Texto: Itzel Urieta
Fotografía: Cortesía, Unidad Canina de la Secretaría de Protección Civil
17 de abril del 2023
Chilpancingo
Hanna era una Golden Retriever color oro, nació en abril de 2015 y formaba parte de la Secretaría de Prevención de Riesgos y Protección Civil del estado, su labor era ayudar a niños y niñas con caninoterapia, el sábado falleció.
De acuerdo con su cuidador y encargado de la Unidad Canina de Protección Civil, Abel González Vázquez, Hanna fue parte del equipo de canes dedicados a la atención psicológica, principalmente de niños, niñas y adolescentes.
Hanna no era una canina de rescate, ella apoyaba emocionalmente a niños con autismo y durante su vida apoyó a diferentes instituciones, como el DIF y el Centro de Rehabilitación Integral Guerrero (CRIG).
«Ella (Hanna) inició con mi ex compañero Marco Antonio Ortega González, quien inició este proyecto y que lo hemos mejorado con capacitaciones en la Asociación Internacional de Formación y Capacitación de Adiestradores de Perros (AIFCA)».
Después de la pandemia, Hanna acompañó a 100 niños, niñas y adolescentes que sufrieron estrés por el encierro a causa del confinamiento. Apoyó a infancias y adolescentes en municipios como Huamuxtitlan y Cochoapa el Grande, en la Montaña de Guerrero y Zihuatanejo, Costa Grande.
«A veces el paciente llega a mostrar cambios de comportamiento, por ejemplo, los niños que tienen autismo llegan a presentar agresiones a lo cual Hanna lo aceptaba y lejos de agredir ella abraza a la persona, se acercaba y la mimaba», contó González Vázquez.
Hanna estuvo junto con González Vázquez por cuatro años, tiempo en el que también tenía designada una persona para sus cuidados generales: alimento, aseo y paseos.
González Vázquez informó que fue una de las más destacada para el trabajo de caninoterapias; su temperamento amigable y dócil le permitió mantenerse quieta ante pacientes que llegaron a agredirla.
Al parecer ella entendía la situación de las demás personas, porque aun cuando los pacientes respondían con agresiones nunca respondió de manera violenta.
La tarde del sábado presentó complicaciones respiratorias y después de una atención médica, murió alrededor de la medianoche. Tenía siete años.
Para rendir homenaje a Hanna, la tarde de ayer domingo, personal de la Secretaría de Protección Civil rindió un homenaje de cuerpo presente en el que hubo un minuto de aplausos.
Hanna, finalmente, dentro de un pequeño ataúd fue sepultada en el patio de las instalaciones de la Secretaría de Protección Civil, al sur de Chilpancingo.
Durante el homenaje, los entrenadores caninos de Protección Civil mencionaron que Hanna fue una de las perras más fáciles de entrenar, porque desde su nacimiento fue muy obediente.