Texto y foto: Alberto Ramírez
12 de marzo del 2024
Chilpancingo
Los árboles de roble rosa son usados comúnmente en las ciudades para embellecer las calles con sus hojas durante la temporada de lluvias y con sus llamativas y coloridas flores en la temporada de sequías.
Las flores de este árbol, como su nombre lo indica, son color rosa en todas sus tonalidades hasta llegar a un color blanco y tienen forma de pequeñas campanas. En psicología, el color rosa se asocia a la calma, a la tranquilidad, a la ternura y al amor. Los robles rosas cuando florean transmiten esa sensación de tranquilidad que es imposible conseguir en las grandes ciudades.
Su nombre científico es Tabebuia rosea y puede llegar a medir de 15 hasta 30 metros de altura y de diámetro hasta 1 metro.
De acuerdo con la doctora Natividad Herrera Castro, directora del Herbario de la Universidad Autónoma de Guerrero ( Uagro), en la ciudad de Chilpancingo, este árbol tiene una función ornamental, es decir, fueron plantados para embellecer la ciudad.
Una característica del roble es que sus raíces no salen a la superficie como lo hacen las de otras especies de árboles que rompen el pavimento.
Esta especie la reproducen en viveros y tiene la capacidad de crecer donde quiera que la planten, por lo que no se clasifica en peligro de extinción o en alguna otra categoría de riesgo.
Pierden sus hojas antes de iniciar con su floración. Las flores se pueden observar a partir del mes de febrero hasta junio, con este proceso anuncian el acercamiento de la primavera en la ciudad de Chilpancingo y muchos lugares más del país y de América Latina.
Los usos principales que le dan al árbol de roble rosa son, aparte del ornamental, para carpintería, leña, para fabricar algunos instrumentos musicales, entre otros.
El roble rosa es una especie que podría utilizarse en plantaciones comerciales y sería un gran éxito, además tiene potencial para reforestación productiva en zonas degradadas de selva.
El ingeniero forestal Gabriel Pintor Alcaraz, egresado de la Universidad Autónoma de Chapingo, mencionó que este árbol también es utilizado en algunos lugares, principalmente en comunidades, para aliviar la disentería, diarrea, calentura y para acelerar el parto. La infusión de las hojas se utiliza como febrífugo (para aliviar la fiebre). La corteza cocida sirve para la diabetes, paludismo, tifoidea, parasitosis. Sin embargo, no está comprobado científicamente que sea eficiente, solo es usada de forma empírica.
Pintor Alcaraz comentó que este árbol es una especie que produce abundante regeneración por lo tanto sugirió a las personas que lo utilizan para algún fin económico, que si cortan algunos de esos árboles cuiden que la regeneración no sea dañada y si se puede mejor que cambien el uso a ornamental ya que son especies con floraciones bastantes llamativas.
En los últimos años en la ciudad de Chilpancingo se han visto cientos de árboles alrededor de la capital, una de las calles que más árboles de roble rosa tiene es la avenida Miguel Alemán, la que por esta temporada está llena de flores.
En esta calle se plantaron decenas de árboles de roble rosa para que cumplieran la función ornamental. Llevan en esa avenida alrededor de siete años. Fueron plantados a finales del año 2016. Más árboles de esta especie se visualizan por el río Huacapa y en otros puntos de la ciudad.