PRI: cartuchos quemados aspiran a la gubernatura

Texto: Jesús Guerrero

Fotografía: José Luis de la Cruz / Archivo

7 de agosto de 2020

Chilpancingo

 

Luego de la derrota electoral que sufrió en el 2018, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se prepara para iniciar su proceso interno de elección a candidato a gobernador y de los tres que tienen esa aspiración detrás de ellos están los viejos grupos políticos de interés económico que son responsables de gran parte de la corrupción, impunidad e injusticias en Guerrero.

 

Hasta ahora, a menos de cinco meses que el tricolor elija a su abanderado, según los cálculos en el partido, debido a que el proceso electoral arranca en septiembre, en el abanico de aspirantes están el senador Manuel Añorve Baños; el secretario de Desarrollo Social del gobierno estatal, Mario Moreno Arcos, y el coordinador de la bancada del PRI en el Congreso local, Héctor Apreza Patrón.

 

Añorve Baños ya fue candidato a gobernador, ha sido dos veces alcalde de Acapulco y una vez diputado federal, y en el gobierno de José Francisco Ruiz Massieu fungió como delegado en Guerrero del Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras), además, en el gobierno interino (1996-1999) que encabezó su primo Ángel Aguirre Rivero, estuvo de secretario de Administración y Finanzas.

 

Fue jefe de campaña de Héctor Astudillo Flores cuando éste último ganó la elección a gobernador en el 2015.

 

Cuando fue candidato a gobernador perdió de forma estrepitosa frente a su primo Ángel Aguirre Rivero, otro priísta que cuando no obtuvo la nominación en su partido se fue al PRD, desde el que se impuso en las elecciones del 2011.

 

Añorve Baños se mueve en dos ejes: uno con el apoyo de Astudillo y el otro, a nivel nacional, con el ex gobernador de Sonora y ex jefe de la bancada del PRI en el Senado de la República, Manlio Fabio Beltrones.

 

También goza del respaldo de la ex gobernadora de Tlaxcala, ex líder nacional del PRI y actual senadora, Beatriz Paredes Rangel.

 

La otra opción, Mario Moreno Arcos, ha fungido como operador del PRI en tiempo de elecciones, actualmente es secretario de Desarrollo Social del gobierno de Astudillo Flores. Fue dos veces alcalde de Chilpancingo (2005-2008, 2012-2015) y una vez diputado federal.

 

Durante los dos últimos años de gobierno de Enrique Peña Nieto, Mario Moreno, estuvo como delegado en Guerrero del ISSSTE. Un cargo que debía tener un médico y no un contador privado como lo es Mario Moreno Arcos.

 

En el 2010, Moreno Arcos junto con el ex alcalde de Tlalixtaquilla, Sofío Ramírez Hernández, formaban parte del grupo para apoyar a Aguirre Rivero para que fuera candidato a gobernador del PRI en las elecciones del 2011.

 

Pero la dirigencia nacional del PRI conducido por el grupo de Manlio Fabio eligió a Manuel Añorve Baños como su abanderado.

 

Aguirre Rivero renunció al PRI y aceptó ser candidato del PRD-PT-MC a la gubernatura.

 

Ramírez Hernández también renunció a su militancia priísta pero Moreno Arcos no, quien desde el PRI operó electoralmente para captar votos a favor de Aguirre Rivero.

 

Fuentes del PRI aseguran que en caso de que Moreno Arcos sea el abanderado, éste le va a pedir a Aguirre Rivero que le regrese el favor de apoyarlo políticamente. Es por eso que el dos veces gobernador se ha pronunciado porque el PRD y el PRI se alíen para derrotar a Morena.

 

El originario del municipio de Olinalá, de donde fue alcalde durante el gobierno de René Juárez Cisneros, Héctor Apreza Patrón, es otra de las cartas que tiene el PRI para el 2021.

 

Apreza Patrón, quien en dos ocasiones ha sido diputado local, una de esas en la actual legislatura; también líder estatal del PRI y, del 2015 al 2018, secretario de Administración y Finanzas del gobierno de Astudillo Flores, se mueve con el apoyo del ex gobernador René Juárez Cisneros. El renejuarista coordina ahora la bancada del PRI en el Congreso local.

