Helguera, el diputado removido, reconoce que los diputados se repartieron 36 millones de pesos para gestoría
Texto: Marlén Castro
Fotografía: José Miguel Sánchez Cabrera
15 de enero del 2020
Chilpancingo
Los primeros abrazos que recibió Jesús Villanueva Vega, el nuevo coordinador de la Junta Política del Congreso local y de la bancada del Morena, fueron de los priístas Heriberto Huicochea Vázquez y de la tres veces diputada Alicia Zamora Villalva.
El apapacho priísta consumó el reacomodó de las fuerzas al interior de la bancada que debuta como fracción en esta legislatura, jugada política que todo el tiempo operó el partido del gobernador Héctor Astudillo Flores, a través del experimentado diputado Héctor Apreza Patrón.
A las seis de la tarde con veinte minutos, de guayabera blanca y pantalón negro, Villanueva Vega protestó como nuevo coordinador del Congreso local, ante la ausencia de un grupo de legisladores morenistas, entre ellos, el depuesto Antonio Helguera Jiménez.
Priístas, perredistas y la fracción de Morena que lidera Luis Enrique Ríos Saucedo, suplente del delegado del gobierno federal en Guerrero, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, aplaudieron colectivamente el cambio en la Jucopo, y por añadidura, en la coordinación de la bancada mayoritaria.
En entrevista antes de la consumación del cambio en la Jucopo, Helguera Jiménez, reconoció que en diciembre pasado 36 millones de pesos que había ahorrado la Cámara durante el 2019 se distribuyeron equitativamente entre los 46 legisladores para apoyar la gestoría en sus distritos, pero se negó a decir si ésta fue la causa que generó la pugna entre las dos fuerzas morenistas.
Cuando llegó Morena al Congreso ofreció cambiar los usos y costumbres de los partidos, entre ellos, la partida para gestoría social a la que tenían acceso los legisladores, recursos utilizados para promoverse políticamente.
Dos de tres sesiones para consumar un cambio anunciado
Este martes, el Congreso local celebró tres sesiones y varios episodios de cabildeo, algunos evidentes al público, otros tras bambalinas, pero al final, el aplauso grupal a Villanueva Vega evidenció una operación política conjunta.
En la primera sesión, que debía empezar a las once de la mañana pero se prolongó alrededor de dos horas, entre las lecturas de diversas iniciativas, varios diputados se movían de una curul a otra, buscando acuerdos. Los morenistas Arturo Martínez Núñez y Ríos Saucedo eran de los más activos, al igual que sus pares del PRI, Héctor Apreza Patrón, y del PRD, Bernardo Ortega Jiménez.
Alrededor de las dos de la tarde, Apreza Patrón y Villanueva Vega salieron al vestíbulo. Varios fotoperiodistas de la fuente capturaron el momento. Villanueva Vega, ex consejero electoral y ex presidente del Tribunal Estatal Electoral en periodos de gobiernos perredistas, escuchaba y asentía.
Villanueva Vega regresó al pleno y en seguida lo rodearon los legisladores acapulqueños Mariana Guillén, la morenista que manejaron en noviembre pasado como posible relevo de Helguera pero que no consiguió total consenso y por eso no se realizó el cambio; Moisés Reyes Sandoval, sin registro previo en política, sobrino del delegado en Guerrero del gobierno federal, el dos veces diputado Marco Antonio Cabada Arias, la primera vez llegó por el PRD, y Ríos Saucedo, quien en los corrillos parlamentarios, se dice, es el operador de Sandoval Ballesteros y el coordinador real de esta fracción de la bancada morenista.
Esta primera sesión era mero trámite. El objetivo era designar a los nuevos integrantes de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente, pues el Congreso entra en receso a partir del 17 de enero. Los acuerdos políticos ya establecidos generaron una mesa directiva para el periodo de receso idéntica a la del periodo ordinario. Se tomó protesta a los integrantes y se convocó a una segunda sesión.
La orden del día de la segunda sesión tenía sólo dos puntos: la toma de protesta del nuevo coordinador de la Jucopo y lectura del acta de un grupo de legisladores que desconocía ese nombramiento.
