Por Arturo de Dios Palma, Emiliano Tizapa Lucena y Jesús Guerrero Salgado
El 16 de mayo, poco antes de que iniciara la sesión en uno de los pasillos del salón legislativo del Congreso, los diputados Joaquín Badillo de Morena y el priista Héctor Apreza Patrón discutieron acaloradamente.
Apreza Patrón ya tenía preparado leer una condena contra Jesús Urióstegui García, el jefe de la Oficina de la gobernadora, Evelyn Salgado Pineda, por haber participado en un acto de campaña de la candidata morenista a la gubernatura del Estado de México, Delfina Gómez, el jueves 11 de mayo.
Badillo Escamilla trataba de convencer al priista para que no lo hiciera y le soltó: «mira aquí tenemos el documento donde él (Urióstegui García) pidió permiso ese día sin goce de sueldo”.
El morenista le mostró la imagen de un escrito supuestamente firmado por Urióstegui García que le enviaron en un mensaje de WhatsApp en su celular.
Se supone que ese mensaje electrónico se lo envió a Badillo Escamilla el propio Urióstegui García cuando se enteró de que las bancadas del PRI y PRD lo denunciaría en la tribuna, luego de que los periódicos El Sur y Reforma publicaron una nota y una fotografía en la que aparece en un mitin con la morenista Delfina Gómez Álvarez, en el municipio de Villa Guerrero, el 11 de mayo en un día y horario laborable.
Además ese mismo día el «amigo», como lo define la gobernadora, Urióstegui García publicó en sus redes sociales su participación en el acto de campaña de Gómez Álvarez junto con otros guerrerenses que se supone son sus colaboradores en la dependencia que dirige.
El intento de Badillo Escamilla no tuvo el resultado que quería, Apreza Patrón subió a la tribuna y junto con el morenista Alfredo Sánchez Esquivel y el perredista Ociel Hugar García Trujillo le dieron una tunda a Urióstegui García.
Sin embargo, Badillo Escamilla subió a la tribuna sacó su tableta electrónica y, como vil mago, apareció con la renuncia del Jefe de la Oficina de la gobernadora fechada el 9 de mayo, dos días antes de su participación en un acto de campaña al lado de la candidata de Morena en el municipio de Villa Guerrero.
¿Sí Uriostegui García había renunciado dos días antes del mitin de la candidata de Morena, por qué Badillo Escamilla le mostró a Apreza Patrón el permiso sin goce de sueldo del ex funcionario? ¿Por qué desde el gobierno del estado no anunciaron la salida del ex jefe de la Oficina de la gobernadora? ¿Por qué hasta ahora no han podido mostrar físicamente el documento de la supuesta renuncia? ¿Por qué?
Fácil: porque no ocurrió así, Uriostegui García se fue a hacer campaña al Estado de México sin permiso y sin renunciar al cargo.
Pero, ¿saben quién operó esa intempestiva renuncia de Urióstegui García luego del desmadrito que él mismo provocó?
Pues ni nada más ni menos que la propia gobernadora. Salgado Pineda ordenó a Urióstegui García firmar su renuncia con fecha del 9 de mayo, cuando el escándalo mediático ya se había desatado días antes.
A los operadores de la gobernadora les faltó ordenar que se borrara el nombre de Urióstegui García del directorio de funcionarios del gabinete estatal.
Fuentes del gobierno confirmaron que el poderoso jefe de la Oficina de la gobernadora ni siquiera pidió permiso para trasladarse junto con varios trabajadores al Estado de México para estar en el evento político de Gómez Álvarez.
Incluso se trasladaron a Villa Guerrero en vehículos oficiales. Así de cínicos son los que integran este gobierno de Guerrero de la llamada cuarta transformación.
A varias semanas de que formalmente Urióstegui García dejó el cargo, fue «comisionado» para que opere en municipios del Estado de México para recabar votos a favor de Gómez Álvarez.
Así lo hizo en la campaña de Salgado Pineda en las elecciones del 2021 y por ese trabajo el clan de los Salgado lo designó como jefe de la Oficina, un cargo de altísima confianza.
Urióstegui García es originario de Chilpancingo y toda su vida ha sido un junior, se subió al carro de Morena en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador en 2020 con diversos cargos.
Por ejemplo, fungió como asesor del subsecretario de Gobernación, Ricardo Peralta Saucedo, cercano a la ex secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero. También trabajó en la Aduana marítima de Acapulco.
