María José no entiende el por qué nadie quiere decirle qué pasó con su esposo, José Luis Valle Soto, quien fue desaparecido el 5 de septiembre de 2023 en la colonia La Moraleja en Zapopan. En su búsqueda, ella le ha entregado a la Fiscalía de Jalisco toda la información que le ha sido posible, pero a cambio sólo ha recibido nulos resultados.
Texto: Darwin Franco/Zona Docs
Foto: Zona Docs
16 de febrero del 2024
José Luis Valle Soto salió de su casa en la colonia La Moraleja para realizar un trabajo. Él es contratista y aquel 5 de septiembre de 2023 partió en su carro para realizar una cotización a un domicilio ya conocido; sin embargo, nunca llegó a éste.
Aquel día, una tormenta azotó al municipio de Zapopan; por ello, su esposa María José no pudo buscarlo inmediatamente. José Luis siempre se mantenía en comunicación con ella, pero ese día su celular no conectaba.
María José pensó que la incomunicación era a causa de la tormenta, pero no era así. A José Luis lo habían privado de su libertad: ¿Cómo pasó esto?
Las autoridades, a la fecha, no saben qué pasó, pues resulta que esa noche ninguna de las cámaras de seguridad del sistema C5 (estatal) o las C3 (municipal) colocadas sobre la Avenida Juan Gil Preciado, no sólo no funcionaron correctamente, sino que además, aseguran las autoridades, no captaron ninguna conducta que pudiese considerarse delictiva.
“Para ser honesta, realmente me siento muy frustrada. Me siento muy desesperada… con esa impotencia de no poder hacer más de lo que realmente se puede hacer por él, ya que al acudir a la Fiscalía me comentaron que las cámaras del C5 dieron negativas… ahora resulta que ninguna cámara captó a mi esposo… así que, entonces, es como si literalmente se lo hubiera tragado la tierra”, precisa María José.
La falta de acciones de parte de la Fiscalía Especial en Personas Desaparecidas, ha llevado a María José -como pasa en la mayoría de los casos- a encabezar ella misma la búsqueda. Esto lo hizo desde el inicio, pues un día después de que fuera desaparecido José Luis, ella salió a buscarlo, pero lo único que encontró -a 15 minutos de su casa- fue el auto en que su esposo salió de casa.
“Yo encontré el coche como unos 12 o15 minutos aproximadamente caminando de aquí de la casa. Lo encontré en la calle Begonia Villa de las Lomas en Zapopan.Estaba ahí literalmente estacionad, la verdad cuando lo vi empecé a gritarte José Luis dónde estás este entré como en un estado de shock”.
Al preguntar a las y los vecinos de la zona se enteró que el carro fue dejado ahí por varios hombres, quienes lo empujaron para después fugarse en una camioneta. Esto también quedó videograbado, pero es tiempo que en Fiscalía no le da razón de quiénes eran esos hombres y de qué rumbo tomó la camioneta en la que se fueron quienes ella cree que se llevaron a su esposo.
“Yo reporté todo eso a la Fiscalía, y a los pocos días vinieron los peritos a levantar huellas, pero a la fecha tampoco me han dicho qué salió de eso… no tengo absolutamente nada de lo que vinieron a hacer”, explica María José.
Lo que tampoco tiene es acceso a la sábana de llamadas, lo que para a ella resulta más que importante porque así podría saber, por ejemplo, qué llamadas recibió o hizo José Luis, pero aún más relevante: “cuál fue la última ubicación que registró su celular”, pues queda claro que no fue el lugar donde encontró el carro, pues quienes lo dejaron ahí, no llegaron al lugar con su esposo.
A más de cinco meses de la desaparición de José Luis, lo que María José desea es que le den avances concretos, pues considera que “nadie desaparece así como arte de magia”. Ella desea que le digan qué resultados dieron los peritajes, desea que le expliquen qué trayectoria pudo haber tomado su esposo luego de ser llevado por estos hombres y, lo más importante, qué pistas concretas hay para localizar a José Luis.
“Lo que realmente exijo es que me digan lo que realmente pasó con mi esposo, ya que parece que literalmente se lo comió la tierra claro. Quiero que me digan qué se ve realmente en esas cámaras, pues no creo que no se haya registrado nada… ahora resulta que literalmente la luna fue la única testigo de lo que le pasó a José Luis”.
María José hoy forma parte del Colectivo Luz de Esperanza, participa en sus acciones y marchas como la que se realizó, el pasado 14 de febrero. Es consciente de que la crisis de desapariciones es grande y de que la demanda de atención es mucha, pero lo que no se puede explicar es el por qué en todos los casos no hay ningún resultado.
“Yo no busco culpables solamente quiero a mi José Luis de vuelta”, concluye María José.