Texto: Andrea Mendoza
Foto: Redes
7 de junio de 2024
Chilpancingo
Max, el perro raza pitbull que intentó proteger a su dueña de linchamiento, Ana Rosa Aguilar, señalada del secuestro y homicidio de Camila, en Taxco, murió la tarde de ayer jueves.
A Max le aplicaron la eutanasia tras algunos meses de sufrir de un cáncer avanzado en todo el cuerpo.
Max fue rescatado después del linchamiento y muerte de su dueña. Se hallaba en la casa en la que Camila fue secuestrada, la que quedó en ruinas tras el paso de una turba enardecida. Cuando grupos de personas los sacaron de esa casa a la fuerza, Max protegió a Ana Rosa Aguilar.
En ese momento Max tenía algunos golpes producto del linchamiento. Cuando fue rescatado, percibieron una grave desnutrición y tumores en distintas partes de su cuerpo.
David Gómez Blanco, el veterinario que atendió a Max, retiró los tumores que hasta ese momento parecían benignos.
Después de su recuperación, Max fue puesto en adopción, pero nadie se interesó en el perro. La organización que lo rescató y cuidó, Adopta un amigo Taxco, consideró que alrededor de Max se creó el estigma de que podría ser un perro violento, por el contexto de su situación.
Aunque sus rescatistas siempre dijeron que Max era un perro muy dócil, juguetón y amoroso, Max nunca tuvo una segunda oportunidad de hallar una nueva familia.
Estuvo al cuidado de la asociación de rescate para perros en Taxco, donde recibió cariño y atención de sus rescatistas y más perros que lo acompañaban.
Max es el ejemplo claro de la fidelidad de los perros y que las apariencias engañan.
Aunque Max pareciera un perro agresivo, solo fue un perro violentado y amoroso que pedía un nuevo hogar.