Texto: Amapola Periodismo
Fotografía: Salvador Cisneros
6 de octubre del 2020
Chilpancingo
Debido a que autoridades de los tres niveles de gobierno les incumplieron con la realización de obras, habitantes de 33 comunidades de los municipios de Heliodoro Castillo y San Miguel Totolapan acordaron impedir que el Ejército destruya sus plantíos de amapola, porque es el único medio de sobrevivencia económica que tienen.
En un documento fechado el 7 de junio pasado, pero que se leyó este domingo en la comunidad de Los Capulines, municipio de Heliodoro Castillo, los comisarios de los 33 pueblos de la Sierra dieron un plazo de 15 días al gobierno para que cumpla con las obras, de lo contrario realizarán protestas.
Las autoridades de esas comunidades hicieron llegar un video a los medios de comunicación, en ?el que leen este comunicado.
Los comisarios, reunidos en una cancha deportiva techada, determinan que en caso de que no haya respuesta positiva de las autoridades bloquearán carreteras.
Uno de los que se identifica como comisario propone que el bloqueo sea en la vía federal Acapulco-Zihuatanejo, a la altura de la «Y», en de Atoyac de Álvarez.
El mismo comisario plantea que otro cierre sea en la carretera federal Chilpancingo-Iguala, a la altura del punto conocido como Casa Verde.
«Desde el año anterior nos han venido haciendo tontos de que nos iban apoyar. Hablamos de educación, de salud, de caminos, carreteras y todo quedó a medias, y la verdad es que estamos olvidados», dice un comisario en el video.
En el documento que los comisarios firmaron el pasado 7 de junio y que este domingo en la asamblea lo ratificaron, responsabilizan a las autoridades del «percance» que realicen los helicópteros del Ejército mexicano cuando fumiguen los sembradíos de amapola.
«Defenderemos nuestro trabajo a como dé lugar, hasta que nos den apoyo que nos sea suficiente para el sustento (económico) de nuestras familias», se lee en el texto del acuerdo que los comisarios reprodujeron en video.
«Estamos decididos a no permitir que se nos destruyan nuestros plantíos de amapola, ya sea por aire o por tierra», advierten.
Los comisarios que firman el documento señalan que desde hace años han solicitado la entrega de apoyos como proyectos productivos, la construcción de caminos, carreteras, centros de salud, escuelas, y sigue sin responderle el gobierno.
Desde el 2019, después de la llegada del morenista Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de la República, los campesinos de la Sierra, que desde hace décadas se han dedicado a la siembra de amapola, radicalizaron sus protestas para que les respeten sus cultivos.
En abril del 2019, un grupo de militares fue retenidos por campesinos de la comunidad de Campo Morado, Heliodoro Castillo, para impidier que les destruyeran sus plantíos.
Durante la entrega del fertilizante por parte del gobierno federal, también campesinos de 27 comunidades de Helidoro Castillo y San Miguel Totolapan retuvieron a 40 militares en la comunidad de Puerto el Gallo.
Los soldados fueron dejados en libertad luego de que el entonces delegado del gobierno federal, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros entregó las toneladas de fertilizante que, según los campesinos, utilizarían para la siembra de maíz, frijol y calabaza.
Se informó que la entrega gratuita de este insumo agroquímico fue con base a la lista oficial del padrón de beneficiarios del programa de fertilizante que puso en marcha el gobierno de López Obrador.
Por versiones de autoridades federales y estatales, durante los anteriores gobiernos del PRI y el PAN, la mayoría de los campesinos que recibían el fertilizante lo ocupaban para la siembra de amapola.
En noviembre de ese mismo año, habitantes de la comunidad de Las Margaritas, también de Heliodoro Castillo, retuvieron durante dos días a 20 militares cuando éstos destruían sus embradíos de amapola.
Los campesinos liberaron a los soldados luego de llegar a acuerdos con autoridades del gobierno federal y estatal.
En esa ocasión, el comisario de la localidad, Esteban Arellano González, aseguró que 50,000 familias de esa zona viven en condiciones económicas deplorables, debido a que no los dejan sembrar la amapola, pero tampoco les entregan apoyos oficiales.
Según Arellano Gon?alez ahora sólo un 20 por ciento familias siguen sembrando la amapola.