Alrededor de las seis de la tarde, el presidente de la Mesa Directiva, el perredista Alberto Catalán Bastida decretó un nuevo receso de cinco minutos para replantear la orden del día. Apreza Patrón, quien acompaña a todos los actos políticos al gobernador Héctor Astudillo, se activó de nuevo. Fue a ver a Arturo Martínez y Aristóteles Arroyo, el legislador morenista por la región de la Montaña y al sobrino de Sandoval Ballesteros. Platicaron largo rato. Cuando el grupo se desvaneció Mariana Guillén abrazó a Apreza Patrón de forma paternal.
Apreza Patrón se alejó del grupo e hizo una llamada telefónica, acción que realizó más de una vez durante este cabildeo a lo largo de las dos sesiones. Seguía en su llamada telefónica cuando Mariana Guillén y Cabada Arias subieron a comunicarle algo a Catalán Bastida, quien de inmediato reanudó la sesión.
La secretaria de la Mesa, la morenista Perla Xóchilt García Silva, por instrucciones de Catalán Bastida leyó el comunicado en el que una fracción de Morena, anunciaba la designación por mayoría de Villanueva Vega. Aunque el ambiente durante la primera sesión fue tenso por el anuncio de este cambio, nadie protestó, Helguera Jiménez y los legisladores que lo apoyaron, se ausentaron de sus curules.
Se llamó a Villanueva Vega para la protesta y cuando lo hizo priístas, perredistas, también de otras fracciones, y los morenistas que encabeza Ríos Saucedo gritaron ¡bravo! y aplaudieron.
Villanueva Vega caminó de regreso a su lugar. En su trayecto, los primeros que le extendieron los brazos, fueron los priístas Huicochea Vázquez y Zamora Villalva. Más adelante, se sumaron otros legisladores al apapacho, mientras la secretaria leía la comunicación que hizo llegar a la Mesa, la fracción morenista que se opuso a la destitución de Helguera Jiménez, entre ellos, el mismo Helguera Jiménez.
El breve documento firmado por nueve legisladores que desconocen a Villanueva como coordinador, argumentaron que son asuntos internos de la bancada, que no hubo una convocatoria para designar al nuevo coordinador, por lo que el cambio carece de legalidad.
Firmaron este oficio los diputados Adalid Pérez Galeana, Ossiel Pacheco Salas, Erika Valencia Cardona, Zeferino Gómez Valdovinos, Ricardo Castillo Peña, Carlos Cruz López, Teófila Platero Avilés, Alfredo Sánchez Esquivel y Antonio Helguera Jiménez.
Ya nadie escuchó esos argumentos, el murmullo que generó el paso de Villanueva Vega por las curules y las palmadas que recibía para felicitarlo fue más fuerte que la queja que leyó la secretaria Perla Xóchilt García Silva, por cierto, del mismo grupo de Ríos Saucedo.
Diputados se reparten 36 millones para sus labores de gestoría
Helguera Jiménez llegó a la primera sesión solo. Saludó a sus compañeros de bancada y se sentó a observar. Se le acercaron varios legisladores, intercambiaron con él comentarios, pero no se movió hasta que Villanueva Vega lo abordó. Salieron del recinto, atravesaron el vestíbulo y se encerraron varios minutos en el salón José Francisco Ruiz Massieu.
Cuando salieron, a Helguera Jiménez lo acorralaron los reporteros para hacerle una entrevista atropellada, Villanueva Vega siguió de largo.
–¿Cuáles fueron las diferencias con Pablo (Amílcar Sandoval)? Le preguntaron.
–Con el compañero Pablo no hay cosas que no se puedan salvar –respondió.
–¿Cuál era su posición con respecto al uso de los ahorros del Congreso?
–Hubo una economía de recursos y se llegó a un monto de 36 millones, que se llegó al acuerdo de distribuirlos para gestión entre todos los diputados para ayudas y obras…
–¿O sea regresaron a lo que se hacía en las anteriores legislaturas?
–No sé cómo era antes, pero lo que es importante es que el dinero se distribuya para todos.
Aunque se le preguntó, Helguera Jiménez no aceptó que las diferencias internas en Morena por el manejo de estos recursos fuera la causa de su destitución.
Un día antes, los legisladores de su bancada que pidieron la remoción, lo denunciaron ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por presunta malversación de recursos públicos y abuso de funciones.
El diputado sobrino de Sandoval Ballesteros denunció que Helguera Jiménez no les informó en qué se gastó el ahorro del 2019, el que para ellos era superior a 50 millones.