Destrozos de normalistas en oficinas del PRD ejemplifican el rechazo social a ese partido, dice fundadora

Texto: José Miguel Sánchez 

Fotografía: Amílcar Juárez

14 de diciembre de 2021

Chilpancingo 

 

El pasado domingo 12 de diciembre se cumplieron 10 años del asesinato de los estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa, Jorge Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, por parte de policías estatales y federales, en la Autopista del Sol, por lo que estudiantes y luchadores sociales marcharon por las principales calles de Chilpancingo para exigir justicia.

 

Durante la manifestación, los estudiantes normalistas destrozaron mobiliario y realizaron pintas en las oficinas del Partido de la Revolución Democrática (PRD) ubicadas en Chilpancingo.

 

De acuerdo con Emperatriz Basilio Goitia, fundadora y ex militante del PRD, los actos realizados por los normalistas se deben a la traición que este instituto político realizó a sus propios principios y estatutos.

 

“En los últimos años el PRD traicionó sus propios ideales porque se alió con la derecha y la ultraderecha y Ayotzinapa refleja muy bien el sentir de la población respecto al PRD”.

 

Basilio Goitia fue fundadora del PRD en 1989 y militó por 22 años en dicho instituto político, al cual renunció en 2011 por ya no considerarlo una alternativa para la población.

“El objetivo por el cual el PRD se creó quedó totalmente sepultado, personajes oportunistas se valieron de lo que construimos por décadas para luchar por sus intereses personales”, agregó.

 

Durante la manifestación, los estudiantes escribieron sobre la fachada principal del edificio color amarillo: “Si no hay justicia para el pueblo que no haya paz para el gobierno”, “12 de diciembre no se olvida, justicia”.

 

Para ingresar al inmueble los normalistas entraron por una ventana y desde dentro con un mazo rompieron el candado de la entrada principal, así logró entrar el contingente, una vez adentro, pintaron en la sala de juntas y oficinas.

 

Antes de retirarse quemaron un par de petardos que generó una nube de humo, y entre los nubarrones grises se lograba observar los vidrios rotos tirados en los pisos, computadoras, e impresoras destrozadas en el suelo, también algunas sillas y escritorios resultaron con daños.

 

En la recepción se observan vidrios rotos en el piso, carpetas y documentos regados por todo el lugar, un escritorio que apenas puede mantenerse en pie y un estante que impide la entrada al espacio y al fondo en un esquina la bandera amarilla con el sol azteca en el centro sigue de pie, al parecer no fue alcanzada por el enojo de los normalistas.

 

Para Basilio Goitia estos hechos tienen un motivo simbólico. “Con esas acciones Ayotzinapa nos recuerda todos los días que el PRD ya no sirve para nada”.

 

Agregó que es inminente la desaparición del partido y que eso sería algo sano para las organizaciones y militantes de la izquierda mexicana pero antes se deben recuperar los aportes que hizo a la vida política del país.

 

 

Los costos de ser una opción partidista

El PRD fue fundado el 5 de mayo de 1989 y agrupó a todas las expresiones de izquierda del país que en ese momento sufrían la represión del Estado mexicano como la Asociación Cívica Nacional Revolucionaria (ACNR), el Partido Comunista de México (PCM), Partido Socialista de los Trabajadores (PST), la Unión de la Izquierda Comunista (UIC) y un sector del Partido Revolucionario Institucional (PRI) considerado progresista.

 

De acuerdo con Helene Combes, investigadora de partidos políticos y movimientos sociales en América Latina, los costos del PRD de ser oposición fueron cobrados con violencia.

 

“La violencia que se vivió hace 30 años durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), tuvo como principal blanco a militantes del recién creado PRD”, se lee en su artículo Matar candidatos. El PRD en los años 90.

 

Los datos de su investigación arrojan que de 1989 a 1994 fueron asesinados 265 militantes del PRD, la mayoría concentra en los estados de Michoacán, Guerrero, Oaxaca y Puebla.

 

Datos estatales que son archivos oficiales del PRD indican que solo en Guerrero de 1989 a 1996 asesinaron a 134 perredistas y 12 más siguen desaparecidos. Todos estos asesinatos se dan en contextos electorales.

 

30 años después, la cúpula del PRD se alió con sus verdugos. En las pasadas elecciones de 2021 la Alianza va por México estuvo integrada por el PRI, PRD y PAN. Fueron juntos en 17 estados de la República.

 

El desdibujo del PRD no surgió en esta elección. 10 años antes, un gobernador emanado del PRD dio la orden a las fuerzas policiacas de reprimir a los estudiantes normalistas en la Autopista del Sol. En 2014 ocurrió la agresión en Iguala con saldo de 43 estudiantes desaparecidos y tres asesinados.

 

En ese momento Iguala y Guerrero eran gobernados por el PRD, aunque el gobernador, Angel Aguirre Rivero venia de las filas del PRI.

 

El PRD Guerrero emitió un comunicado un día después de la agresión a sus oficinas. Ahí califican estas acciones de los estudiantes normalistas y organizaciones de la sociedad civil de injustificadas. “Son ya diez años de agresiones injustificadas al Partido de la Revolución Democrática en Guerrero, por parte de seudoestudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos”, se lee al inicio del comunicado.

 

En dicho documento también menciona que los actos de los normalistas son de provocación política. Al final, piden esclarecer los hechos ocurridos el 12 de diciembre del 2011.

 

El actual presidente del PRD, el aguirrista Alberto Catalán Bastida en sus redes sociales condenó las agresiones de los normalistas y dijo que las oficinas del partido no son las competentes para impartir justicia y calificó los hechos de sinsentido.

 

Se solicitó una entrevista directa a Catalán Bastida pero no contestó.