En medio de camiones de basura reciben clases estudiantes de primaria en Chilpancingo

Niñas y niños de la primaria Raúl Ramírez Castañeda toman a clases en aulas improvisadas en Chilpancingo, este 23 de enero del 2024. Foto: Itzel Urieta
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Se trata de una galera en la que funciona desde inicios de año la Primaria Rafael Ramírez


Texto y foto: Itzel Urieta

23 de enero del 2024

Chilpancingo

 

En una galera que guarda camiones de basura, de bomberos, de patrullas y hasta un remolque de hamburguesa descompuesto, 170 alumnos de la Escuela Primaria Rafael Ramírez Castañeda reciben clases.

La galera se dividió en ocho salones. Las divisiones se hicieron con retazos de cortinas, de lonas y de mallas para que los grupos no se distraigan entre si.

Obviamente pasa lo contrario. Las clases de los docentes se mezclan, así como las risas y pláticas de los menores.

En esta condición, las niñas y los niños de la Primaria arrancaron el año 2024.

Vienen de otro espacio en peores condiciones.

Antes estuvieron en un rincón de las canchas de la Galeana, en cajas de tráilers que servían de aulas.

Trailers estacionados cerca de las canchas de la Galeana, en Chilpancingo, este 23 de enero del 2024. Foto: Itzel Urieta

Los problemas para este plantel, ubicado en la colonia San Rafael Norte, al norte de la capital de Guerrero, comenzaron hace 10 años, en 2014.

Con el huracán Ingrid y la tormenta tropical Manuel el plantel se inundó y presentó problemas de humedad.

La planta de docentes sobrellevó la situación, pero hubo tres factores naturales que terminaron por hacer el plantel inhabitable.

Los sismos de 2017 y 2019 afectaron la estructura del edificio, sumado a eso, en 2020, se detectó una falla geológica en varias colonias del norte de Chilpancingo lo que ocasionó que el plantel fuera declarado inhabitable por Protección Civil.

La matricula de la institución cayó de 400 a poco más de 100 estudiantes.

Instalaciones de galeras que fungen como aulas en las canchas de la Galeana, en Chilpancingo, este 23 de enero del 2024. Foto: Itzel Urieta

Estudiantes, madres, padres de familia y docentes emprendieron una lucha para conseguir un edificio digno donde recibir clases.

Miguel Ángel Ventura Ramos, maestro de primer año y representante del Comité de Reconstrucción, contó que a través de la movilización consiguieron un terreno, aunque falta lo más importante: el edificio.

Los últimos tres años las autoridades estatales solo pusieron trabas al Comité, lo que retrasó la construcción del edificio, a pesar de que ya había un recurso etiquetado.

En 2019, después del temblor, la primaria accedió a un recurso de 10 millones de pesos otorgado por el aún existente Fondo de Desastres Naturales (Fonden), del cual el Comité nunca vio un centavo ni la voluntad de las autoridades para ejercerlo.

Niñas y niños de la primaria Raúl Ramírez Castañeda asisten a clases en galeras improvisadas en Chilpancingo, este 23 de enero del 2024. Foto: Itzel Urieta

El primer obstáculo fue conseguir un nuevo predio, el anterior, debido a la falla geológica, no era viable.

Se hicieron tres estudios en diferentes predios y el que mejor resultados obtuvo por la zona y el tipo de suelo fue uno conocido como La Bloquera, un predio ocupado por el Ayuntamiento de Chilpancingo para guardar vehículos oficiales en desuso o reparación.

Conseguir el predio fue solo un primer paso. El Ayuntamiento puso varios pretextos para no otorgar el espacio y fue hasta que el maestro se coló a una conferencia matutina de la alcaldesa, Norma Otilia Hernández Martínez, y le explicó con documentos en mano y detalles el por qué ese espacio era el adecuado, lo consiguieron.

Después de una mesa de trabajo, Hernández Martínez autorizó la donación del predio.

Otro problema surgió después; el Instituto de Vivienda y Suelo Urbano (Invisur) salió a decir que ellos eran los verdaderos propietarios y que no iban a donar el predio.

Después de varias movilizaciones, marchas y bloqueos, funcionarios de Invisur accedieron a donar el predio.

“Nosotros entendimos que era un acuerdo del gobierno; nos quería desgastar, no sabíamos con que finalidad, a lo mejor pensaba desaparecer la escuela o ubicarnos en otro predio”.

Niñas y niños de la primaria Raúl Ramírez Castañeda toman a clases en aulas improvisadas en Chilpancingo, este 23 de enero del 2024. Foto: Itzel Urieta

Ahora que el predio está en regla solo falta la construcción, lo que se ha retrasado, pero nadie sabe por qué.

Hay una teoría que no se confirmó, pero que llegó a oídos del Comité y es que ninguna autoridad quería donar ese predio porque estaba apartado para un cuartel de la Guardia Nacional.

La mañana del lunes alumnos, docentes, madres y padres de familia marcharon por las calles del centro de Chilpancingo y protestaron en el edifico Juan Álvarez para exigir se inicie la construcción del plantel.

Derivado de esa protesta, el Instituto Guerrerense de la Infraestructura Física Educativa (IGIFE) se comprometió a iniciar los trabajos el próximo lunes 29 de enero.

“Iniciamos un ciclo escolar de arrimados en las canchas de la Galena, comenzamos otro y el gobierno hacía caso omiso a nuestra petición”.

La esperanza de que inicie la construcción del plantel está a ocho días de distancia, pero de no ser así, el Comité esta preparado para radicalizar sus protestas.

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