Los padres de los 43 volverán a las búsquedas en Iguala. Hoy se cumplen seis años con cinco meses de la desaparición de sus hijos
Texto: Amapola Periodismo
Fotografía: Franyeli García y José Luis de la Cruz / Archivo
26 de febrero del 2021
Chilpancingo
Este siguiente mes de marzo, los padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa vuelven a la zona Norte de Guerrero a buscar a sus hijos. Será como al principio, preguntando a las personas si tienen alguna información.
Hace uno días, los padres y madres ya hicieron un primer ejercicio durante una protesta en la caseta de Palo Blanco de la Autopista del Sol: entregaron volantes a los usuarios de ese servicio carretero y les dijeron que cualquier dato o indicio que sepan de sus hijos se comuniquen con ellos.
Clemente Rodríguez Moreno, padre de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, comentó que todos los padres y madres se trasladarán a Iguala para realizar búsquedas y pedir información a la ciudadanía. “Quien sea que nos dé información sobre nuestros hijos”, menciona.
Hoy se cumplen seis años con cinco meses de los hechos de Iguala en donde desaparecieron a los 43 jóvenes, incluido su hijo, y donde asesinaron a tres más.
Vidiulfo Rosales Sierra, el abogado de los padres, informó que el recorrido de búsqueda será por al menos por tres días y que incluye Iguala, Cocula, Huitzuco y Tepecuacuilco.
En los últimos tres municipios, según los informes de la FGR, es donde se han intensificado las labores de búsqueda oficiales de los 43 normalistas en los últimos dos años.
La FGR señala que en esos cuatro municipios es donde operaba con mayor fuerza el grupo criminal de los Guerreros Unidos, que junto con autoridades estatales, municipales y federales, son los responsables de los hechos del 26 y madrugada del 27 de septiembre del 2014, es decir, la noche en que desaparecieron a los muchachos.
Clemente y Vidulfo comentaron que en la reunieron que tuvieron la semana pasada con el presidente Andrés Manuel López Obrador en Palacio Nacional ellos, los padres en general, le pidieron que en su visita a Iguala por el Día de La Bandera se pronunciara por el caso Ayotzinapa.
Lo hizo en la ceremonia del Bicentenario del Plan de Iguala, celebrado el pasado 24 en el cerro de el Tehuehue. “Estuvo bueno el discurso (de Obrador). Así casi exacto fue lo que le sugerimos que dijera”, dijo Rosales Sierra.
López Obrado, acompañado por el presidente de Argentina, Alberto Fernández, dijo que Ayotzinapa sigue siendo una espina clavada en su gobierno, y refrendó su compromiso de buscar la verdad y hallar a los 43 jóvenes.
Rosales Sierra dijo que le gustó que López Obrador se refiriera a uno de la dinastía de los Figueroa (Ambrosio) como uno de los principales integrantes del grupo de conservadores durante la época de la Revolución de 1910.
En aquella época, Ambrosio Figueroa Mata era gobernador de Guerrero y mandó fusilar a su opositor Salustio Carrasco Núñez, el 14 de febrero de 1912, en Iguala.
Figueroa Mata es pariente de los ex gobernadores Rubén Figueroa Figueroa y su hijo Rubén Figueroa Alcocer, ambos acusados de masacres y todo tipo de actos de represión contra la población civil de esta entidad.
“El conservadurismo echó raíces y se ha mantenido hasta nuestros días en México y aquí en Guerrero”, dijo Obrador el pasado miércoles en el acto.
En el mismo contexto del acto oficial protestaron también los familiares de José Luis Abarca Velázquez, quien era alcalde de Iguala cuando policías municipales, estatales y, al parecer, militares, en coordinación con un grupo criminal, desaparecieron a los 43 estudiantes normalistas. Pidieron al presidente Andrés Manuel López Obrador la revisión del expediente que mantiene al ex alcalde y a su esposa, María de los Ángeles Pineda, en la cárcel.
En el ex alcalde recae la acusación popular unánime de la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa. Es una acusación popular porque él y su esposa judicialmente están acusados de delincuencia organizada, no por la desaparición de los 43.
En la reunión que tuvieron los padres la semana pasada en Palacio Nacional con López Obrador, éste les informó sobre más detenciones de ex policías municipales, federales y militares.
Además de que enviaron otros 16 restos óseos a la Universidad de Innsbruck, Austria para que se analicen. Estos restos óseos fueron hallados en las cercanías de el basurero en Cocula.
“Los estudios van a determinar si se trata o no restos de los jóvenes”, agregó Rosales Sierra.
En esta nueva faceta de búsqueda, Clemente recordó que existe una recompensa a quien dé información del paradero de los muchachos y es para quien sea. Lo expone a propósito de que comenzarán a recorrer sitios de zona Norte para recabar información.
Esa recompensa la ofrece el gobierno federal. “Nosotros no tenemos dinero para pagarla (la recompensa). La verdad es una buena cantidad de dinero, pero no podemos decir el monto”, comentó.
Hace un tiempo la Unidad de Investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) del caso Ayotzinapa le entregó a Clemente un dictamen que establece que un hueso hallado en la barranca de la Carnicería en Cocula corresponde a su hijo Christian, pero él contestó que eso no es determinante para creer que su hijo esté muerto. Clemente seguirá buscado hasta saber qué pasó con Christian y el resto de los muchachos.