Texto: Amapola Periodismo
Fotografía: Oscar Guerrero
26 de septiembre del 2020
Chilpancingo
Doña Bertha Nava, madre de Julio César Ramírez, uno de los tres normalistas de Ayotzinapa asesinados hace seis años en Iguala, consideró que la investigación actual «es la misma porquería» que con Enrique Peña Nieto.
Bertha Nava habló durante el mitin realizado en el antimonumento de los 43 este sábado que se cumplen seis años de los hechos de Iguala. Antes, junto a normalistas y a integrantes de otros movimientos sociales marcharon por la ciudad. Ahí, en el monumento, ubicado en la glorieta de Las Banderas, criticó los resultados de la investigación del caso que retomó en el 2019 el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
«Nosotros no olvidamos el 26 de septiembre porque ese día perdimos nuestra tranquilidad y nuestras alegrías en nuestras casas, porque ya no tenemos a nuestros hijos», comentó.
También recordó que la primera vez que López Obrador habló con ellos, les dijo lo mismo que Enrique Peña Nieto: «de que se iba actuar hasta las últimas consecuencias».
«¿En qué los distingue?, pues, en que los dos dicen lo mismo», dijo.
En diciembre del 2018, cuatro años después del asesinato de su hijo Julio César Ramírez Nava, sufrió el fallecimiento de su esposo Tomás Ramírez.
«A mi hijo me lo asesinaron y tampoco tengo justicia y por eso estamos aquí para que aclaren el crimen y que aparezcan con vida nuestros 43», agregó.
La noche del 26 de diciembre, durante los ataques por policías municipales y un grupo de personas que pertenecen a la organización criminal Guerreros Unidos, fueron acribillados a tiros Julio César Ramírez y Daniel Solís Gallardo, mientras que Julio César César Mondragón Fontes corrió a refugiarse y al día siguiente hallaron su cadáver con ?el rostro arrancado. Bertha Nava no cree en las investigaciones del caso que lleva a cabo la Fiscalía General de la República (FGR), considera que son «cortinas de humo» para ocultar la verdad.
«Lo único que está haciendo este gobierno es sembrar evidencias y darnos esperanzas falsas, por qué no nos dicen la verdad y nos digan a dónde los tienen», dijo la señora dos horas después de que el gobierno federal rindiera un informe sobre los avances de la investigación.
En entrevista, la madre de uno de los tres normalistas asesinados señaló que la reunión de este sábado en Palacio Nacional fue sólo para tomarse la foto.
«Puras cortinas de humo, no hubo ningún avance, el gobierno sigue engañando a los padres y madres de los 43 y fue nomás para tomarse la foto porque atrás de los padres de los desaparecidos, estamos los padres de los asesinados», expresó.
Advirtió que no van a permitir más mentiras y de que el gobierno esté sembrando evidencias.
«La verdad saldrá a flote, ¿cuándo?, no lo sabemos, ¿de parte de quien?, tampoco lo sabemos».
«Obrador entiende, estamos hasta la madre contigo y con todos los gobiernos que para lo único que sirven es para estar golpeando a las normales rurales», agregó.
En la protesta participaron trabajadores mineros de Taxco que llevan más de nueve años en paro de labores, campesinos y colonos.
A su paso por las calles, los normalistas, en su mayoría de segundo y tercer grado, pintarrajearon las oficinas estatales del PRD ubicadas en la avenida Miguel Alemán.
Fuera de las instalaciones colocaron tres ataúdes de cartón con los nombres de los tres normalistas asesinados en Iguala, Julio César Ramírez Nava, Daniel Solís Gallardo y Julio César Mondragón Fontes.
Los jóvenes tenían planeado lanzar bombas molotov y cohetones contra el edificio pero cancelaron el ataque porque fuera del lugar estaban estacionados dos automóviles de particulares.
«No hay que hacer eso porque se pueden incendiar esos dos carros y esto podría provocar un problema fuerte, además la consigna es no hacer daños a la ciudadanía», dijo uno de los dirigentes a uno de sus compañeros que ya preparaba el ataque.
Frente a las oficinas de ese partido realizaron un mitin en donde uno de los oradores recordó que fue este instituto el que llevó al ex priísta Ángel Aguirre Rivero como gobernador de Guerrero, quien, dijeron, es uno de los responsables de lo que ocurrió en Iguala.
Además en diciembre del 2012, los estudiantes Gabriel Echeverría de Jesús y Jorge Alexis Herrera Pino fueron asesinados a balazos por las policías Federal y Estatal durante un desalojo en la Autopista del Sol.
«A nosotros no se nos olvida lo que ocurrió durante el gobierno de Aguirre», dijo el egresado de Ayotzinapa, Francisco Echeverría, hermano de Gabriel.
La protesta por los seis años de la desaparición de los 43 y el asesinato de tres normalistas en Iguala culminó con un mitin en el antimonumento.
Para este domingo 27 en la tarde, padres de los 43 y estudiantes de Ayotzinapa realizarán una marcha en Iguala, en donde depositarán una ofrenda floral en donde murieron Julio César Ramírez Nava, Julio César Mondragón Fontes y Daniel Solís Gallardo.
Este sábado en Acapulco, la Organización de Lucha Popular realizó una parada cívica en el antimonumento ubicado en la avenida Costera Miguel Alemán, en donde exigieron al gobierno federal resultados de la investigación del caso Ayotzinapa.
Arturo Guerrero Caballero, líder de esta agrupación, consideró que las investigaciones para esclarecer lo que ocurrió la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre van muy lentas.