Texto y Foto: Amapola Periodismo
Viernes 11 de octubre de 2024
Chilpancingo
Un retén del Ejército y la Guardia Nacional (GN) se instaló en la salida norte de Chilpancingo en dirección hacia Petaquillas, poblado al que, según la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPC), se dirigió solo este domingo 6 el presidente municipal Alejandro Arcos Catalán, que después apareció decapitado.
El puesto de revisión se instaló desde el miércoles 9, casi frente al cuartel de la Guardia Nacional, en la carretera federal Chilpancingo-Acapulco.
La versión del titular de la SSPC, Omar García Harfuch, establece que Alejandro Arcos, asesinado el domingo pasado, acudiría a una «reunión específica» al poblado de Petaquillas, sin seguridad.
El retén del Ejército y la GN se instaló a unos tres kilómetros de Petaquillas, comunidad que las autoridades aseguran se halla bajo control de un grupo del crimen organizado.
Los militares y la GN detienen a los automovilistas y les piden que se identifiquen, los interrogan acerca de su destino y revisan sus vehículos.
En un comunicado de la comandancia de la IX Región Militar y la 35 Zona Militar se informa que a partir de este 7 de octubre, en Chilpancingo están desplegados 280 efectivos del Ejército y de la Guardia Nacional.
«Esto es con la finalidad de reforzar el actual despliegue operativo que mantiene el personal militar en esta entidad federativa e inhibir las actividades de la delincuencia organizada», dice.
«Estos efectivos tienen la misión de colaborar estrechamente con las autoridades locales y disminuir los índices delictivos mediante acciones conjuntas que permiten contribuir a la preservación del orden y la paz pública», asienta el comunicado.