Texto: José Miguel Sánchez
Fotografía: Oscar Guerrero
Chilpancingo
Esta mañana Rosa Bucio Infante protestó afuera de las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) para denunciar públicamente al trabajador de dicha dependencia, Antonio Benítez Guerrero, por amenazar a una menor de edad para que cambie su declaración en un juicio de abuso sexual.
Sin dar muchos detalles, Bucio Infante contó que su hija es testiga en un caso de abuso sexual presuntamente cometida por un hombre llamado Ciriaco Nava Sánchez, quien actualmente está preso en el Cereso de Chilpancingo.
Derivado de ese caso, la hija de Bucio Infante recibe amenazas de Benítez Guerrero para cambie la versión de su testimonio y Nava Sánchez pueda salir de prisión.
“Va a la colonia, la graba, le dice que si no cambia su declaración le va a pasar algo malo a ella, a su papá y a mí”, contó Bucio Infante afuera de la FGE.
Agregó que Benítez Guerrero es trabajador de la FGE, en el área de contraloría, además que tiene acceso a expedientes de los que saca información para beneficiar Nava Sánchez.
Desde hace seis meses que comenzó el hostigamiento contra la menor e hija de Bucio Infante buscan ser atendidos por la fiscal del estado, Sandra Luz Valdovinos Salmerón, para pedirle la destitución de Benítez Guerrero por intimidación, usurpación de funciones y hostigamiento contra la menor.
“Estoy aquí por mi hija, ella tiene miedo, y no nos callaremos, queremos hablar directamente con la fiscal para explicarle qué tipo de trabajadores tiene”, mencionó Bucio Infante.
La protesta se desarrolló en una de las entradas laterales de la FGE, en donde sólo estuvo Bucio Infante junto con su hija y pegaron algunas cartulinas en las que se leía: “Fuera Antonio por corrupto y usurpación de funciones”.
A la pequeña manifestación se acercó personal de la FGE y acordaron una reunión con Bucio Infante y su hija.