“A mí país ya no regreso”: Juárez, de paso de migrantes a ciudad de refugio

Cristina Coronado recibe documentos de las personas migrantes que buscan refugio en México con el apoyo de oficina de movilidad en la Catedral. Fotografía: Rocío Gallegos / La Verdad Juárez
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Tras el endurecimiento de las políticas migratorias de Estados Unidos, cientos de migrantes han solicitado refugio en México para residir en Ciudad Juárez. Tan solo en el último mes, unas 600 personas de diferentes países realizaron su trámite con el apoyo de la oficina de movilidad de la Catedral. Son muchas sus razones para quedarse, pero la mayoría busca echar raíces de manera legal para evitar su deportación


Texto y Foto: Rocío Gallegos / La Verdad Juárez

Ciudad Juárez

Martes 18 de marzo del 2025


Ciudad Juárez– Cuando salió de Venezuela hace más de un año, María del Carmen Perdomo tenía como destino Estados Unidos, pero de allá la expulsaron en cuanto cruzó la frontera junto a su esposo, sus dos niñas y su niño, lo intentó de nuevo pero el cambio de políticas migratorias en el vecino país del norte la dejó varada en esta frontera

Ahora busca echar raíces legalmente en el país. Junto con su familia está en vías de recibir refugio en México y convertirse en residente permanente de esta comunidad fronteriza donde vive desde hace seis meses.

“No es fácil comenzar de nuevo” dijo María del Carmen, de 31 años, en una entrevista en el comedor de la Catedral de la ciudad, a donde acude cada semana por una despensa de las que distribuyen entre personas migrantes.

Aseguró que a su país ya no regresa y no buscará cruzar de nuevo a Estados Unidos por miedo a que la regresen de nuevo a su país. “En Venezuela vendí todo, no tengo nada, ni un colchón, ni a donde llegar, ya no regreso”.

La mujer, su esposo, hijas e hijo solicitaron su refugio en México a finales de enero, después de que Estados Unidos prácticamente restringió su frontera a la migración irregular, a los 15 días la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) les informó que fueron aceptados

“Nos respondieron que había sido aceptado nuestro asilo y que tenía que acercarme a Migración para hacer la primera firma” contó. “Me alegré, mucho”.

Como ella cientos de personas migrantes comenzaron a solicitar el reconocimiento de refugiado en el país desde Ciudad Juárez. Lo han realizado con la asesoría de organizaciones y personas que trabajan por los derechos de los migrantes.


Migrantes llenan los formularios para su solicitud de refugio en uno de los talleres de la Catedral. Fotografía: Rocío Gallegos / La Verdad Juárez

Se solicitó a la Comar estadísticas sobre este trámite en lo que va del año, pero aún no responden a la petición. Sin embargo, tan solo en el último mes casi 600 personas hicieron su solicitud para residir en esta frontera de manera legal con la ayuda de la oficina de movilidad de la Catedral, otras decenas están en proceso de concretarlo y unas más están en lista de espera para iniciar el trámite.

Cristina Coronado, de la oficina de movilidad y encargada del comedor de la Catedral, comentó que con la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos se derrumbaron muchos sueños de migrantes que ya habían hecho su travesía hasta esta frontera, “había mucha frustración, mucha ansiedad. La gente se preguntaba qué voy hacer”.

“Nosotros escuchamos, apoyamos, orientamos cuando podemos a la gente, pero desde ese momento muchas personas se quedaron sin opción para ingresar legalmente (a Estados Unidos) y se dieron cuenta que podían ser deportadas a su país, entonces empezamos a escuchar de la gente que quería refugio en el país”, dijo Cristina.

Ante la nueva realidad, contó que echaron mano de varias personas e instituciones para armar un programa de apoyo gratuito a los migrantes que les solicitaban orientación para gestionar el refugio.

Se contó con la ayuda de una migrante de El Salvador que había solicitado refugio, “ella sabía lo que se les iba a pedir”, se acercaron con una abogada de la Defensoría Pública Federal, para que lleve algunos casos, con la universidad, para tomar algunas fotos que requieren las personas, con un estudio fotográfico para gestionar descuentos por el servicio y con Comité Internacional de Rescate (IRC, por sus siglas en inglés) para armar talleres de llenado de formularios y presentar solicitudes en paquete.

“En lugar de hacer el trámite uno por uno, porque esto es ya muy lento, y el trámite es muy tardado, entonces lo que decidimos fue acompañar a los migrantes desde cero, en la Catedral llenan los formularios, en forma de talleres, empezamos dando una explicación de qué es el refugio y sus implicaciones, luego les orientamos en el llenado de papeles”, cuenta Cristina al hablar sobre este programa de apoyo que inició el pasado 4 de febrero y a través del cual se ha realizado 183 trámites, para familias o personas solteras, procedentes de Venezuela, Colombia, Honduras, El Salvador, Guatemala, Perú, Ecuador, Haití y hasta de África.

