La ciudadanía reclama a la gobernadora Evelyn Salgado su inacción para evitar el asesinato
Texto: Jesús Guerrero
Foto: Redes
Domingo 23 de junio de 2024
Chilpancingo
El cuerpo del presidente municipal de Malinaltepec, Acasio Flores Guerrero, que el jueves 20 de junio fue asesinado, es velado en su domicilio, en medio de protestas de la ciudadanía que exige al gobierno de Evelyn Salgado Pineda que se haga justicia.
La noche del sábado 22, el cadáver de Acasio Flores llegó en una carroza a su casa en Malinaltepec; y la gente que lo estaba esperando lanzó gritos en demanda de justicia.
También se oyeron reclamos de la ciudadanía contra la mandataria estatal Evelyn Salgado por no haber hecho nada para lograr que los sujetos armados que lo tenían retenido en la colonia La Guadalupe lo dejaran en libertad y evitar su asesinato.
Ei viernes 21, el cadáver del alcalde fue hallado en la batea de su camioneta, que sus victimarios abandonaron en la carretera Tlapa-Marquelia, cerca de La Guadalupe; y fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) de Chilpancingo para la necropsia de ley; posteriormente, fue llevado en una carroza a Malinaltepec.
Este lunes 24 de junio, se le hará un homenaje póstumo en el ayuntamiento y luego será sepultado en el panteón de esta localidad de la región de la Montaña de donde era originario.
De acuerdo con los reportes oficiales, Acasio Flores tenía un orificio de bala en la cabeza.
Como ya publicó Amapola, Periodismo Transgresor, el jueves 20 de junio, Acasio Flores y cuatro trabajadores del ayuntamiento acudieron a varias comunidades para inaugurar obras sociales, entre ellas, La Guadalupe, anexo al ejido comunal de Atlacatzala, que desde hace 50 años enfrenta un conflicto agrario de tierras con Malinaltepec.
Por ese motivo, el 1 de noviembre de 2020, se registró un enfrentamiento armado entre los dos grupos de comuneros, en el que tres personas murieron y cinco resultaron heridos, los ocho de Alacatlatzala.
Cuando se dio este enfretamiento, el comisariado de Bienes Comunales de Malinaltepec era Acasio Flores.
«Fue un error que el alcalde Acasio Flores haya acudido a La Guadalupe, ya que sabía que no lo querían; pero se confió, porque ya había ido anteriormente y no le pasó nada», comentó una fuente del gobierno estatal.
Bellarina Bernardino Arzate, esposa del alcalde asesinado, reiteró que el gobierno del estado no atendió con prontitud el caso; y por su inacción provocó el asesinato del primer edil.
Durante los hechos del jueves 20 en La Guadalupe, los asesinos delaron en libertad a los cuatro trabajadores del ayuntamiento y al chofer de Acasio Flores, aunque también los golpearon.
Al presidente municipal lo retuvieron y ese mismo día por la tarde, lo asesinaron.
Pero el gobierno del estado, a través del subsecretario de Asuntos Políticos y Sociales de la Secretaría General de Gobierno, Francisco Rodríguez Cisneros, aseguró que los que estaban retenidos por los pobladores era «la avanzada» del edil, no él.
Bellarina Bernadino denunció que durante más de un día, el gobierno del estado la estuvo engañando que su esposo seguía con vida y que estaban negociando su libertad.