Desplazamiento, desaparición y feminicidios, efectos de las violencias contra mujeres en Guerrero

Texto: Beatriz García

Fotografía: Franyeli García

8 de marzo del 2021

Chilpancingo 

 

Hace dos años y cuatro meses, hombres armados se llevaron de su casa en Tlatempanapa, municipio de Zitlala, a seis sobrinos de Joaquina Cantor Gasparillo. Los arrojaron a una camioneta y desde ese entonces no se sabe de ellos.

 

Ese día ella comenzó su lucha en búsqueda de la justicia.

 

La historia de Joaquina es el reflejo de las violencias por las que pasan miles de mujeres en el país y en el estado. La que le tocó a vivir a Joaquina la obligó a desplazarse.

 

El Centro Regional de Defensa de Derechos Humanos José María Morelos y Pavón, organización que apoya a las familias desplazadas de diferentes puntos del estado, asocia esas violencias que impacta en mujeres a la presencia de grupos paramilitares.

 

La directora del Centro Morelos, Teodomira Rosales Sierra, lo dice claro: “Hoy nuevamente alzamos la voz por las mujeres víctimas invisibles por la guerra del control del territorio por parte de los grupos paramilitares en diferentes municipios de la Sierra del estado de Guerrero. Nuevamente la guerra entre grupos paramilitares toma el control por el territorio, la tierra y los recursos naturales”, manifestó.

 

 

Este lunes, en el Día Internacional de la Mujer, las representantes de colectivos de desaparecidos en el estado dieron una conferencia de prensa en Chilpancingo para exponer las historias de sus desaparecidos.

 

Ahí estuvo Joaquina, quien también narró que salió de su pueblo junto a otras mujeres a quienes también les desaparecieron a sus familiares.

 

“Puras mujeres nos quedamos, mejor decidimos salir para sacar adelante a los niños, porque son chiquitos, no saben”, comentó.

 

Ahora viven en Chichihualco, cabecera municipal de Leonardo Bravo, y “ahí estamos echándole ganas para salir adelante, porque no podemos trabajar como nosotros trabajábamos en el pueblo. Allá estábamos acostumbrados a sembrar calabaza, frijoles, maíz, toda la cosecha de las aguas. Todo está cambiando”.

 

Joaquina vive con su madre de 78 años que no se puede valer por sí sola. En Chichihualco buscó la manera de sembrar en un espacio para poder alimentar a su familia.

 

Aunque ella no desiste en buscar a sus sobrinos, lo cierto es que no hay avances en la investigación oficial.

 

De acuerdo a la representante del Colectivo de Familiares en Búsqueda María Herrera, Gema Antúnez Flores, dijo que de acuerdo al registro de Instituto Nacional Estadística, geografía e Informática (INEGI) 133 mujeres están desaparecidas en Guerrero desde 2009, pero esa cifra sólo es de los casos con denuncia formal.

 

Tan sólo en los últimos tres meses del 2020, informaron ls integrantes de estos colectivos, 20 mujeres fueron desaparecidas. En lo que va de este año ya suman 35 mujeres desaparecidas, principalmente en Acapulco, Chilpancingo e Iguala.

 

Rosales Sierra expuso que desde 2012 comenzaron a desaparecer mujeres y niñas menores de 15 años en Chilapa y Zitlala.

 

Informó también que al Centro Morelos le reportaron el desplazamiento de 150 familias de tres comunidades de Coyuca de Catalán, municipios de la Tierra Caliente, a causa de la violencia en la zona. Las comunidades son El Ciruelo, Hacienda de Dolores y El Pescado, y la mayoría de los desplazados son mujeres y niños. El Centro Morelos les dará acompañamiento.

 

La también abogada recordó que en Chilapa y Zitlala durante el 2018 documentaron el desplazamiento forzado de 75 familias, y a partir de entonces continúan documentando casos en diferentes regiones del estado.