Blancas. Los cadáveres del hombre y de la mujer fueron arrojados desde un carro en movimiento en la calle del mercado, a las seis de la mañana.

*Los asesinatos de marzo y abril*

Los homicidios registrados en abril, con respecto al mes anterior, fueron menos. En marzo se registraron 65 asesinatos. Marzo fue un mes con mucha violencia en la entidad, resaltan los homicidios de la menor de ocho años, Camila Ortega, en Taxco, y el posterior linchamiento y homicidio de Ana Rosa Aguilar, la presunta secuestradora. Ambos ocurridos el 28 de marzo, un jueves santo.

Los asesinatos de este mes de abril, ocurrieron mayoritariamente en Acapulco, un total 39, lo que significa 68 por ciento de los crímenes. En segundo lugar, la zona Centro, con 10 homicidios, principalmente Chilpancingo con ocho y, en Apango, cabecera de Mártir de Cuilapan, ocurrieron dos. En tercer lugar figura la Costa Grande con cuatro y en el último la zona Norte con dos homicidios. La región de la Montaña no tiene registro de homicidios.