Con Ejército y Marina se mantiene en Huitzuco toque de queda impuesto por grupo criminal

Fotografía: Jesús Guerrero

Fotografía: Oscar Guerrero

3 de diciembre del 2021

Chilpancingo

 

Con la presencia de 125 militares y policías estatales para resguardar la seguridad, en Huitzuco, se mantiene el toque de queda impuesto por grupos del crimen organizado, de acuerdo con habitantes de ese municipio de la zona Norte.

El alcalde Ever Nájera Nájera indicó que continúan suspendidas las clases presencialmente pero el lunes se reanudan y la mayoría de los establecimientos comerciales cierran temprano, entre las seis y siete de la noche.

En entrevista que concedió a reporteros de esta ciudad, en la que participó en un taller sobre finanzas impartido a 38 alcaldes de Guerrero en el auditorio José Joaquín Herrera, del Palacio de Gobierno, el edil afirmó que desde hace dos semanas el transporte público y foráneo funciona hasta las seis de la tarde.

“No es un cierre total, es un cierre hasta cierto horario. Es como el tema del Covid 19 cuando a los comerciantes les decían que las ventas eran hasta las seis de la tarde”, expresó.

El alcalde morenista reconoció que un grupo del crimen organizado obligó a los empresarios de la masa y la tortilla a bajar el precio del producto.

“Obviamente que todos los empresarios le bajaron, ya que antes estaba a 20 pesos el kilo de la tortilla ahora está en 18 pesos”, afirmó el alcalde.

A través de un video en las redes sociales, el pasado 10 de noviembre hombres armados que se identificaron como integrantes del grupo de Los Tlacos de la Sierra dieron a conocer que a partir de ese día el precio del kilo de la tortilla en Huitzuco iba a bajar de 19 a 16 pesos.

El 20 de noviembre se publicó un aviso en las redes sociales a nombre de este mismo grupo criminal, el que pidió a la ciudadanía de Huitzuco que a partir de las siete de la noche no saliera de sus casas y exigió a los empresarios cerrar sus negocios.

El 22 de noviembre en la noche, tres jóvenes que paseaban en una motocicleta en las calles del centro de Huitzuco fueron asesinados a balazos.

El 24 de noviembre fue asesinado, cerca de Huitzuco, un trabajador de una empresa de Telecable cuando viajaba en su vehículo.

El alcalde Ever Nájera Nájera consideró que Huitzuco vive una ola de violencia debido a que los grupos de la delincuencia que operaban en Iguala huyeron a su municipio.

“En Iguala se blindó de fuerzas de seguridad y los grupos (delictivos) huyeron y se fueron a Huitzuco”, afirmó.

Señaló que los gobiernos federal y estatal no le han informado cuanto tiempo se quedarán en Huitzuco las fuerzas de seguridad.

“No me han informado nada ni tampoco la estrategia que están realizando al igual si ha habido o no detenciones de personas relacionadas con la delincuencia”, manifestó.

Confía en que poco a poco se recobre la normalidad en Huitzuco en este mes de diciembre.

“Siempre en diciembre a nivel nacional y estatal se ve la disminución de las actividades delictivas y nosotros esperamos que en dos semanas así suceda”, dijo.

El alcalde dijo que si el Ejército Mexicano, la Marina, la Guardia Nacional y la Policía Estatal se van de Huitzuco el ayuntamiento no tendrá ninguna capacidad para enfrentar a la delincuencia.

“La Secretaría de Seguridad Pública municipal cuenta con 30 agentes que en dos grupos se turnan las tareas cada 24 horas y, de esos, diez realizan labores de vigilancia en la caseta de Paso Morelos, en la autopista del Sol Cuernavaca-Acapulco”.

Nájera Nájera dijo que a pesar de la complicada situación que se vive en su municipio él no tiene escoltas que lo protejan.

En tanto, una activista que acudió a Huitzuco, contó que desde las cinco de la tarde todo tipo de actividades son suspendidas en esta demarcación.

“Los planteles educativos siguen cerrados, los establecimientos comerciales también y la gente ya no sale de sus casas”.

Aseguró que después de las cinco de la tarde Huitzuco es un pueblo fantasma y en las calles solo se ven las patrullas del Ejército y otras fuerzas de seguridad que instalan varios retenes o puestos de revisión.