Aumenta el calor malos olores en el río Huacapa que está sin mantenimiento, denuncian vecinos

Texto: José Miguel Sánchez

Fotografía: Oscar Guerrero

Chilpancingo

El encauzamiento del río Huacapa, que cruza de norte a sur la ciudad de Chilpancingo, en muchas partes no tiene mantenimiento y por la falta de lluvias genera malos olores que pueden causar daños a la salud de las personas que viven a los alrededores.

«Lo único que podemos hacer es aguantarnos esos malos olores, no nos queda de otra», mencionó Juan Carlos Cruz Damian, quien vive en la colonia Galeana, en los márgenes del río Huacapa.

A esta altura del encauzamiento está completamente seco, sólo un pequeño hilo de agua corre por el lugar, pero los malos olores son intensos. Carlos comentó que ya disminuyó, pero aún son intensos.

«Todavía hace como 15 días que estaba eso de la ola calor, el olor a aguas residuales era muy perceptible, varios vecinos y sus niños resultaron enfermos que de diarrea y, según les dijeron en el Centro de Salud, fue por el calor y estar expuestos a lugares contaminados», dijo Carlos.

A la altura de la colonia Galeana viven alrededor de 20 familias en los márgenes del Huacapa, en este punto ya no hay calles pavimentadas ni circulación de vehículos; los únicos accesos son puentes de metal y otros más rústicos, de madera, los que conectan ambas orillas.

De acuerdo con Carlos, en este punto del Huacapa la ollas de drenaje funcionan de manera correcta, es decir, no hay una descarga directa de aguas residuales al encauzamiento, pero eso no impide los malos olores.

Río arriba, al norte de Chilpancingo, a la altura de la colonia El Amate, la situación es mas complicada; ahí el Ayuntamiento de Chilpancingo no desasolva el encauzamiento, lo que ya género que en su interior creciera pasto y pajón.

«Luego con las lluvias se estanca el agua y tenemos que lidiar con los zancudos, el dengue y el chinkungunya; ya hicimos la solicitud que vinieran a limpiar pero si no viene el municipio lo terminaremos haciendo nosotros, al final nos afecta directamente a nosotros, no a ellos», mencionó un vecino de El Amate.

Hacia el sur de la ciudad la situación del encauzamiento presenta otras dificultades que se suman a que el río fuera convertido en un drenaje a cielo abierto.

En la colonia Juan N Álvarez, a la altura del centro de Chilpancingo, comienza los problemas generados por el olor, a partir de aquí varias ollas de drenaje colapsaron en 2013 por la tormenta tropical Manuel y el huracán Ingrid, desde entonces las aguas residuales son vertidas de manera directa en el encauzamiento.

Ana, quien tiene su vivienda en la colonia Juan N Álvarez, mencionó que del río emanan olores fétidos que se agudizan cada abril y mayo por el calor.

Pero reconoce que la falta de lluvias y el calor más fuerte de esta temporada aumentó los malos olores todavía hasta este mes.

«Creo que en toda mi vida jamás vivimos una situación así, ya el olor era insoportable, ahorita que ya llovió aunque sea un poco y bajo el calor ya medio se controló, pero fueron 15 días en los que nos tocó aguantar el olor y, pues, de las autoridades nadie nos daba una solución», dijo Ana.

El encauzamiento del Huacapa tiene siete kilómetros que inician en la colonia San Rafael Norte y concluye en el Fraccionamiento La Cinca.

La esperanza de los vecinos son las lluvias para que mitigue o minimice los malos olores.

Aun cuando desde el fin de semana pasado la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de Guerrero anunció lluvias para Chilpancingo, aún no son constantes.