Texto: Jesús Guerrero
Foto: Óscar Guerrero
Chilpancingo
14 de noviembre del 2023
Familias de la colonia La Poza afectadas por el huracán Otis recibieron enseres domésticos de parte del gobierno federal pero algunos artículos como el refrigerador, la licuadora y el ventilador no podrán utilizarlos a la brevedad porque en sus casas siguen sin suministro de luz eléctrica.
«No tenemos luz, agua y comida. Hay un comedor, pero mucha gente ni va», dice María Nogueda, vecina de La Poza, quien hizo fila para recibir sus enseres domésticos.
Las familias de La Poza, colonia ubicada por el aeropuerto internacional Benito Juárez, en Acapulco, empezaron a llegar a la calle El Pino, desde las siete de la mañana, para recibir su refrigerador, estufa, colchón, licuadora, ventilador y vajilla, parte de los apoyos que entrega desde hace una semana el gobierno federal a los afectados por Otis.
Con el papelito del censo en la mano que les entregó un servidor de la nación de la Secretaría del Bienestar las mujeres se formaron en la fila y como muchas de ellas se percataron de que la espera sería larga se llevaron un banquito o una silla para descansar mientras llegaba su turno.
Varios camiones del Ejército llegaron con la carga de los enseres domésticos.
«A ver hoy solamente vamos a entregar los paquetes (enseres domésticos) a los de la colonia La Poza y a los rezagados y los demás que estén aquí se les avisará el día les tocará su turno», le gritó a la gente un militar que iba acompañado por varios servidores de la nación.
En la estrecha calle había una fila de unas 300 personas y a las 11 de la mañana los militares dijeron que solamente entregarían 40 paquetes.
Mujeres de las colonias Las Delicias, Alfredo B. Buenfil y de la comunidad de Barra Vieja llegaron desde las siete de la mañana para recibir sus enseres domésticos, pero se fueron con las manos vacías después de esperar tres horas bajo el sol.
«Oiga, no es justo. Yo aquí traigo mi censo y me citaron para hoy», le dice una señora de la colonia Las Delicias a una mujer del grupo de los servidores de la nación.
Casi a las 12 del día termina la entrega de 40 paquetes de electrodomésticos a los afectados por Otis de la colonia La Poza donde viven tres mil familias, según María Nogueda.
A los que sí se les entregó su refrigerador, estufa, licuadora, colchón y vajilla tuvieron que alquilar un diablito o una camioneta para llevarlos a su casa.
El alquiler de un diablito para llevar el refrigerador y la estufa era de cien pesos.
Algunos hombres que acompañaron a su esposa o a su mamá para recoger el paquete de artículos electrodomésticos cargaron en hombros el colchón, refrigerador o estufa.
Aunque otras familias afectadas alquilaron una camioneta para que les llevaran su mobiliario.
Un joven de la colonia Arroyo Seco, ubicada al otro extremo de Acapulco, acudió a la colonia La Poza para ayudar a su mamá con el traslado de sus enseres domésticos.
«Allá en mi colonia de Arroyo Seco nos fue muy mal aunque apenas hace tres días nos llegó la luz, pero seguimos con muchas carencias como el agua», dijo el joven.
María Nogueda llegó desde las siete de la mañana y trajo su silla en espera de que la nombraran para que recogiera el apoyo.
La gente calculó que los cinco artículos tienen un costo de alrededor de 12 mil pesos.
«Seguro esos refris y estufas el gobierno las compró en Elektra o Aurrerá porque los dueños de esas empresas son amigos del presidente Andrés Manuel López Obrador», dijo uno de los afectados por el huracán Otis.
María Nogueda se ríe cuando se acuerda que por el momento no podrá utilizar el refrigerador y la licuadora que le dio el gobierno porque en la colonia La Poza, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) no ha reconectado el suministro de energía eléctrica.
Aunque el gobierno de López Obrador y la gobernadora Evelyn Salgado Pineda han dicho que en Acapulco ya casi está al cien por ciento con la reconexión de luz eléctrica, hay zonas incluso del centro de este puerto que se quejan de que en sus domicilios les llega el servicio un momento, pero luego se va.
La colonia La Poza es una demarcación que antes de que se fundara la exclusiva zona Diamante (durante el gobierno de Carlos Salinas, hace más de 30 años) estaba constituida por grandes extensiones de huertas y sembradíos de cultivos básicos como maíz y frijol.
«Antes de que el gobierno fundara zona Diamante esto eran solo huertas y manglares pero todo esto se devastó y por eso cada vez que hay una lluvia medio fuerte se inunda todo», dijo uno de los habitantes de La Poza.
Doña María Nogueda dice que ella vivió lo del huracán Paulina, la tormenta tropical Manuel y el huracán Ingrid y que las consecuencias no fueron tan devastadoras como Otis.
«Yo sentía que me moría», recuerda María la noche del martes 24 de octubre, cuando los vientos y la lluvia arreciaba en todo Acapulco.
De acuerdo con la versión que dio un mando militar, los paquetes de enseres domésticos ya se están repartiendo en distintas colonias y fraccionamientos de esta zona de Acapulco.
A 20 días del paso del huracán Otis, en esta zona de Acapulco, se nota el movimiento de trabajadores de la CFE y ambulancias médicas de la Secretaría de Salud.
Sin embargo, en cada cuadra aún hay postes, árboles o espectaculares tirados, así como basura acumulada en banquetas y calles.
«Aquí ya llegó la luz, pero cada rato se va», cuenta un vecino de la colonia Luis Donaldo Colosio en cuya entrada hay un gran charco de aguas de drenaje.