Texto y fotografía: José Luis de la Cruz
21 de junio del 2021
Chilpancingo
Blanca Iris Becerra es licenciada en Educación y Artes, y desde hace 10 años también instructora de pole dance. Ella comenzó a practicarlo como un pasatiempo, pero ahora le invierte una parte muy importante de su día, porque lo comparte con otras mujeres que se han interesado por el deporte.
En la actualidad, en el deporte también conocido como baile de barra, de acuerdo con la experiencia de Blanca, no habido límites de género u oficio para practicarlo. Ella tiene su espacio de clases o rutinas frente a la entrada principal de las instalaciones de feria de Navidad y Año Nuevo en Chilpancingo. Con la pandemia por la Covid-19 cero el espacio, pero desde el 1 de febrero reinició actividades.
“El deporte es para todos, el pole dance es un deporte y como tal es para niños, adultos, mujeres (…). Aquí no importa talla, peso, estatura”, dice Blanca cuando se le pregunta quién podría practicarlo.
Además se requiere de mucha fuerza, resistencia, equilibrio, elasticidad, resistencia para hacerlo, porque se trabaja con el peso del cuerpo.
El pole dance, en realidad es un deporte alejado de los prejuicios que le han asignado en la actualidad, porque es más antiguo de lo que pudiera creerse y está asociado a una práctica deportiva de luchadores de la India, quienes lo hacían sobre barras de madera a manera de entrenamiento para ganar resistencia. No es casualidad, expone Blanca, que también el pole dance fuera retomado en las disciplinas circenses.
