Texto: Beatriz García
Fotografía: Franyeli García
23 de enero del 2021
Chilpancingo
Juan Manuel Adame Sánchez tiene 31 años, de éstos 14 los ha dedicado a Servicios Públicos de Chilpancingo. Hace nueve años comenzó a manejar un camión recolector de basura. Su trabajo es de gran riesgo de contagio de la Covid-19, porque convive a diario con cerca de 16 toneladas de basura que, también, generan personas con la enfermedad.
Juan Manuel es uno de los miles de trabajadores que no se pueden quedar en casa en esta pandemia. Sin él, sin los recolectores de basura, los focos de infección y contagio de la Covid-19 en las calles sería mayor.
Este trabajador es conocido en las redes sociales por ser parte del camión recolector El Poderosísimo 10, porque junto a sus tres compañeros hacen parodias de lucha libre. Éstos son su hermano, Oscar Michel Adame Sánchez; el segundo chofer del camión, Roberto González Rodríguez, y el trabajador Ángel Salazar Lázaro.
Ellos y sus compañeros de otras rutas de recolección de basura plantearon la necesidad de ser considerados pronto en la aplicación de la vacuna. Saben que tiene prioridad el personal médico por su cercanía a pacientes con la enfermedad, pero han reflexionado que la primera línea sobrepasa los hospitales, y ahí están ellos.
El llamado de ser vacunados lo hizo público Juan Manuel en el perfil de Facebook Lo que callamos los basurólogos, uno de los espacios en las redes más conocidos de El Poderosísimo 10.
“Pedimos a las autoridades correspondientes que también sean tomados en cuenta como prioridad para la vacuna contra el Covid-19 todos los trabajadores de recolección, ya que también corremos mucho riesgo de contagio por nuestro trabajo”, se lee en la publicación del 13 de enero pasado.
De acuerdo con el secretario de Servicios Públicos municipal, Francisco Dimas Ortiz, en Chilpancingo, antes de la pandemia, se generaban 350 toneladas diarias de basura, ahora se recolectan hasta 480 toneladas.
Los trabajadores no saben con qué tipo de basura conviven, excepto los compañeros a los que se les designa la recolección de basura en hospitales, incluidos los Covid-19.
El secretario precisó que los receptores de basura no se encargan de los Residuos Peligroso Biológico Infecciosos (RPBI) que se generan en los hospitales. Lo hace una empresa privada. Pero aun así, los trabajadores advierte de riesgo en el manejo de la basura.
“Me ha tocado colonias que sí hay enfermos de Covid. No hay un protocolo que se respete donde se te diga esto no se toca, está infectado, es basura de un enfermo, estamos en contacto de eso”, cuenta Juan Manuel.
Aunque todavía no hay un consenso con todos los trabajadores operativos de Servicios Públicos para hacer la petición, Juan Manuel ha platicado con algunos y éstos concuerdan en la necesidad de recibir la vacuna.
En su publicación de Facebook la mayoría de los comentarios de los usuarios apoyan su petición. “También por los desechos de los pacientes que son atendidos en casa y ustedes no saben quiénes son”, “Desafortunadamente no nos toman en cuenta”, “Si que ellos los tomen en cuenta en la segunda ronda”, son sólo algunos de ellos.
También hubo comentarios de personas que no los secundaban: “Oye, no te compares con un médico”, “Ustedes no son trabajadores de Salud para que les apliquen la vacuna”.
En Servicios Públicos de Chilpancingo hay cerca de 200 trabajadores operativos, de un total de 350, que todos los días, en 20 camiones, recolectan basura en más de 400 colonias separadas en 22 rutas, según los datos del área municipal.
De los 350 trabajadores de Servicios Públicos que están agremiados a la sección 14, del Sindicato Independiente, apenas unos 50 tienen la prestación de servicio médico. El resto de trabajadores son extraordinarios y eventuales, y no lo tienen, según el secretario general de esa organización gremial, Domingo Salgado Martínez.
Hasta ahora Juan Manuel y sus compañeros no han tenido la oportunidad de acercarse a las autoridades para hacer la petición formal.
¿Cómo se cuidan los trabajadores ante la pandemia?
Los trabajadores de Servicios Públicos tienen un protocolo muy primario ante la pandemia: usan guantes y cubrebocas.
–Oye, pero hay compañeros de Servicios Públicos que no usan el cubrebocas o guantes, ¿qué sucede?, –se le preguntó a Juan Manuel
–Es falta de equipamiento. Yo en mi caso, con el equipo que estoy, a veces tenemos la necesidad de comprar cubrebocas. A veces nos dan en la oficina.
Para los trabajadores de la basura es complicado mantener un entorno salubre, por el mismo trabajo.
Juan Manuel tiene que cambiarse el cubrebocas durante su jornada laboral diaria unas cuatro veces, aun así la exposición a los desechos es imprescindible.
“Nosotros cargamos con nuestro gel adentro del camión y a veces cargamos desinfectante. Hacemos un ritual, te lo juro, si vieras, cuando nos vamos a casa, con jabón y nos echamos tantas cosas”, comenta.
Entre sus compañeros hay adultos mayores.
La ruta que cubre Juan Manuel es el de las colonias ubicadas al poniente de la ciudad, como el PRD para alta y baja, Omiltemi, PRI, Ocozuapa, Amelitos 1, Amelitos 2, Figueroa Mata, Villas Parador del Marquez, hasta la localidad de Tepechicotlán.
Los contagios
El trabajador sabe que hay compañeros barrenderos o de brigadas de limpia que han muerto por coronavirus.
–¿Cuántos han muerto por Covid en tu trabajo?
–He sabido de tres, no sé si hay más. Infectados unos cinco más o menos.
El secretario de Servicios Públicos municipal aseguró que desde septiembre pasado que e tomó protesta ningún trabajador ha muerto por la Covid-19, aunque, reconoció, sí ha sabido de contagios.
Al inicio de la pandemia, autoridades de Servicios Público pidieron a la población identificar su basura de pacientes Covid con un listón, justamente para no exponer al contagio a los trabajadores. Pero Juan Manuel expuso que los habitantes no han seguido las indicaciones.
Chilpancingo sigue en segundo lugar a nivel estatal por el número de contagios de la Covid-19. Sólo Acapulco está arriba.
Los trabajadores no sólo en pandemia están expuestos a contagios o enfermedades a raíz de la falta de cultura de la separación de basura.
Impresiones durante la recolección
El trabajador comparte algunas experiencias, en el contexto de esta pandemia, a las que se enfrenta en su jornada diaria.
El más común, se topan bolsas guantes, cubrebocas, medicamentos, jeringas sin ninguna advertencia. También que los usuarios del servicio salen a depositar su basura sin cubrebocas.
En el caso particular de las colonias la Obrera, Ocozuapa, recordó, son los niños los que salen a tirar la basura sin protección.
Como un apunte general también expuso que no hay la cultura de la separación de la basura, trabajo que asumen ellos, lo que acrecienta su riesgo.
Ante este panorama, Juan Manuel insiste en que se les aplique la vacuna.
Con cierto sarcasmo agregó que por tener contacto de manera cotidiana con la basura es probable que los trabajadores recolectores hayan generado anticuerpos, pero, se cuestiona: ¿y sus familias?
¡Llegaste hasta el final!