Texto: Beatriz García
Fotografía: Amapola Periodismo
26 de junio del 2020
Chilpancingo
Cristina Bautista Salvador y Clemente Rodríguez Moreno, padres de dos de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa hace cinco años, sostienen que el ex director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), Tomás Zerón de Lucio, es uno de los principales responsables en la desaparición de sus hijos y debe ser aprehendido de inmediato.
Los padres de los normalistas, desaparecidos en Iguala el 26 y 27 de septiembre del 2014, no dejan de exigir la aparición de sus hijos, y uno de los objetivos clave es la aprehensión del ex director de la AIG.
Este personaje es señalado de plagar de irregularidades el caso y de sembrar evidencias, para sostener la Verdad Histórica del ex procurador General de la República Jesús Murillo Karam. Esta versión dice que los normalistas fueron quemados en el basurero de Cocula, versión que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) desechó.
Padres y madres de los 43 normalistas en el Congreso de Guerrero. Fotografía: Amapola Periodismo.
Cristina supo que el funcionario “algo escondía”
Cristina es madre de Benjamín Ascencio Bautista, uno de los normalistas desaparecidos, originario de Alpoyecancingo, municipio de Ahuacuotzingo, en la región Centro de Guerrero, manifiesta que Tomás Zerón manipuló la información sobre el paradero de sus hijos.
Lamenta que las investigaciones para dar con la ubicación de los normalistas está estancada. Son cinco años de no tener pistas de su ubicación. Y no se cansará junto con el resto de los padres de luchar y presionar la búsqueda.
La mujer tiene muy presente el nombre de Tomás Zerón, recuerda el día que el grupo de expertos reveló que sembró bolsas de plástico con osamentas en el Río San Juan, en Cocula, y sustentar la Verdad Histórica, violando el debido proceso.
Tampoco olvida el día que vio el video donde se observa a Tomás en el Río San Juan, en una diligencia con Agustín García Reyes, El Chereje, sicario de Guerreros Unidos, señalado de participar en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Con esto se dejó ver que se manipularon pruebas, pues al siguiente día se localizaron las bolsas con restos óseos quemados, y unos fragmentos correspondían al estudiante Alexander Mora Venancio, de Tecoanapa, municipio de la Costa Chica.
Cuando Cristina vio este video pensó que este funcionario algo escondía y que ciertamente sembraron evidencia.
Luego de estos hechos, cuenta Cristina, se reunió con el resto de padres y los abogados que acompañan el caso. Nuevamente reiteraron que se trataba de un crimen de Estado, y que era la forma en la que el gobierno se maneja, manipulando las investigaciones para no llegar a la verdad.
El lunes se informó en diversos medios de comunicación que un juez federal admitió a trámite el amparo que interpuso Tomás Zerón para echar abajo la orden de aprehensión que se giró en su contra el 18 de marzo de este año.
La madre de Benjamín manifiesta que como padres no aceptan que solicite un amparo, porque es uno de los principales responsables de la desaparición de sus hijos y debe ser castigado.
Desde que se giró la orden hasta el momento no ha sido detenido. Se afirma que está en Canadá pero también en México.
“Nunca me cansaré de exigir la presentación de nuestros hijos. Mucho que hemos caminado. Nos vamos a cansar y agradecer la compañía que nos han brindado para buscar a nuestros hijos. En cada comunidad y en cada casa falta un hijo. Nos hace falta pedazos de nuestro corazón para estar completos, porque vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
Aspectos de la búsqueda de los normalistas desaparecidos en el Río San Juan, municipio de Cocula. Fotografía: Salvador Cisneros.
Hay información que debe desenmarañarse: Vidulfo Rosales
El abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Vidulfo Rosales Sierra, señala que el ex director del GIEI incurrió en irregularidades desde que inició el caso.
Luego de la desaparición de los normalistas el caso se turnó a Tomás Zerón. Comienza las investigaciones, y hace una serie detenciones de personas implicadas en el caso.
El abogado indica que desde el inicio cometió actos irregulares. En varias detenciones es acusado de torturar a detenidos para que confiesen la versión del basurero de Cocula y se sostenga esa tesis.
“Él tenía una intención deliberada de ocultar la verdad y el proceso entonces, como en el video nos damos cuenta del conjunto de irregularidad, nos percatamos que es una persona que fue puesta para no saber la verdad”.
Señala que luego del video junto con los padres de los normalistas empiezan a ejercer presión para que se le castigue por obstruir el debido procesamiento de las pruebas.
Está la duda de si el fragmento óseo de Alexander estaba en el río o fue traído para ponerlo en ese sito, y de dónde se trajo, información que debe saber Tomás Zerón, asegura el abogado.
Para él esta información tiene nudos que deben desenmarañarse para dar con el paradero de los 43 y conocer la verdad.
El abogado recuerda que después de ejercer presión para que se quitara del cargo al entonces director de la AIC, en el 2016 renuncia al cargo, sin embargo a las pocas horas es puesto como secretario Técnico del Consejo de Seguridad Nacional, lo que comprobaba que gozaba de una protección desde el más alto nivel, que era la presidencia a cargo del priista Enrique Peña Nieto.
Legalmente los padres solicitaron en ese entonces a la Procuraduría General de la República (PGR) se abriera una investigación en su contra y se girara una orden de aprehensión.
El 18 de marzo se gira orden de aprensión contra Tomás Zerón por el delito de tortura, pero considera el abogado que debe juzgarse también por emprender acciones legales para la desaparición de los normalistas ocultando información.
Sobre el trámite de amparo para desechar la orden de aprehensión que solicitó el ex director, dijo que no tiene relevancia, que está en su derecho de hacerlo.
Asegura que la orden de aprehensión está bien sustentada en datos de pruebas suficientes que acreditan que cometió el delito de tortura.
Clemente
Clemente, padre de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, uno de los 14 normalistas originario de Tixtla, donde se ubica la Escueloa Normal Rural Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa, es de la idea de que todos los padres vayan a la embajada de Canadá, donde se presume está Tomás Zerón, para exigir su aprehensión.
Lamenta que la pandemia del coronavirus los tiene de alguna forma “amarrados” que no les permite movilizarse como lo venían haciendo desde que desaparecieron sus hijos. No pueden arriesgarse a contagiarse.
Este viernes nuevamente se pronunciarán de manera virtual, ya no pueden salir a las calles a recordar que se cumple un mes más de la desaparición y que no hay pistas de su paradero.
Todavía recuerda cuando Zerón ocupaba el cargo de director de la AIC y lo tuvo enfrente. Prometió que iba a llegar a la verdad y daría con el paradero de sus hijos, pero al final entorpeció las investigaciones.
“Yo digo una cosa, que si este señor no tiene nada que esconder que dé la cara, si una persona está limpia da la cara al gobierno”, expresa don Clemente.
Para el padre, Zerón está prófugo.
Indica que el nuevo gobierno, a más de un año, tampoco les ha dado respuestas de la ubicación de sus hijos.
Dice que se han reunido unas cinco veces, les muestran la lista de búsquedas, pero sólo en fosas, y no encuentran nada. Advierte que también deben buscar a los jóvenes con vida, pues ni él ni sus compañeros descartan esa posibilidad.
“Nos prometen muchas cosas pero al final nos dan una puñalada por la espalda”, reprocha.
