Texto y foto: Andrea Mendoza
Lunes 29 de abril del 2024
Chilpancingo
Enfrente del banco Banamex, en el zócalo de la ciudad, está un puesto de tacos de canasta.
En ese lugar, la gente hace filas largas desde las ocho de la mañana para probar esos deliciosos tacos acompañados con una salsa verde muy picosa.
La dueña, Flor Téllez es una señora muy amable, contó que su emprendimiento surgió de la necesidad hace 25 años. Su esposo se había quedado sin trabajo y tenían que mantener a sus cuatro hijos.
La señora Flor Téllez comenzó entonces a buscar un lugar en el centro donde le dieran la oportunidad de vender por solo unas horas unos tacos estilo Iguala que ella sabía hacer.
Le dieron permiso justo enfrente del banco Banamex, en una tienda de abarrotes podía poner solo una mesa chica y una silla.
La señora Flor Téllez inició su emprendimiento con 100 tacos al día. Algunas veces se le terminaban, otras veces se quedaba con casi todos los tacos.
Pero no se daba por vencida, sabía que aquel emprendimiento daría frutos. Flor Téllez asegura que su emprendimiento prosperó por la calidad de sus tacos y el tamaño de los mismos.
“Usted puede ir al mercado, o a otro puesto y va a ver que los míos son más grandes, y los guisos siempre están buenos”, dijo Flor Téllez con mucho orgullo y una gran sonrisa.
Comentó que con el paso del tiempo la demanda de sus tacos se hizo cada vez más grande.
Hasta que hoy, después de 25 años, la señora Flor y sus hijos, quienes ya crecieron y le ayudan en la venta de tacos, hacen 3, 000 mil tacos diarios.
El negocio creció y pusieron una segunda sucursal a un lado de plaza Guerrero, en esa sucursal hay un lugar amplio donde puedes sentarte y comer de manera tranquila.
Flor Téllez comentó que esta segunda sucursal la tuvo que poner porque ya no se daba a basto con aquel lugar chico.
La señora Flor agradece mucho a la vida, porque su emprendimiento prosperó de tal manera que creó un negocio familiar, porque ahora todos pueden vivir de ello.
Sus cuatro hijos, ya adultos ayudan en la realización y venta de tacos. Los dos mayores le ayuden a vender y hacerlos, mientras que otros dos se encargan de los servicios a domicilio.
“Nosotros comenzamos a hacerlos a las siete de la mañana y terminamos la venta a la una, pero no regresamos a la casa a dormir, todos seguimos trabajando”, comentó la señora Flor.
La labor de hacer 3, 000 tacos diarios es una tarea pesada, pero con la ayuda de toda su familia se hace menos.
Al llegar a casa después de vender, la familia Téllez comienza con los guisos; chicharrón en salsa, papa con chorizo, mole, carnitas y hasta barbacoa.
Después de limpiar aquel canasto grande donde serán depositados los nuevos tacos, limpiar platos, utensilios y hacer aguas frescas y salsa, la familia Téllez descansa.
Al otro día, en punto de las seis de la mañana, comienzan a preparar los 3, 000 mil tacos.
Este trabajo es todos los días, pues abren de lunes a sábado.
Los domingos la familia Téllez no trabaja, prefiere pasar un rato en familia, descansar y prepararse para el día siguiente.
La señora Flor está segura que está tradición y emprendimiento pasará de generación en generación, sus hijos adoptaron el gusto por la venta y la cocina. Y ella está feliz de haberles enseñado a prosperar.