Candy Bags, emprendimiento juvenil para disminuir el impacto ambiental

Candy Bags, emprendimiento juvenil para disminuir el impacto ambiental1

Texto: Itzel Urieta

Fotografía: José Miguel Sanchez

Chilpancingo

 

Bordar, pintar y coser tote bags (bolsas de manta) significó para Candy Julissa Marcos un ayuda en plena pandemia por Covid-19. En ese entonces, comenzó a sufrir ataques de ansiedad. La manera de disminuir estos síntomas la halló en diseñar sus propias bolsas.

Además de ser emprendedora Candy es psicóloga. Nombró a su emprendimiento Candy Bags, el cual inició en el 2021.

Las bolsas, además de ayudarle con sus síntomas de ansiedad, permitieron a Candy obtener ingresos extra en uno de los momentos de más incertidumbre para muchos jóvenes: culminar estudios de licenciatura en plena pandemia.

A Candy siempre le gustaron las tote bags. En puebla, que es donde estudió y vivió algunos años, constantemente veía este tipo de bolsas por lo que decidió comprarse algunas.

Después, se dio cuenta de que en Chilpancingo no había tote bags, por lo que comenzó a realizar sus propias bolsas.

Candy Bags es ahora el nombre de su emprendimiento. Candy realiza bolsas pintadas a mano, bordadas a máquina y bordadas a mano. Los tamaños varían, son en forma de cartera o cosmétiquera de 21 centímetro por 13, tote bag clásica de 34 por 36 centímetros, grand tote bag de 35 por 42 centímetros y mini tote bag de 30 por 32 centímetros.

El primer pedido que entregó fue para un amigo, y fue una tote bag pintada a mano. Ahí enfrentó su primer reto, aprender a pintar sobre manta con pintura textil.

Candy recuerda que ese pedido le causó incertidumbre y miedo. Pensaba que podría no gustarle a su cliente. Comenzó a ver vídeos y tutoriales en Youtube, comenzó a practicar. Así logró hacer su bolsa, entregarla y a su cliente le gustó.

Candy Bags es un emprendimiento responsable con el medio ambiente, a Candy siempre le gusta contribuir en lo que está en sus posibilidades para disminuir el impacto ambiental.

Uno de los motivos por los que ella realiza estas acciones es porque se dio cuenta que en su casa solían utilizar muchas bolsas de plástico.

Su inquietud la hizo cuestionarse cuánto tarda una bolsa de plástico en degradarse.

Al ver la situación, pensó que además de las acciones que ya realiza como siempre llevar su propio bote de agua, podía hacer algo más.

“Pensé, creo que es momento de contribuir tantito. En mi página de Instagram dice: incluso los gestos pequeños son importantes porque por una persona llegas a más y así muchos pueden utilizar su bolsa”.

Es así como a través de su emprendimiento Candy quiere llegar a muchas personas y dar el mensaje de que entre más gente se una a utilizar bolsas de manta y reutilizar, el impacto ambiental disminuirá.

Candy hace sus bolsas mientras bebe un té relajante y prende un incienso, es algo que le ayuda con sus crisis de ansiedad.

Por sus estudios en piscología, Candy sabe que actualmente muchas personas viven con ansiedad, eso la motivó a, en cada entrega, regalar un té y un incienso a sus clientes. “Quiero que quienes me compren se sientan bien”.

El apoyo de su mamá y papá es fundamental. Fue su mamá quien le regaló su máquina para coser y su papá le ayuda a bordar. Además de las bolsas, también realiza separadores para libros y fundas para lap tops.

Candy Bags, emprendimiento juvenil para disminuir el impacto ambiental

Las dificultades de emprender

Una de las dificultades a las que Candy se enfrentó en un inicio, fue que sus bolsas gustaran ya que en Chilpancingo no había quien vendiera este tipo de bolsas, ella se abrió paso en este mercado y hacerse de clientes.

Al principio, por las bajas ventas, pensó que sus bolsas no le gustaban a las personas, después de un tiempo y de ir a bazares comenzó a tener más pedidos.

Reconoce que muchas veces por su trastorno de ansiedad, ella misma llegó a ponerse trabas y pensar “No va a funcionar”.

En la cuestión del regateo, no le piden mucho. Candy reconoce el valor de su trabajo, para hacer una bolsa se lleva de cuatro a cinco horas. Siempre trata de brindar opciones a sus clientes para que no regateen su trabajo.

Candy Bags a futuro

Candy cumplirá un año con su emprendimiento, una de sus metas es crecer en clientes y pedidos.

Candy viaja aun a Puebla, algunos pedidos son enviados a esa ciudad por lo que le gustaría tener un punto de venta en Puebla y otro en Chilpancingo.

Candy ve su emprendimiento con responsabilidad social, además de contribuir al medio ambiente, quiere apoyar a otras causas como a los perros en situación de calle.

Piensa en varios proyectos para estos animales, como hacer suéteres y regalarlos en temporada de frío a refugios destinados al cuidado de perros.

“De alguna u otra forma tenemos que apoyarnos y retribuir un poco”.

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