 

Cuando Apreza Patrón fue secretario de Administración y Finanzas era el que se encargaba de negociar con el Congreso local el presupuesto anual del gobierno de Astudillo Flores y el recurso millonario para “gestión social” que se les asignaba a cada uno de los diputados del PRI, PRD, PAN, PT, MC y PVEM. La única diputada de Morena de esa legislatura, María de Jesús Ramírez, denunció la práctica públicamente y también que nunca aceptó ese tipo de arreglos.

 

 

Cómo se mueven en la pandemia

Aun con la pandemia por la Covid-19, los aspirantes priistas se las han ingeniado para promoverse políticamente a través de las redes sociales o en visitas furtivas a domicilios.

 

En el caso de Moreno Arcos, aprovechando su cargo en la Sedesol estatal, visita casas en donde entrega apoyos a la gente bajo el argumento de que es una ayuda por la crisis sanitaria.

 

El senador Añorve Baños sube a su cuenta de Facebook las visitas que realiza a familias de colonias de Acapulco.

 

Además utiliza como estrategia política las críticas que hace a las acciones de gobierno de la administración federal que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador.

 

En esta pandemia, Apreza Patrón no es muy asiduo a publicar en su cuenta personal de Facebook, pero sí realiza reuniones con grupos de priístas para decirles de sus aspiraciones políticas, de acuerdo con versiones de gente del mismo partido.

 

Este 2 de agosto, el PRI renovó sus comités municipales de manera virtual en sólo 74 de los 81 municipios. Lo que significa en términos políticos la antesala del proceso electoral. Es una manera de que los grupos reúnan las fuerzas que necesitarán al momento de las candidaturas y alianzas.

 

Según la dirigencia estatal del tricolor, los municipios que se declararon desiertos porque no se presentó ninguna fórmula son Tlapehuala, Pungarabato, Alcozauca, Chilapa y Acapulco.

 

En el municipio de Acapulco se perfilaba como nuevo líder al ex perredista Ramírez Hernández, pero al final los grupos de priistas reventaron la elección.

 

En los municipios de Tlapa y Mochitlán, ninguna fórmula que se presentó a registrarse cumplía con los requisitos.

 

 

Un Frente Popular plantea el PRI para mantener la gubernatura

Después de la tunda electoral que sufrieron en las elecciones del 2018 –Obrador obtuvo un millón 200 mil votos, los senadores 700,000 y diputados locales 500,000 –, el PRI le apuesta a cuando menos dos estrategias para mantener la gubernatura:

 

Realizar de manera interna una encuesta abierta en donde la ciudadanía proponga el perfil que debe de reunir el candidato o la candidata. En esa encuesta estarán los nombres de los tres aspirantes priístas, Manuel Añorve Baños, Mario Moreno Arcos y Héctor Apreza Patrón.

 

Pero hay otro sector del PRI que pide se incluya el nombre del rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (Uagro), Javier Saldaña Almazán, como aspirante externo.

 

Saldaña Almazán no es militante del PRI, pero siempre ha estado ligado a este partido porque tiene relación con el grupo político del ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer.

 

En la cúpula nacional del PRI saben que en las elecciones del 8 de julio del 2021, en las que se renovarán 15 gubernaturas, incluida la de Guerrero, no podrán ganar solos y para eso planean alianzas con otros partidos.

 

Aquí en Guerrero, ya se habla de un Frente Popular en donde vayan aliados con el PRD y Movimiento Ciudadano, pero además con organizaciones sociales.

 

En estos meses de contingencia operan para conseguir que el PVEM acepte la alianza, antes siempre unido al PRI, pero ahora este partido se inclina por Morena.

 

El PRI analiza que con esa alianza electoral y, según ellos, la baja popularidad que tiene López Obrador, debido a que no ha podido enfrentar con éxito la pandemia por la Covid-19, podrían retener la gubernatura.

 

Además, evalúa uno de los priístas desde la primera línea del partido, Obrador no va en la papeleta electoral, razón por la que, cree, el candidato de Morena a la gubernatura no va a ganar, y sus posibilidades se amplían.

 

 

Guerrero 2024: elección sin decisión