Texto: Itzel Urieta
Fotografía: Tlachinollan
15 de diciembre del 2023
Chilpancingo
“Lo feminicidas están libres y pueden seguir cometiendo más actos de violencia y no son detenidos”, denunció Neil Arias Vitino, abogada del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, ante el aumento de feminicidos en esta región.
En total son nueve órdenes de aprehensión por el delito de feminicidio en la Montaña del 2015 a la fecha. De estas nueve órdenes de aprehensión, ninguna se ha ejecutado, informó la abogada de la Organización no Gubernamental (ONG).
Tlachinollan brinda acompañamiento jurídico desde el 2014 a 27 familiares de víctimas de feminicidio, indicó Arias Vitino.
Tlachinollan tiene registro de 100 feminicidios ocurridos en la región de 2014 a la fecha.
El caso más reciente es el de María Margarita Vargas Florencio, orginaria de Conapatoyac, asesinada el 3 de diciembre presuntamente por su ex pareja, Pavel Bernabé Florentino.
La Fiscalía General del Estado (FGE) y el Ministerio Público de Copanatoyac sostienen que la muerte de María Margarita fue un suicidio, su familia no cree esa versión por varias razones, una de ellas, es que María Margarita se separó de Pavel por violencia familiar.
Además, desde el fallecimiento de María Margarita, Pavel huyo de Copanatoyac; hasta el momento nadie sabe de él.
“Copanatoyac desde el 2017 tiene una orden de aprehensión por feminicidio, pero ya se han cometido seis feminicidios más y, como no hay detención, aumenta más la violencia contra las mujeres”, dijo Arias Vitino.
Falta de políticas públicas y complicidad
A raíz del feminicidio de María Margarita y otros ocurridos en la región, colectivas feministas solicitaron que se declare la Alerta por Violencia de Género en Copanatoyac
Arias Vitino consideró que se requieren mayores acciones para garantizar una vida libre de violencia a las mujeres en la Montaña.
“El tema no es que se decreten las alertas porque no hay política pública de atención. De qué sirve que se creen estos protocolos de atención y que haya alertas si no hay voluntad política. Si las instituciones no se ponen a trabajar, la violencia contra las mujeres va a continuar”, agregó Arias Vitino.
La falta de personal en las áreas de las instituciones que abordan el tema es otro factor que limita que las mujeres de la Montaña tengan acceso a una vida libre de violencia.
El factor determinante es que muchos casos de feminicidio quedan impunes.
La impunidad, explicó la abogada, ocurre por “la complicidad” entre los varones para evitar castigos.
Explicó que en la Montaña es común saber de casos donde los feminicidas no reciben un castigo por su corrupción o cercanía con las autoridades.
“Desde arriba empiezan a moverse cosas, de pronto no se hacen las cosas con debida diligencia, no se recaban los indicios. Todos estos son obstáculos que impiden que haya una buena investigación en un caso”.
En el caso de las denuncias, Arias Vitino explicó que si se realizan denuncias, la falta de recursos humanos y financieros de la FGE hacen que las medidas que requieren las víctimas no se les brinden.
“El llamado a las insituciones es que haya voluntad política y que se ejecuten las órdenes de aprehensión que hay en la Montaña”, pidió.
Arias Vitino exigió a la FGE un protocolo para atender los casos de feminicidio, también capacitaciones al personal que trata con las familias de las víctimas para que haya mayor sensibilidad y empatía.
Recalcó que deben tener protocolos específicos, ya que el contexto de las mujeres de la Montaña es diferente al de las mujeres en la ciudad.
“No hay perspectiva de género para atender estos casos. No hay suficiente personal. La justicia en el tema de investigaciones en muy lenta”.