Texto: Amapola Periodismo
Lunes 29 de abril de 2024
Chilpancingo
El obispo emérito de la diócesis Chilpancingo-Chilapa Salvador Rangel Mendoza fue encontrado con vida, pero muy golpeado, la tarde de este lunes en el hospital general Dr. José G. Parres, de Cuernavaca, Morelos.
Salvador Rangel desapareció el sábado 27, después de que ofició misa en Tixtla, Guerrero.
Una fuente del hospital que pidió guardar su identidad, confirmó que el obispo ingresó al hospital en calidad de desconocido luego de ser hallado tirado en una calle de la Cuernavaca.
En cuanto se supo que se trataba del obispo Salvador Rangel, por toda la difusión que se le dio en redes sociales a su desaparición, el fiscal de Morelos, Uriel Carmona, llegó al nosocomio para atender personalmente la seguridad del jerarca católico.
El obispo sería trasladado en el transcurso de la tarde-noche a un hospital privado de Cuernavaca para recibir una atención especializada, aunque se le reportó estable.
En la denuncia que presentó en la Fiscalía General del Estado (FGE), de Morelos, por la desaparición, el sacerdote Juan Ricardo Negrete Cárdenas aseguró que Salvador Rangel salió de su domicilio en el fraccionamiento Las Flores, de Jiutepec, Morelos, cerca de las ocho de la noche del sábado 27 de abril.
Juan Ricardo Negrete confirmó que hasta el domingo 28 empezó la búsqueda del obispo.
En la denuncia, el párroco de la iglesia del barrio El Santuario, de Tixtla, mencionó que se realizaron varios retiros de la cuenta de Salvador Rangel, en el tiempo en que estuvo desaparecido.
Para la fiscalía de Morelos, se trató de un secuestro exprés.
Al conocer de la desaparición de Salvador Rangel, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) emitió un comunicado en el que exigió a las autoridades, tanto federales como de Morelos y Guerrero, su búsqueda inmediata.
En el comunicado, el CEM pidió a los captores que en un acto de humanidad y considerando su estado delicado de salud del obispo le permitan tomar de manera adecuada y oportuna sus medicamentos.
Salvador Rangel, de 78 años, padece de hipertensión arterial, tiene un marcapasos y enfrenta secuelas por el covid-19 que padeció en 2020.