Texto: Alejandra Valenciano/ Adrián Montiel
Foto: Cortesía Ecobac/A. Valenciano/Javier Oz
15 de enero del 2025
Chilpancingo
Tras el accidente de Lucky, la asociación civil hace un llamado a la navegación lenta, sobre todo en temporada decembrina, cuando aumenta el número de embarcaciones turísticas en las costas de Jalisco y Nayarit.
La organización Ecología y Conservación de Ballenas confirmó que Lucky, el ballenato severamente herido y encontrado cerca de la Cruz de Huanacaxtle, fue embestido en el área de la Bahía de Banderas por una embarcación mediana, no necesariamente ligada a las pangas autorizadas por Semarnat para ofrecer avistamientos turísticos de ballenas.
La bióloga Astrid Frisch Jordan, quien estudia las colisiones con ballenas desde hace 15 años, explica que las heridas de Lucky estaban frescas, lo que indica que el animal, de apenas 2 años de edad, había sido recientemente atropellado:
«Clasificamos las heridas por colisiones en frescas y cicatrizadas. Cuando las heridas están frescas quiere decir que el animal fue golpeado en el lugar donde lo estás viendo o en zonas aledañas. Nos tomamos el tiempo de analizar bien las heridas de Lucky y estaban abiertas, eran heridas frescas».
Tras el reporte de Ecobac, ciudadanos comentaron haber visto a la ballena dos días antes en el mismo lugar, descansando. «Este comportamiento inusual nos hace estar seguros de que el animal sí fue atropellado muy cerca de esa zona», narra Frisch Jordan.
El golpe que sufrió Lucky fue tan fuerte que tuvo que ser percibido por el conductor y los pasajeros: «cualquier embarcación que golpea a una ballena así, tuvo un daño, porque chocar con una ballena es como chocar contra un muro de contención».
Temporada vacacional aumenta el riesgo de colisiones
Las colisiones con fauna son un problema que se da en todo el océano y que se evidencia en zonas turísticas, sobre todo en temporadas vacacionales cuando se concentra una gran cantidad de embarcaciones.
«Aunque es un problema todo el año, en invierno nos visitan muchísimas embarcaciones y definitivamente el problema crece esta temporada del año, no solo por las ballenas, sino para las tortugas y las mantarrayas.»
Al igual que con el tráfico terrestre, la mejor recomendación para evitar accidentes es reducir la velocidad o llevar a un vigía en la proa, si por alguna circunstancia es necesario conducir a alta velocidad.
La asociación Ecobac ha lanzado la campaña Menos Velocidad = Más Vidas con la que pretende crear conciencia del problema en Puerto Vallarta y Los Cabos.
Los prestadores de servicios observación de ballenas
La investigadora Rosa María Chávez Dagostino del Centro Universitario de la Costa (CUCOSTA) estudia a los prestadores de servicios turísticos de la región y confirma lo dicho por Ecobac: diciembre es un mes riesgoso para las ballenas.
Explica que, tanto embarcaciones menores o mayores buscan acercarse a las ballenas para complacer a los turistas, pero sobrepasan los límites. “Los turistas generalmente quieren ver muchas ballenas, aunque también tienen interés por aprender sobre la vida y el contexto en donde viven. Pero, lo más importante es ver ballenas, y lo más cerca posible”.
La norma establece que las embarcaciones no deben cortar el paso a la ballena, acercarse por los lados o de frente o perseguirlas. Otro factor de riesgos es exceder el número de embarcaciones que podría ocasionar accidentes.
“Cuando hay mucho tráfico, y no sólo de las embarcaciones que ven ballenas, sino de otras embarcaciones, pues incrementa el riesgo de colisiones para las ballenas”, dijo la investigadora.