Son en total como 600 personas, entre adultos e infantes, los que iniciaron el trámite, dijo Cristina, pero considera que ese el número va en aumento, por la cantidad de personas que se han acercado a solicitar información del apoyo para iniciar la gestión de refugio con ellos.

“Empiezan a llegar y empiezan a se pasan la voz”, comentó. “Porque pues ellos se dieron cuenta de que ya no hay posibilidades de cruzar la frontera, al menos no por ahora”.

Migrantes llenan los formularios para su solicitud de refugio en uno de los talleres de la Catedral. Fotografía: Rocío Gallegos / La Verdad Juárez

Estados Unidos ha sido el destino para muchos migrantes de distintas regiones del continente americano que huyen de la pobreza, la agitación política, desastres naturales o la violencia. Sin embargo, cruzar la frontera entre México y Estados Unidos se ha vuelto cada vez más difícil, dicen los migrantes, por un lado los altos costos de los polleros -como llaman a traficantes de personas- y ahora por las severas acciones del gobierno de Trump en su contra.

Desanimados por el panorama, la mayoría de los que estaban en esta frontera han retornado a sus lugares de origen o se trasladaron a otras ciudades del país, pero muchos han decidido quedarse a residir de manera legal en esta comunidad fronteriza.

“Entendí que las posibilidades están en donde uno la busque, siempre y cuando uno tenga esas ganas de progresar, salir adelante y tener su propio negocio”, dice Móises quien lleva en la ciudad 11 meses.

Él salió de Venezuela con su pareja y una hermana en busca de una mejor situación económica y por la situación política que dice se vive en su país, contó mientras esperaba información en la Catedral, donde ha recibido ayuda para su gestión de asilo, “para uno poder estar bien y estable acá en México”.

Confiesa que tenía miedo hacer su travesía por México, por las historias de violencia que se cuentan, pero dijo “bueno, entremos a México” y aseguró que ha sido superbien recibido y ha encontrado oportunidades para iniciar su emprendimiento de cortes de cabello.

“Como en todos lados hay personas buenas y personas malas” dijo, pero sus experiencias buenas son más, por eso no dudo en tramitar su estancia legal cuando se enteró que lo podía hacer con ayuda de personas de la Catedral, donde también recibió alimentos cuando recién llegó.

Móises aseguró que nunca intentó cruzar la frontera de manera irregular, buscó una cita por CBP One, lo intentó por casi un año pero nunca le salió, luego llegó Trump a la Casa Blanca y sus planes cambiaron.

Su historia es parecida a la de Yulieth Rojas, una migrante colombiana, de 28 años, aunque ella sí consiguió fecha para su cita ante autoridades migratorias de Estados Unidos, pero se quedó varada por la cancelación de CBP One el pasado 20 de enero, tras las investidura de Trump como presidente. Ella iba a cruzar el 8 de febrero.

La mujer no descarta regresar a su país, donde la espera su familia, pero mientras eso ocurre decidió tramitar refugio en México “para andar tranquila aquí, cuando uno ve a policías y militares”

El aumento en las solicitudes de asilo en México también se debe al incremento en las detenciones en operativos de las autoridades de Migración mexicana.

“Lo mejor es andar con un documento legal” comentó la Yulieth quien salió de su país en agosto del 2023 y llegó a la ciudad en tren.

Contó que ya se va a cumplir el mes de que hizo la solicitud de refugio con el apoyo del programa de la Catedral y aún está a la espera de una respuesta de las autoridades.

Yulieth dijo que le gusta Juárez. “Aquí conoces a mucha gente, muchos extranjeros, me he topado con gente muy buena con la que me llevo bien”.

En esto último coincide María del Carmen, la venezolana, quien asegura que su esposo consiguió un empleo como cargador en el mercado del centro y sus hijas iniciaron la escuela en septiembre pasado.

“Aquí hemos retomado nuestra vida, mi esposo trabaja, mis hijas van a la escuela y hay personas que son como ángeles que nos ayudan mucho”, mencionó la mujer, quien espera sus papeles como refugiada para trabajar y ayudar con los gastos de su nueva casa en esta frontera.


Este es un texto de La Verdad Juárez, que forma parte de la Alianza de Medios de Periodistas de a Pie, de la cual somos integrantes. Aquí puedes consultar el trabajo original.