En la campaña de Salgado Pineda, Peralta Saucedo y Urióstegui García formaron parte de su grupo de operadores políticos.
Pero volviendo al tema, la renuncia pirata de Urióstegui García no es un tema menor, estamos hablando de corrupción. Primero, el ex funcionario cometió un delito al utilizar recursos públicos y abandonar sus funciones para apoyar a un candidato. Eso es un delito electoral. Segundo, la gobernadora en lugar de destituirlo no sólo lo protegió sino que lo ayudó a mentir, a engañar. Y tercero, Urióstegui García no tuvo que irse tranquilamente a seguirle en la campaña de Gómez Álvarez, debería estar enfrentando la ley.
La gobernadora es abogada y sabe perfectamente que lo que cometió su amigo Urióstegui García fue un delito electoral grave, sin embargo, actuó a la vieja usanza priísta: a los amigos perdón y gracia y a los enemigos, la ley a secas.
Lo que realizó Urióstegui García, uno de los “Catrincitos”, no es nada nuevo, la mayoría de los funcionarios del gabinete de Salgado Pineda que desde hace meses está volcado a promover y financiar propaganda política a favor de la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, la corcholata preferida de López Obrador para sustituirlo en la presidencia de la República.
El PAN y el PRD interpusieron demandas ante el Instituto Nacional Electoral (INE) contra funcionarios estatales a quienes les importó poco y prueba de ello es que siguen promoviendo pintas y propaganda en las redes sociales a favor de Sheinbaum Pardo utilizando presuntamente recursos públicos.
Tan es el cinismo que el Subsecretario de Educación Media de la SEG, Marco Antonio Marbán Galván ordena que en las pintas a favor de Sheinbaum se escriba las iniciales de su nombre y apellidos.
Bueno si la gobernadora y su papá el senador Félix Salgado Macedonio ponen el ejemplo, ni modo que sus subalternos no lo hagan.
Después del domingo 4 de junio luego de las elecciones en el Estado de México, Urióstegui García regresará a Guerrero para hacerse cargo de la coordinación estatal de la promoción de Sheinbaum. Su nombramiento ya fue aprobado por el clan de los Salgado.
El gabinete estatal está cargado a Sheinbaum Pardo y la pregunta es si no es ella la elegida por el presidente Obrador, ¿qué va a hacer el clan de los Salgado?
Seguramente van actuar como los priístas: se van a disciplinar y a negociar con cualquiera de los elegidos, Marcelo Ebrard o Adán Augusto López. Lo importante para los Salgado es mantener los privilegios del poder.
En el caso de Urióstegui García, su tirada es que Morena lo elija candidato a diputado local por un distrito o por la vía plurinominal.
El Catrincito piensa que con la bendición de los Salgado podría ser jefe de la bancada de Morena en la próxima legislatura y si su partido logra la mayoría, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso.
Urióstegui García anda con todo buscando un huesito mejor porque al parecer ser jefe de la Oficina de la gobernadora no le gustó mucho. Nos cuentan que le quiso tumbar el cargo a Ludwing Marcial Reynoso Núñez en la Secretaría General de Gobierno, pero fracasó.
En este momento, Los Catrincitos, Urióstegui García y Rubén Hernández Fuentes, coordinador Operativo del Poder Ejecutivo, andan haciendo una mancuerna de poder en el gobierno de los Salgado que hay que ponerles atención.
Chirrionazo.- Siguiendo con el tema preelectoral, resulta inadmisible que la presidenta del Instituto Electoral de Participación Ciudadana (IEPC), Fabiola Fabiola Matildes, diga que este organismo no está facultado para emitir una opinión sobre la propaganda política que realiza presuntamente Morena y funcionarios del gobierno estatal a favor de Sheinbaum Pardo. La consejera electoral le endosó este paquete al INE. A ver qué dice el bloque opositor del PRD, PAN y PRI.
Colaboración especial en Amapola periodismo de sus brothers, sus panas, hermanos, su sangre y su clicka: Arturo de Dios Palma, Emiliano Tizapa Lucena y Jesús Guerrero Salgado. Aquí nos pueden enviar sus comentarios y chismecitos: eltlacololcolumna@gmail.com
Tlacolol es una columna satírica que cuestiona los hechos y dichos de lo que acontece en Guerrero. La opinión vertida en esta columna es responsabilidad de sus autores. Agradecemos el espacio a Amapola Periodismo por respetar la libertad de expresión y no censurar nuestras opiniones e interpretaciones