En Bahía de Banderas hay alrededor de 200 embarcaciones que prestan servicios turísticos para la observación. Sin embargo, no todas tienen permiso para ese fin. De acuerdo con Chávez de Agostino, en los cuatro meses que dura la temporada se registran en promedio 920 viajes donde algunas embarcaciones, las más pequeñas, pueden hacer hasta cinco viajes por día.
Un gran biodiversidad conlleva una gran responsabilidad
Las especies que visitan la bahía traen ingresos económicos importantes a la región pero también requieren acciones responsables para conservalas. Aquí es donde pueden intervenir los gobiernos locales a pesar de que el mar es un territorio federal.
Para Astrid Frisch, el primer paso es crear campañas de difusión porque las personas no tienen idea de los efectos de navegar a alta velocidad. Además, los ayuntamientos de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas podrían promover canales de navegación lenta ante el gobierno federal o simplemente exponerle el problema.
Cada vez más frecuentes los accidentes con megafauna en Bahía de Banderas
Las heridas por embarcaciones no son nuevas. En 2007 se documentó cómo una embarcación embistió a una cría de ballena en Bahía de Banderas. Luego, en enero de 2009, se registró un nuevo incidente en la misma área. En enero de 2024, el Grupo de Investigación de Mamíferos Marinos A.C. (Grimma) documentó cicatrices de propelas en los lomos de crías y de ballenas longevas en las costas de Nayarit.
Este 2024 otras asociaciones civiles que trabajan en la Bahía de Banderas han registrado tortugas golfinas y mantarrayas con heridas de colisión, por lo que organizaciones como Manta Pacific México han planteado la necesidad de crear un plan de ordenamiento que regulen el tráfico maritímo, sin embargo el tema no ha captado el interés de las autoridades que, contrario a lo que manifiestan expertos y activistas, impulsan proyectos turísticos para acrecentar el tránsito de embarcaciones.
Observa ballenas con touroperadores autorizados
La temporada para avistar ballenas en la región termina el 23 de marzo, si estás interesado en vivir esta experiencia Ecobac recomienda buscar prestadores de servicios autorizados por Semarnat pues esto garantiza que cuentan con la capacitación y sensibilidad para observar ballenas sin molestarlas y ponerlas en riesgo. Estas embarcaciones portan una bandera o puedes pedirles que muestren sus permisos en papel pues en ocasiones la autoridad ambiental se retrasa en la entrega de este distintivo.
La NOM-131 para la observación segura de ballenas
De acuerdo con la NOM-131-SEMARNAT-2010 hay lineamientos para la observación, protección y conservación del hábitat de las ballenas.
La norma establece un principio precautorio para proteger el medio ambiente, peligro de daño grave o irreversible de acuerdo con el principio 15 de la Declaración de Río sobre Medio Ambiente y Desarrollo, para evitar posibles lesiones producidas por colisiones con embarcaciones, especialmente aquellas producidas por las propelas.
Entre los lineamientos de la NOM-131-SEMARNAT-2010 se establece que, para la observación, sólo se permitirá la presencia de cuatro embarcaciones en torno de una misma ballena o grupo.
La distancia mínima de observación, aplicada entre cualquier embarcación y la ballena o grupo, dependerá del tamaño de la embarcación y la especie. Las embarcaciones menores deben guardar una distancia de 60 metros, y las medianas y mayores, 80 metros.
Este caso deberá seguirse para la ballena jorobada, rorcual jorobado, yubarta (Megaptera novaeangliae) que prefiere este sitio durante el invierno. Para el resto del país, la norma aplica para la Eubalaena japónica, Balaenoptera acutorostrata, Balaenoptera borealis, Balaenoptera edenii; Balaenoptera brydei, Eschrichtius robustus y cachalote, a Physeter macrocephalus.
En el caso de la observación de la ballena azul o rorcual gigante (Balaenoptera musculus) y la ballena de aleta o rorcual común (Balaenoptera physalus) la distancia incrementa en 100 metros para las embarcaciones menores, y 120 las medianas y mayores. En todos los casos, la distancia de espera es de 240 metros.