Texto: Itzel Urieta
Fotografía: Oscar Guerrero / Archivo
Chilpancingo
Vecinos de la colonia 1 de Mayo denunciaron que autoridades estatales pretenden demoler 10 viviendas que están en una zona de riesgo ocasionado por el deslave de la barranca La Lobera, el 4 de mayo pasado, sin un plan para alguna reubicación temporal o definitiva.
Petra Hipólito Vélez, una de las vecinas afectadas, contó en entrevista que hoy por la mañana personal de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil acudieron a la zona afectada a levantar un censo determinar las condiciones de las viviendas y confirmar su demolición.
«Vinieron a hacernos una encuesta y después sólo nos dijeron que van a demoler las casas, pero no nos dijeron fechas o tiempos, sólo que probablemente esta semana o la otra comience la demolición», dijo Hipólito Vélez.
Comentó que no todos los vecinos están de acuerdo con la demolición de sus viviendas, en su mayoría porque las autoridades no les proponen un plan de reubicación, ya sea temporal o permanente.
Son 10 familias afectadas que el 5 de mayo fueron evacuadas de sus viviendas después del desgajamiento de la barranca La Lobera.
A tres meses del derrumbre y ya con la temporada de lluvias, los vecinos se consideran abandonados por las autoridades.
«Con las lluvias el cerro se sigue yendo, avanza más y aquí en mi casa eso se nota, cada vez se cuartea más y las autoridades no ven eso, en mi caso si se demuele yo no tengo otro lugar a dónde ir», dijo Hipólito Vélez.
Los vecinos saben que mañana el titular de la Secretaría de Protección Civil estatal, Roberto Arroyo Matus, visitará el asentamiento para explicarles a los afectados la situación de sus viviendas.
Hipólito Vélez llamó a las autoridades a que los apoyen, porque desde hace mes y medio el Ayuntamiento de Chilpancingo les retiró la seguridad y el apoyo para alimentación.
La barranca La Lobera fue declarada zona de alto riesgo por un derrumbe ocurrido la madrugada del 5 de mayo pasado.
Hipólito Vélez fue evacuada de su vivienda la mañana del 5 de mayo, después del desgajamiento de la barranca acabó por derrumbar una casa y un auto que estaban en sus márgenes.
Su vivienda se mantiene en pie, pero la mitad flota sobre la nada y sólo se sostiene de una ladera de La Lobera que aún no está desgajado.
El Ayuntamiento de Chilpancingo instaló un refugio temporal para las 100 personas afectadas, el cual después de un mes fue cerrado por órdenes de la alcaldesa, la morenista Norma Otilia Hernández Martínez.
Hipólito Vélez al no contar con el recurso para rentar una vivienda regresó a su casa donde permanece hasta ahora, a la espera de un apoyo de las autoridades, pero con la inseguridad de que su casa caiga.