Texto: Itzel Urieta
Fotografía: La lente de Guerrero
Chilpancingo
Esta mañana, un estruendo alarmó a los vecinos de la colonia Primero de Mayo, ubicada al norponiente de Chilpancingo, se trataba del desgajamiento de una ladera de la barranca La Lobera, donde estaban cimentadas 10 viviendas, habitada por 100 personas.
Angélica María Fuentes Nuñez, habitante de una de esa casas afectadas, contó que ella llevaba 25 años ahí, pero que esta mañana tuvo que ser evacuada por el temor a que su vivienda también se derrumbe.
“Ya desde hace un tiempo se venía desgajando, pero no era nada preocupante, hasta hoy que varias casas amanecieron casi en el vacío por el desprendimiento”, contó.
En su casa vive toda su familia, 10 personas, que se quedaron sin vivienda por el riesgo que les acarreó el desgajamiento.
De acuerdo con el coordinador de Protección Civil municipal, Sergio del Moral Benítez, 10 familias serán refugiadas en un albergue temporal que se acondicionó en la Secundaría Técnica 150, a unos metros de la zona y otras más se refugiaron con sus familiares.
Las autoridades no reportaron lesionados por este desprendimiento, pero sí muchos afectados.
De lado derecho de la calle principal de la colonia Primero Mayo, una gran línea de casas se asientan sobre los márgenes de la barranca La Lobera, y desde hace 25 años que comenzó a poblarse ninguna autoridad advirtió que era riesgoso vivir en esa zona.
“A nosotros nos vendieron todo en regla y cuando construimos y pedimos permiso al Ayuntamiento jamás nos dijeron que era peligroso vivir aquí, ya después nos fuimos dando cuenta con los desprendimientos que fueron cada vez más grandes”, dijo María Fuentes.
Sobre esa calle principal fueron 10 familias que tuvieron que sacar sus pertenencias, desde sus estufas, tanques de gas, camas, roperos, trastes, refrigerador hasta juguetes, para desalojar por completo su vivienda.
Personal de Protección Civil del estado colaboró con la evacuación y cercó la zona inestable y mencionó que ya había una advertencia de que los márgenes de la barranca era considerada zona de riesgo.
Los afectados desde las siete de la mañana sacaron sus pertenencias para trasladarse al refugio en la secundaria, ubicada en la colonia Sección Séptima.
Los vecinos contaron desde ayer, entre las cinco y siete de la tarde, comenzaron a escuchar “un estruendo en la barranca, y a las cinco de la mañana fue que se derrumbó una gran parte de la barranca”.
Las afectaciones más directas fueron las 10 casas en las que sus habitantes comenzaron a sacar sus pertenencias.
A a las dos de la tarde continuaba deslizándose tierra de la barranca.
