La obra de teatro virtual denuncia las desapariciones de mujeres por trata de personas en México, una realidad constante en nuestro territorio
Texto: Sabina Torres / Lado B
18 de noviembre del 2020
En medio de la oscuridad del inframundo, Hades, con traje de gala, mirada perturbadora, una sonrisa escalofriante, y acompañado de una sonoridad lúgubre, se prepara para observar el mundo en el que habitan los y las mortales.
De pronto, bajo una luz clara y cálida, Perséfone se mueve con un sonido palpitante dentro del vientre materno, como una pluma con el viento; Deméter, su madre, la siente vivir dentro de ella, en ese momento se muestra la conexión profunda e irrompible entre ellas.
Con estas dos escenas abre Las diosas subterráneas, una obra bajo la idea original y dirección de Rocío Carrillo, en colaboración con Teatro UNAM que utiliza el lenguaje corporal y la musicalización como únicos elementos para abordar la lucha de las madres que buscan a sus hijas.
Con la intención de denunciar las desapariciones forzadas de mujeres con el objetivo de hacer trata de personas en México, la obra presenta la historia atípica de dos mujeres —Perséfone y Luz García— que logran escapar de sus raptores. Ambos sucesos se relacionan a través de las madres de las mujeres desaparecidas, quienes organizan brigadas colectivas de búsqueda para localizar a sus hijas.
El primer caso es el de Perséfone —hija de Zeus, dios del trueno, y Deméter, diosa del ciclo agrícola—, quien igual que en la historia mitológica, al visitar el mundo de los humanos para cortar algunas flores es raptada por Hades, dios del inframundo. Este, obsesionado con ella, se la lleva al inframundo sin dejar ningún rastro.
La segunda historia presenta el caso real de Luz García, quien fue víctima de una red de trata de personas. “No solo desaparecimos de nuestras familias, del mundo que conocíamos. Poco a poco íbamos desapareciendo de lo que éramos, de lo que fuimos. Nos recordamos menos”, solloza Luz.
García, de 25 años de edad, fue privada de su libertad y buscada por su madre, Marina. Como Perséfone, también tuvo la fortuna de regresar con su familia.
La realización de la obra teatral representó un reto para la directora y el reparto de la puesta en escena, pues tuvieron que enfrentarse a la realidad de un país en donde, hasta el momento se han contabilizado 79 mil 656 personas desaparecidas, de las cuales 4 mil 442 son mujeres.
Como preparación, el equipo realizó una investigación en documentos y reportajes periodísticos con testimonios de mujeres que han logrado escapar de la trata en México, entre ellos estaba el de Luz García, que finalmente fue el elegido para la historia.
Foto: teatrounam | YouTube
Madres e hijas desaparecidas, el vínculo irrompible
Aunque la obra —y la realidad— muestren el fuerte lazo que existe entre las madres y sus hijas desaparecidas, también evidencian la ineficiencia del Estado y sus instituciones en función de la búsqueda de personas desaparecidas, de manera que las familias de las víctimas son quienes asumen esa responsabilidad.
Así, además de señalar la importancia de la colectividad en los procesos de búsqueda y acompañamiento de quien lucha por localizar a sus víctimas, la obra buscó representar a las madres que, ante la falta de acciones por parte del gobierno, son quienes buscan a sus hijas ante cualquier obstáculo y mantienen la esperanza, explicó Rocío Carrillo.
Es a través de Deméter y Marina que se da luz a la situación de muchas madres que dejan atrás la frustración y retoman con fuerza y esperanza la búsqueda de sus hijas; ¡Vivas las queremos!, gritan con fuerza las madres de las desaparecidas y su exigencia retumba en los oídos de la audiencia.
Esa fuerza es el mensaje que Las diosas subterráneas tiene como esencia: las mujeres somos fuertes, nos tenemos a nosotras y nadie nos va a lograr apagar. “No vamos a dejar de alumbrar, no olvidemos que tenemos ese poder, basta con un chispazo para incendiarlo todo” grita Luz García, como recordatorio para todas nosotras.
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Las diosas subterráneas fue adaptada al espacio virtual por la llegada de la pandemia por COVID-19, que afectó el proceso de montaje, por lo que está disponible de manera gratuita en YouTube.
Este trabajo fue elaborado por el equipo de Lado B y lo reproducimos como parte de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie.