Acciones afirmativas, recurso insuficiente contra la discriminación porque las controlan dirigentes y grupos caciquiles

Texto: Margena de la O 

Foto: Facebook oficial de Mario Moreno Arcos y Citlali Calixto Jiménez 

15 de mayo del 2024

Chilpancingo

Para que las candidaturas por acciones afirmativas sean garantizadas por los partidos políticos y se abran los espacios públicos a las poblaciones que históricamente son segregadas, debe establecerse en una ley, de lo contrario, seguirán controladas por los dirigentes y grupos “caciquiles” partidistas, planteó el abogado Rubén Cayetano García, ex diputado federal de Morena.

En este proceso electoral, las candidaturas por acciones afirmativas han sido un tema público en Guerrero, porque quedó expuesto por los partidos y actores políticos un uso de estos espacios muy distante al de compensar las situaciones o circunstancias que impiden visibilizar y garantizar los derechos de ciertas poblaciones: indígenas, afrodescendientes, LGBTIQ+, discapacitados, migrantes.

Los dos casos más públicos en este contexto reciente es del candidato a senador de Movimiento Ciudadano, el ex priista Mario Moreno Arcos, quien intentó sostener su candidatura mediante la acción afirmativa que correspondía a las poblaciones afrodescendientes guerrerenses, con el planteamiento de que tiene una casa en La Bocana, Marquelia, en la costa Chica de Guerrero y que sería nombrado mayordomo de las fiestas del pueblo.
El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) le retiró la candidatura luego de que la sala regional de la Ciudad de México del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación se la revocó por no comprobar su pertenencia a los pueblos afros.

Se mantiene como candidato a senador, porque desde la dirigencia nacional hicieron un movimiento para apuntarlo a última hora como candidato fuera de esa modalidad y le pasaron la estafeta de acción afirmativa afro al estado de Oaxaca. El INE le aprobó la nueva candidatura el 9 de mayo pasado.

El otro caso es el de la diputada local de Morena, Gloria Citlali Calixto Jiménez, quien fungía como presidenta de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso local, quien busca la reelección por la vía plurinominal por acción afirmativa para las poblaciones LGBTI+.

Su candidatura fue impugnada ante el Tribunal Electoral del Estado por miembros de su propio partido y activistas de estas poblaciones por considerar que usurpa un espacio. El TEE solicitó al Instituto Electoral y de Participación Ciudadana Guerrero (Iepcgro) que aportara más elementos de prueba y, al final, la aspirante acudió a ratificarlas y con eso mantuvo su candidatura por esta acción afirmativa.

El caso de la diputada local tuvo cierto debate público, porque además de su autoadscripción, el requisito más importante para una candidatura bajo esta modalidad, agregó un documento de la organización Orgullo Guerrero, que tienen trabajo por la defensa de los derechos de las poblaciones LGBTI+, el cual fue interpretado como un recurso para sus postulación.

En esta elección dos ex miembros de la organización, Juan Carlos Salvador López y Uriel Mena Flores, quienes tenían cargos directivos, participan en el proceso electoral por una regiduría por Morena en el Cabildo de Chilpancingo. Eso fue lo que desencadenó un debate por un posible conflicto de interés, pero ambos aspirantes son activistas por los derechos de las poblaciones LGBTI+ reconocidos en la ciudad.

El tema es que las acciones afirmativas, establecidas como las medidas para corregir la desigualdad de derechos y libertades, en el ámbito partido-electoral no están elevadas a leyes, y sólo son reguladas por los órganos electorales.

“Tiene que normarse. No está establecido en la ley, esto lo han definido los órganos electorales, los tribunales, porque los partidos políticos, máxime los dirigentes de los partidos políticos, no quieren, no están dispuestos a cumplir con las acciones afirmativas”, expuso el abogado y después consideró que cada dirigente de partido tiene su propio interés y hace un uso de estos espacios.

Consideró que el tema está en cómo garantizar que los aspirantes emanan de manera legítima de una población o sector arropado por las acciones afirmativas, “porque si no, entonces, caemos en el rango de la simulación”. La autoadscripción es un recurso primario para sostener la vinculación a una acción afirmativa en el contexto electoral.

Para el exdiputado lo que ocurrió hace unos días con el caso de Moreno Arcos fue una “simulación”, porque, a su juicio, mintió para intentar sostener una candidatura, lo que le parece más grave, porque su proceder y el de su partido nunca fue en el sentido inverso de la discriminación.

“Los partidos políticos han legislado y han establecido las acciones afirmativas nada más para pararse el cuello, pero a la hora de la hora no las cumplen, no las llevan a cabo, y eso tiene que ver con los actos caciquiles de todos los estados”, mencionó en entrevista.

Considera que es una manera de garantizar el espacio a estas poblaciones, pero, sobre todo, de una representación real.

De todo esto no exculpó a su partido, Morena, donde mencionó también caen en esas prácticas. El actual dirigente estatal del partido guinda, Jacinto González Varona, también es diputado de actual legislatura local; en 2021 llegó por la vía plurinominal por acción afirmativa para las poblaciones LGBTI+.

La importancia del compromiso

El dirigente del colectivo Orgullo Guerrero, Efraín de Jesús Arroyo, aclaró que la organización no tiene ninguna función partidista, pero aceptó que tienen incidencia política y social.

Consideró que las acciones afirmativas para las poblaciones LGBTI+ representan un avance, aun cuando sólo las regulen los órganos electorales, porque significa que se abrió un espacio para su participación en la toma de decisiones. Pero, dijo, aún falta mucho por hacer.

Al preguntarle su opinión acerca de si es necesario elevar el tema a la ley, expuso que en el caso de las poblaciones LGBTI+ «es controversial», porque exigir probar cierta orientación sexual, se podría incurrir en actos violentos.

Simplemente, planteó, no se le puede obligar a una persona a «salir del closet» o reconocer cierta orientación porque existen muchas circunstancias que no se han superado, como los contextos conservadores, y eso no exime a una persona de pertenecer.

O, en el caso contrario, mencionó, puede pertenecer y probarlo, pero no estar comprometido con sus demandas.

El tema, aclaró también, es que existe la idea de que miembros de poblaciones LGBTI+ deben mirarse o comportarse de tal manera para probar que lo son o que pertenecen.

Para el dirigente del colectivo «lo importante es el compromiso, un interés por la agenda» de sus temas y por sus derechos.

Entonces, desde ahora, dijo, serán vigilantes de que aquellas personas que se postulen por acciones afirmativas LGBTI+ para cargos públicos hagan un buen trabajo.